miércoles, 23 de noviembre de 2022

Habla el medio rural

 

La España vaciada llena Bruselas


Habla el medio rural

 

Por Francis Reina Corbacho

Rebelion / España

 | 23/11/2022 |

 

Fuentes: El Salto

Así fue la Jornada “Visión a largo plazo para las zonas rurales: retos para la Península Ibérica”, organizada por la europarlamentaria de Unidas Podemos en el grupo The Left, María Eugenia Rodríguez Palop. Colectivos extremeños y andaluces ponen voz al medio rural.

“Lo rural” es una urgencia, y Europa, lo sabe. Multitud de análisis, programas y estudios lanzados desde las instituciones europeas pretenden, desde hace años, conseguir unas “zonas rurales más fuertes, conectadas, resilientes y prósperas”, como se detalla en uno de los muchos documentos de la Comisión Europea acerca de este asunto. “Las directrices políticas de la presidenta von der Leyen destacan que las zonas rurales son una parte central de nuestra identidad y nuestro potencial económico. Apreciaremos y preservaremos nuestras zonas rurales e invertiremos en su futuro”, se lee en la primera parte del monográfico que los servicios de la Comisión dedicaron, en junio del año pasado, a las zonas rurales de la Unión.

Colectivos en la Jornada. María Artigas


Con este espíritu, Antonia Gámez Moreno, Jefa de Unidad en la Dirección General de Agricultura y parte de la Comunicación de la Comisión Europea, inauguró la Jornada “Visión a largo plazo para las zonas rurales: retos para la Península Ibérica”, organizada por la europarlamentaria de Unidas Podemos en el grupo The Left, María Eugenia Rodríguez Palop. Conferencias y debates protagonizados por multitud de colectivos del medio rural del sur de la península, sobre todo de Extremadura y Andalucía, y donde también hubo presencia de políticos extremeños como Irene de Miguel y Joaquín Macías (Unidas por Extremadura) o como Miguel Urbán, eurodiputado de Anticapitalistas.

“Existe un interés internacional sobre el desarrollo rural. Se promueven las zonas rurales no como problema sino como solución. En la OMS y la ONU, por ejemplo, ya se impone la ‘verificación rural’: es decir, examinar toda iniciativa legislativa con las gafas de lo rural para identificar las necesidades de estas zonas”, afirmó en la inauguración Gámez Moreno. En dicha apertura, destacó que los objetivos de la Comisión, de aquí a 2040, son “conseguir zonas rurales mejor conectadas, más prosperas y más sostenibles. Para ello hay una serie de iniciativas, como el Pacto Rural, un proceso para aumentar la cooperación y el desarrollo con todas las instituciones europeas”.

Antonia Gámez Moreno, Jefa de Unidad en la Dirección General de Agricultura y parte de la Comunicación de la Comisión Europea. The Left

Efectivamente, el Comité de las Regiones, el Comité Económico y Social Europeo, el Parlamento Rural Europeo y las redes en el marco de la política agrícola común y la política de cohesión, así como el Parlamento Europeo, la Presidencia del Consejo e interlocutores locales, regionales y estatales de Europa, aprobaron en junio de 2022 dicho acuerdo para, de esta forma, lograr “la amplificación de las voces rurales y ponerlas en la agenda política, estructurar la colaboración y el aprendizaje mutuo y fomentar el compromiso de actuar en favor de las zonas rurales”.

Sin embargo, la urgencia de las instituciones europeas con las zonas rurales contrasta con las fechas definidas para los balances de los pactos mencionados. A mediados de 2023, la Comisión hará evaluación de las medidas financiadas por la UE y los Estados miembros; el informe público que detallará el cumplimiento de las metas y el camino a seguir, que se realizará sobre la base del Plan de Acción Rural de la UE, se publicará a principios de 2024; los debates en torno al informe, dice la propia Comisión, contribuirán a la reflexión sobre la preparación de las propuestas para el período de programación de los años comprendidos entre, nada más y nada menos, que 2028-2034.

¿Y qué sucede con el aquí y el ahora? ¿Cuáles son las soluciones que Europa ofrece al mundo rural, más allá de las buenas intenciones? ¿Existe tiempo de espera? ¿Van las políticas europeas a cambiar de dirección? ¿De qué manera se va a fomentar la cohesión territorial? ¿Y a combatir la desigualdad? ¿Se van a crear oportunidades para que la juventud no emigre? ¿Será el trabajo digno y de calidad? ¿Mejorarán las infraestructuras y los servicios?

La visión de investigadores y expertos

En la primera mesa de debate de la Jornada, María Dalli Almiñana, investigadora del Instituto de Derechos Humanos de la Universidad de Valencia, consideró el derecho a la salud como una de las cuestiones prioritarias en las zonas rurales. “El derecho a la salud incluye el acceso a las infraestructuras sanitarias, un derecho reconocido, por ejemplo, en el artículo 35 de la Carta de los Derechos Fundamentales de la Unión”. La universalidad del derecho a la salud, “frente a las posturas que niegan que los derechos sociales sean para todos y para todas”, es crucial. Y lo es tanto a nivel sanitario como a nivel material, puesto que “la desigualdad económica y social entre los sectores de una población como la rural se ha analizado como factor perjudicial para los indicadores de salud de esas mismas sociedades”. Que los grupos excluidos de la cobertura sanitaria, como pueden ser aquellos que viven en zonas rurales, tengan garantizado uno de los derechos más fundamentales debería ser uno de los principales objetivos de cualquier institución democrática.

María Dalli Almiñana, investigadora del Instituto de Derechos Humanos de la Universidad de Valencia. María Artigas

Para Alicia Valero Delgado, profesora titular de la Universidad de Zaragoza y directora del grupo de Ecología Industrial en el Instituto Centro de Investigación de Recursos y Consumos Energéticos, no debemos perder de vista la cuestión energética. “¿Cómo alimentar a una población de 10.000 millones de individuos y satisfacer las necesidades de tanta gente? ¿Hay suficientes recursos?”. Y es que existe un problema en aumento, puesto que habitamos un planeta limitado. “Tenemos pérdida de la fertilidad (1/3 de la tierra está gravemente degradada, la degradación del suelo es una amenaza para más del 40% de la superficie terrestre)”, y la “agricultura intensiva hace que el consumo de fertilizantes se haya multiplicado en las últimas décadas”. De hecho, según la profesora, “hemos sobrepasado cuatro de los nueve procesos básicos de la Tierra”.

Además, los nuevos materiales para la economía “verde” son aerogeneradores y fotovoltaicas, “peligrosas ambientalmente por su contaminación; la instalación masiva de renovables supone áreas de sacrificio en áreas rurales y despobladas”. No, no hay recursos suficientes para la transición energética que se está planteando. “Es inviable”. La profesora alertó así de los límites materiales de la transición energética y las condiciones que pueden existir a corto, medio y largo plazo.

Alicia Valero Delgado, profesora titular de la Universidad de Zaragoza y directora del grupo de Ecología Industrial en el Instituto Centro de Investigación de Recursos y Consumos Energéticos. María Artigas

Por su parte, Albert Massot, investigador de la Dirección General de Políticas Internas en la Comisión de Agricultura del Parlamento Europeo, explicó que estábamos en una era de cambios globales acelerados. “Los nuevos desafíos (económicos, tecnológicos, energéticos, climáticos, sanitarios y alimentarios) nos obligan a cambiar nuestra visión sobre la agricultura, la ruralidad y el papel de las políticas públicas”.

Las políticas agro-rurales alimentarias y comerciales, la interconexión entre consumo, I+D+I, oferta y el acceso a los recursos, el cambio climático, la cuestión energética, las brechas digitales y tecnológicas (“Hay que garantizar las dimensiones social y territorial del cambio sin excluir al mundo rural”) o el desafío de la despoblación (“El 84% del territorio está habitado por el 15,9% de la población”), fueron algunos de los puntos que el investigador subrayó en su discurso.

No olvidó las Problemáticas agroecológicas (“El regadío consume el 70% del agua”), el relevo generacional (“Existen constantes caídas de activos de la agricultura familiar y una insuficiente entrada de jóvenes”), la crisis de rentas (particularmente en la ganadería), el abandono de tierras (“España es el país con un mayor riesgo de abandono de tierras agrarias de la UE”), o el desafío del reparto del valor añadido de la cadena. Para Massot, los pactos europeos son un buen diagnóstico y, al mismo tiempo, un simple reagrupamiento de instrumentos ya existentes en las políticas comunes (PAC, Cohesión, Mecanismo de Recuperación y Resiliencia, Horizonte Europa, Erasmus+, Conectar Europa, Pueblos Inteligentes, LIFE, etc.), aunque “hay dos iniciativas novedosas: el principio de verificación rural (análisis de impacto de las iniciativas públicas y privadas en el espacio rural) y el Observatorio de las zonas rurales de la UE”.

Albert Massot, investigador de la Dirección General de Políticas Internas en la Comisión de Agricultura del Parlamento Europeo. María Artigas

Como respuestas a los retos que enfrenta el mundo rural, Massot propuso crear un eje de “cohesión rural” dentro de la política regional, así como aprovechar la Ley 45/2007, de 13 de diciembre, para el desarrollo sostenible del medio rural, incluyendo los ejes de vivienda, género e integración de neorrurales e inmigrantes; definir territorios prioritarios con criterios objetivos (densidad, envejecimiento, natalidad); elaborar planes paralelos al Plan Estratégico de la Política Agraria Común para España y al Programa de Desarrollo Rural contra el despoblamiento, así como un Estatuto de pequeños municipios.

Frente a la transición energético-climática, expuso la idoneidad del fomento de los biocombustibles de origen no alimentario, y la necesidad de establecer cambios en la ordenación del territorio e introducir la verificación rural de grandes proyectos energéticos. Propuso un esfuerzo sostenido de asesoramiento a agricultores y fomentar la innovación tecnológica verde con un modelo inclusivo. Ante el ajuste estructural, la crisis de rentas y el reto agroecológico, Massot cree que hay que reformar el sistema de pagos directos de la PAC, así como orientarse a una aplicación de los Planes Estratégicos de carácter contractual, la fijación de objetivos socioeconómicos cuantificados y la protección del modelo agroecológico con, por ejemplo, tasas de carbono, cláusulas espejo, etc.

Atentos y atentas a los distintos puntos de vista de las expertas en la mesa, decenas de colectivos del medio rural escuchaban, pacientes y tomando nota. A veces, “lo rural” se entiende de manera monolítica, estereotipada y, por qué no decirlo, de forma distorsionada cuando quienes miran adolecen de urbanocentrismo. Allí estaban agricultores, ganaderas, jóvenes, autónomas, personal sanitario, educadores, trabajadores todos y todas, para tomar la palabra. No habían venido a escuchar, habían hecho 2.000 kilómetros para tomar la palabra.

Los colectivos responden

En el turno de preguntas de los colectivos presentes en las Jornadas, tras la intervención de Antonia Gámez Moreno, ya se atisbó la distancia que separan las pretensiones europeas con las realidades cotidianas de quienes viven y trabajan en las zonas rurales. Con las expertas e investigadoras, la mesa de debate posterior —sobre sector primario, atención a la salud y energía—, hubo más entente. En el descanso previo a la segunda mesa, la mayoría de los colectivos dialogaban sobre el abismo existente entre quienes dicen luchar contra las problemáticas rurales y quienes luchan día a día y en el tajo por su futuro.

Miembro de ASOLITE enseña una botella de aceite en la sesión. The Left

Por fin llegaba la oportunidad de hablar. “Política Agrícola Común, incidencia de las reformas educativas y cambio climático en el sur rural” subía a la mesa de ponencias a Víctor Bermúdez, profesor, Andreia Galvão, estudiante y activista, y Mª Inmaculada Idáñez, de la Confederación de Mujeres del Mundo Rural. Moderó el debate Marisa Matías, eurodiputada de The Left.

Educación

Para Víctor Bermúdez, “hay que llenar de Educación la España Vaciada”. Para ese fin, a su juicio, hay que contemplar tres ejes fundamentales: el ecosocial (para un medio rural más resiliente), el socioeconómico (para un medio rural más próspero) y el cívico-político (para un mayor compromiso con el medio rural).

“Jamás hemos podido contemplar orgánicamente en los currículums educativos cosas como la Educación para el emprendimiento, la economía sostenible, etc. Sin embargo, podemos ver si nos enfocamos en las materias, cómo chicos/as estudiarán cosas ausentes antes como la relación entre desigualdad, biodiversidad, economía circular, o conceptos como comunidades resilientes o los derechos de los animales”.

Víctor Bermúdez, profesor de secundaria, asesor técnico del Ministerio de Educación y miembro del Consejo Escolar de Extremadura. The Left

Ahora, dados los avances curriculares y legislativos, según Bermúdez, “ninguna docente puede eximirse o quitarse de encima este tipo de contenidos desde Infantil hasta Bachillerato; contemplar lo rural (paisaje rural, impacto humano, estilo de vida tradicional, conservación entorno, éxodo rural, la España vaciada…) son elementos del cuerpo principal de la Ley, nada de retórica”.

Existe, entonces, “una ruptura casi revolucionaria”, aunque para el docente y miembro del Consejo Escolar de Extremadura, “no basta con todo esto. Es imprescindible que los objetivos se refieran de manera directa a los entornos rurales”, y que lo hagan de manera mucho más estructurada y unitaria. “¿Por qué no introducir en los centros un área concreta? Hay que reforzar la escuela rural, y eso ha de significar una dotación mayor que la escuela urbana, más allá de lo material, dotación en recursos humanos, integración, conciliación familiar, etc.”.

Bermúdez hizo hincapié en la educación para la sostenibilidad como principal novedad; y en relación con la escuela rural, lo que más destacó como elemento más valioso para reforzarla fueron dos cosas: la discriminación positiva en la cesión de recursos y, sobre todo, convertirla en una escuela de vanguardia, innovadora y de calidad, que atraiga a las familias y a los mejores docentes. Claves, todas, “para devolver la vida a nuestras zonas rurales”.

Clima

Andreia Galvão, estudiante y activista de la Huelga Estudiantil por el Clima, puso el foco en la lucha contra el cambio climático como aspecto fundamental a la hora de reflexionar sobre las zonas rurales. Para Galvão, es urgente reestructurar nuestras sociedades y actuar con premura ante “el mayor desafío que condiciona nuestro tiempo”. En esa reestructuración, las perspectivas feministas, antirracistas, contra el colonialismo, y enfrentadas al modelo de consumo y capitalista imperante, se antojan imprescindibles para “subvertir nuestra relación con la Naturaleza”.

Andreia Galvão, estudiante y activista de la Huelga Estudiantil por el Clima. María Artigas

Alejarse del “capitalismo verde de la COP” no es negociable: el futuro pasa por actuar en la dirección opuesta a los monopolios, la acumulación y el crecimiento insostenible. “El desastre ecológico que se desarrolla en el mundo ocasiona emigración, pobreza, refugiados climáticos, y pone en riesgo a las comunidades rurales, como ha sucedido con la explotación del litio en Portugal”. El futuro será ecosocialista o no será.

Campesinado y mujer

Si hay un conjunto de políticas que condiciona el sistema agroalimentario tanto a nivel local, regional, como europeo, esa es la Política Agraria Común (PAC). María Inmaculada Idáñez, presidenta de la Confederación de Mujeres del Mundo Rural (CERES), denunció la discriminación de género y otras muchas deficiencias de este marco fundamental del sistema institucional de la UE.  “La PAC no tiene perspectiva femenina. Las mujeres somos minoritarias en el sector agrario (en titularidad y propiedad)”.

María Inmaculada Idáñez, presidenta de la Confederación de Mujeres del Mundo Rural (CERES). María Artigas

Como los fondos se destinan a pagos directos por unidad de superficie, y la mayoría de los propietarios son terratenientes, grandes empresarios y, además, hombres, se da la injusticia de tener “tierras en propiedad de hombres, pero trabajadas por mujeres. Las mujeres no recibimos la PAC porque no tenemos la titularidad. Los derechos van a los hombres. Las mujeres mayores de 65 años sí cobran la PAC porque se quedan viudas. Entonces, los derechos pasan a las mujeres. Si hablamos de mujeres jóvenes, muy pocos grupos cobran la PAC. Queremos una política más social”. Esto también tiene relación con la despoblación: “las mujeres figuran como ayudas familiares o amas de casa, pero no como titulares de las explotaciones. La PAC anterior no contemplaba que la despoblación tiene que ver con que las mujeres se van. Queremos una PAC que nos diga que podemos trabajar, vivir y parir en nuestros pueblos”.

Idáñez criticó que los análisis cayeran en la trampa del estereotipo y del prejuicio. Sobre todo, si desconocían la realidad del campo. Reivindicó, por tanto, el derecho a quedarse y la necesidad de reconocimiento: “En las tierras no nos quedamos los que no valemos; nos quedamos los que adoramos nuestro trabajo. Somos profesionales de la agricultura. Gracias a nosotras la sociedad y el mundo entero puede comer”.

En el futuro más inmediato, la supervivencia de agricultoras, campesinas, ganaderas, jornaleras, pasa por cambiar el modelo. Y hay que hacerlo ya. “Proponemos mirar a las personas, no solo a la tierra y a lo económico. Tenemos que poner a las personas, y a las mujeres, en el centro. Queremos cobertura laboral, derechos… Queremos que los de la PAC tengan los zapatos llenos de barro”. Y sentenciaba antes de un aplauso unánime: “Se ha puesto de moda hablar de lo rural. ¿Se puede poner de moda pagarnos justamente y la dignidad laboral?”.

Conclusiones

En la mesa final, después de una comida de confraternización y camaradería —donde la empatía con las problemáticas de las múltiples ramas que componen el árbol de “lo rural” se convirtió, de hecho, en otro espacio de debate y reflexión—, cobraron protagonismo distintas experiencias de la ruralidad extremeñoandaluza: Pía Sánchez, ganadera, Edvard Martín, productor de alimento ético, Miguel Ángel Sánchez, en defensa y del Hospital de Llerena, y Manuel Aguilar, en defensa de la Sierra del Becerrero, nos hablaron del significado de “ser un ciudadano en la España vaciada”. Antes de sus intervenciones se proyectó el documental “Mujeres Rurales. La lucha por el territorio al sur de Europa”, elaborado por María Artigas y Sato Díaz.

Última mesa de la Jornada. Edvard Martín, Pía Sánchez, María Eugenia, Miguel Ángel Sánchez y Manuel Aguilar. María Artigas

En su intervención, Pía Sánchez, presidenta de la Federación Española de la Dehesa (FEDEHESA), señaló “la incongruencia de las políticas europeas” y la “carencia de concepto holístico en las políticas de biodiversidad”. La ganadera defendió el modelo de ganadería extensiva y la necesidad de regenerar el suelo mediante el ganado, considerando la tierra el verdadero productor de la Vida en mayúsculas. “El fin es el suelo. Cuando lo miras y descubres qué hay debajo, qué es lo que produce, te das cuenta de todo lo que hay que potenciar. La consecuencia será todo lo demás: alimentos, animales sanos, vida”. Los beneficios medioambientales, la creación de empleo y el acervo natural y cultural, fueron puestos en valor por Pía Sánchez, mujer, ganadera, defensora de la Naturaleza y firme creyente en el medio rural como espacio “para quien quiera vivir una vida auténtica”.

Pía Sánchez, presidenta de la Federación Española de la Dehesa (FEDEHESA). María Artigas

Por su parte, Edvard Martín Sousa Holm, de la Asociación Nacional de Productores de Alimentos Éticos, contó su experiencia personal y profesional al frente de una empresa distinta, donde la producción y el beneficio no está reñido con la ética, la calidad y el cuidado. “A pesar de las trabas burocráticas y la difícil relación con la Administración, tenemos empresas responsables con el Medio Ambiente”. Al frente de ANPAE, la Asociación Nacional de Productores de Alimentos Éticos, Sousa explicó cómo criar animales en libertad, en la dehesa extremeña, disfrutando de un ecosistema único, no solo puede convertir tu producto en uno de los mejores del mercado (de hecho, su patería cuenta con la primera licencia de producción de Foie Gras ecológico del mundo), sino que, además, “hace que estés en armonía con la Naturaleza y contigo mismo”. Los sistemas éticos de producción son otra de las muchas posibilidades que te concede el medio rural.

Edvard Martín Sousa Holm, de la Asociación Nacional de Productores de Alimentos Éticos. María Artigas

Miguel Ángel Sánchez Rafael, de la Plataforma en auxilio del hospital comarcal de Llerena, comenzó su presentación con una frase que bien podría resumir la Jornada entera: “Ser pocos no resta derechos”. Parte de la Campiña Sur, “una de las zonas más afectadas por la migración”, Sánchez defendió la necesidad de las infraestructuras sanitarias en el medio rural, así como la condición pública, gratuita y de calidad de las mismas. “Vivir en una zona apartada no nos tiene que dejar sin derechos como la Sanidad. Las enfermedades nos atacan a todos por igual, vivamos donde vivamos. Por desgracia, los que vivimos en las zonas rurales, también vamos a sufrir cáncer, los tumores van a necesitar quimioterapia, vamos a necesitar ayuda. Nuestros mayores también pueden sufrir cualquier fractura. De ahí la necesidad de los hospitales comarcales”.

Miguel Ángel Sánchez Rafael, de la Plataforma en auxilio del hospital comarcal de Llerena. María Artigas

Contra los agravios que sufre el Hospital (como por ejemplo el cierre del servicio de Urgencias de Traumatología los fines de semana, la inexistencia de Cirugía Mayor o la desaparición de la Unidad del Dolor), y, por ende, todos los ciudadanos y ciudadanas de Llerena, el portavoz de la Plataforma se lamentó de la falta de escucha por parte del Ejecutivo extremeño. De seguir así, “asistiremos al entierro de nuestros pueblos y nuestras tierras”.

Para cerrar la Jornada, Manuel Aguilar de la Cruz, de la Plataforma Ciudadana por la Defensa de la Sierra de Becerro, Sevilla, hizo un discurso contra las macrorrenovables por su repercusión negativa, como por ejemplo el emplazamiento, la cantidad de superficie afectada o lo concerniente a la calidad de los cultivos. Como paradigma, el 1.102.500 de paneles fotovoltaicos de 400W proyectados en Navazuelo, Granada. “El despliegue de megaplantas de renovables supone una pérdida irreversible de biodiversidad”.

Manuel Aguilar de la Cruz, de la Plataforma Ciudadana por la Defensa de la Sierra de Becerro, Sevilla. María Artigas

Añorante de sistemas descentralizados, donde se abogue por el autoconsumo y, de manera generalizada, por la democratización de la energía, “lo único que puede darte independencia de las grandes empresas”, el portavoz de la Plataforma resumió su intervención con una letra de El Cabrero: “Muchos prometen la luna hasta llegar al poder, muchos prometen la luna y cuando arriba se ven, no escuchan queja ninguna y te tratan con el pie”.

Al día siguiente, acabada ya la Jornada, todos los y las participantes visitaron el Parlamento Europeo. De vuelta en el avión, la resaca emocional de una Jornada intensa no rebajaba la condición crítica de quienes regresaban a casa. “Esta gente sabrá hacer leyes, pero no saben pelar una naranja”, dijo alguien en una de las sesiones. La sabiduría no está en la burbuja institucional europea, está en el medio rural.

Jornada “Visión a largo plazo para las zonas rurales: retos para la Península Ibérica”, Bruselas. María Artigas

ASOLITE, Ganaderas en Red, Plataforma Tren Extremadura, Movimiento Infoca, Federación Arroceros de Sevilla, el Bloco de Esquerda, Plataforma por el Monte Andaluz, ANPAE, Macrorenovables No, CERES, Extremeñería, FADEMUR, Plataforma No a la Mina de Cañaveral, Plataforma por un Tren que Vertebre y Enfríe el Planeta, Plataforma SOS Primaria, agricultores, jornaleras, ganaderos, maestras, sanitarios, cooperativistas… la sal de la Tierra. Más le vale a Europa y al Mundo escuchar a quienes labran la vida.

Fuente: https://www.elsaltodiario.com/habla-el-medio-rural/la-espana-vaciada-llena-bruselas-habla-el-medio-rural

 

75 años de la CIA en Ucrania (1)

 

75 años de la CIA en Ucrania (1)

 

DIARIO OCTUBRE / noviembre 21, 2022


Los medios de comunicación han construido una narrativa sobre la “guerra de Putin” que enmascara la expansión imperialista de Estados Unidos en Europa del Este. Se trata de un esfuerzo completamente orwelliano para proyectar sobre Rusia lo que Estados Unidos y su principal aliado imperial, el Reino Unido (que un periodista británico ha descrito como “el remolcador de Estados Unidos”), han estado haciendo continuamente desde 1945, de hecho, durante siglos.

 

Mirando hacia atrás, Estados Unidos, bajo Truman, iniciaron la política de convertir a los enemigos (Alemania, Japón) en amigos y a los amigos (la importante alianza de guerra con la URSS) en enemigos. La CIA, creada en 1947, fue el principal instrumento clandestino de esta política, colaborando estrechamente con la Organización Neonazi de Nacionalistas Ucranianos (OUN) para llevar a cabo acciones de sabotaje, división y desestabilización del Estado soviético.

La OUN, en particular la facción dirigida por el aliado alemán Stepan Bandera y su segundo al mando, Yaroslav Stetsko, OUN-B, era una organización violentamente antisemita, anticomunista y antirrusa, que colaboró con la ocupación nazi y participó activamente en la masacre de millones de polacos, judíos ucranianos y comunistas étnicamente rusos y ucranianos en la región. Sin embargo, el Washington Post trató a Stetsko como un héroe nacional, un “patriota solitario”.

La alianza entre la OUN y Alemania en 1941 fue apoyada por los dirigentes de las iglesias ortodoxas y greco-católicas ucranianas. El arzobispo de esta última, Andrey Sheptytsky, escribió una carta pastoral en la que decía: “Saludamos al victorioso ejército alemán como liberadores del enemigo. Presentamos nuestros obedientes respetos al gobierno que se ha erigido. Reconocemos al Sr. Yaroslav Stetsko como jefe de estado… de Ucrania”.

Stepan Bandera

Con motivo de la invasión alemana de la Unión Soviética, la OUN colocó carteles en la ciudad ucraniana occidental de Lvov que decían: “No tiren sus armas ahora. Tómalos en tus manos. Destruyan al enemigo…. ¡Pueblo! ¡Saber! Moscú, Polonia, los húngaros y los judíos son sus enemigos. ¡Destrúyanlos!… ¡Gloria a Ucrania! ¡Gloria a los héroes! ¡Gloria al líder! [Bandera]”

En este llamamiento a la limpieza étnica no se menciona a los alemanes que ocuparon Ucrania en su momento, pero los propagandistas fascistas y neonazis que ahora hacen la guerra en la región del Donbas presentan a sus antepasados como héroes por defender el nacionalismo ucraniano contra los soviéticos y Alemania. El Pentágono ha presionado con éxito al Congreso para que levante las restricciones sobre el entrenamiento y la asistencia militar a grupos, como el Batallón Azov, de ideología fascista o neonazi.

Como en el pasado, la política exterior estadounidense está dispuesta a acoger a estos sectores en su círculo de aliados. El 16 de diciembre de 2021, un proyecto de resolución de la Asamblea General de la ONU fue catalogado como “Lucha contra la glorificación del nazismo, el neonazismo y otras prácticas que contribuyen a alimentar las formas contemporáneas de racismo, discriminación racial, xenofobia y formas conexas de intolerancia”.

Se adoptó por una votación registrada de 130 votos a favor (principalmente el Tercer Mundo, que constituye la gran mayoría de la población mundial), 51 abstenciones (principalmente la Unión Europea, Australia, Nueva Zelanda y Canadá) y dos en contra, ambas de Ucrania y Estados Unidos. Los países de Europa Occidental que Hitler conquistó y ocupó no condenarían las manifestaciones actuales del nazismo y el fascismo.

Truman: los orígenes de la CIA

Harry Truman, el infame senador, dijo en 1940, en respuesta a la Operación Barbarroja, que “si vemos que Alemania está ganando, debemos ayudar a Rusia, y si Rusia está ganando, debemos ayudar a Alemania y dejar que mate todo lo que pueda”. Esto demuestra la poca consideración que tenía por el pueblo ruso y otros pueblos soviéticos, lo que se hizo más evidente cuando llegó a la presidencia.

Durante su mandato en la Casa Blanca, Estados Unidos ayudó a reconstruir la capacidad industrial de Europa Occidental (en gran medida para evitar que comunistas y socialistas ganaran las elecciones), pero también lanzó una guerra contra Corea del Norte, destruyendo prácticamente todas las estructuras del país mediante bombardeos, incluso con armas incendiarias y napalm.

Lanzó la Guerra Fría, aumentó masivamente el presupuesto militar, organizó la OTAN y utilizó armas atómicas sobre poblaciones civiles en Hiroshima y Nagasaki, en gran medida para evitar que los aliados soviéticos ganaran territorio en Japón en los últimos días de la guerra.

Quizá la iniciativa más destructiva de Truman fue la creación de la CIA, un monstruo que, en su opinión, se había descontrolado, y que le dijo a un amigo: “Nunca habría aceptado la creación de la Agencia Central de Inteligencia en cuarenta y siete años si hubiera sabido que se convertiría en la Gestapo estadounidense”, aunque como presidente apoyó sus actividades clandestinas en Europa del Este.

El objetivo inmediato era la Ucrania soviética, que la CIA esperaba, a través de sus proyectos clandestinos, “romper” con saboteadores tras las líneas enemigas.

Su misión fue una transferencia de la agencia de acción secreta de la Segunda Guerra Mundial, la OSS, que había trabajado con grupos partisanos que resistían la ocupación nazi. En Ucrania, Estados Unidos simplemente dio la vuelta a la tortilla apoyando a las organizaciones insurgentes nazis que luchaban contra la Unión Soviética, el país que acababa de salvar a Europa del azote del Tercer Reich de Hitler.

El plan de la CIA, en el marco de sus operaciones de “stay behind” en Europa Central y Oriental, consistía en lanzar en paracaídas a los ucranianos de los grupos ultranacionalistas, en particular de la OUN-B, lo que implicaba el contrabando de armas, el uso de transmisiones de comunicación secretas, espías, comandos, bandolerismo, asesinatos y sabotajes.

Un historial secreto desclasificado de la CIA muestra que la Agencia se negó a extraditar al criminal de guerra de la OUN Bandera a los soviéticos para preservar el movimiento clandestino y los esfuerzos de desestabilización en Ucrania.

En cambio, dos ramas de la CIA, la Oficina de Coordinación de Políticas (OPC) para las operaciones encubiertas y la Oficina de Operaciones Especiales (OSO) para los proyectos clandestinos a los que el gobierno estadounidense daba cobertura, protegieron a la OUN y trabajaron estrechamente con el Ejército Insurgente Ucraniano (UPA) antisoviético “en actividades de guerra psicológica dirigidas contra objetivos polacos, checoslovacos y rumanos en la frontera ucraniana”.

El OPC y la OSO “están de acuerdo en que la organización ucraniana [Consejo Supremo de Liberación de Ucrania], órgano de gobierno de la OUN, ofrece oportunidades inusuales para penetrar en la URSS y ayudar al desarrollo de movimientos clandestinos detrás del Telón de Acero.

La operación de la CIA recibió el nombre en clave de Pbcruet-Aerodynamic, basado en un documento de alto secreto fechado el 17 de junio de 1950.

LA OUN

El congreso del partido de la OUN de agosto de 1939 abogó por un estado “étnicamente uniforme”, concepto que se intensificó después de 1941 con su compromiso de una “operación de purificación contra todos los enemigos de la raza”. Los judíos de Ucrania, que sumaban alrededor de 1,5 millones, fueron prácticamente aniquilados por los alemanes, ayudados por el Ejército Insurgente Ucraniano de la OUN, la policía ucraniana y los ciudadanos ucranianos de a pie. La OUN estaba compuesta por una serie de fascistas ucranianos, nazis y otros elementos extremistas, pero también por Guardias Hlinka eslovacos, SS ucranianos de la 14 División de Granaderos de las Waffen-SS (Galicia) y SS alemanes mercenarios.

El asesinato masivo de polacos (estimado entre 100.000 y 200.000) se intensificó en 1943, con la participación activa del UPA. La OUN-UPA también colaboró con los alemanes para exterminar a miles de rusos ucranianos. Su autoproclamado “primer ministro”, Yaroslav Stetsko, describió a los rusos como una raza bárbara, no europea, descendiente de los mongoles y los hunos.

Después de la guerra, Estados Unidos no vio ningún problema en colaborar estrechamente con Stetsko, quien, en su propia biografía (1941), escribió: “Considero que el marxismo es un producto del espíritu judío, que fue aplicado en la prisión de los pueblos moscovitas por el pueblo moscovita-asiático con la ayuda de los judíos. Moscú y la judería son los mayores enemigos de Ucrania y los portadores de las corruptas ideas internacionales bolcheviques… Por lo tanto, apoyo la destrucción de los judíos y la oportunidad de llevar a Ucrania los métodos alemanes de exterminio de los judíos impidiendo su asimilación”.

Esto ocurrió un año después de que el hombre de Oliver North y futuro presidente de la Liga Anticomunista Mundial, John Singluab, visitara la sede de la OUN-B/ABN de Yaroslav Stetsko en Munich y hablara en la fiesta de cumpleaños simulada de la UPA en el Capitolio.

Retrospectiva

A principios de la década de 1950, después de lanzar en paracaídas a 85 agentes en Ucrania, tres cuartas partes de los cuales fueron capturados, la CIA admitió que el proyecto era un fracaso estrepitoso. Esto no impidió que los guerreros de la Guerra Fría utilizaran mercenarios para efectuar cambios de régimen en otros lugares, especialmente en el fracaso de Bahía de Cochinos una década después. Una vez aplastada la insurgencia ucraniana, muchos banderistas, entre ellos Mykola Lebed, uno de los fundadores de la OUN y teniente de Bandera entrenado por la Gestapo en métodos de tortura despiadados, emigraron.

Lebed, que había sido ministro de Asuntos Exteriores de la organización y jefe de su célebre policía secreta, fue descrito por los militares estadounidenses como un “conocido sádico y colaborador de los alemanes”. Después de la guerra, emigró a Munich, donde desempeñó un importante papel en la nueva Radio Europa Libre, el órgano de propaganda financiado por Estados Unidos que emitía a Europa del Este y que estaba dirigido en secreto por la CIA. A la RFE se le unieron Radio Liberty (también dirigida por la CIA y dirigida a la Unión Soviética) y la Voz de América para transmitir no sólo propaganda sino también mensajes codificados unidireccionales a los saboteadores “dejados atrás”.

Durante la guerra, Lebed fue, al parecer, un buen estudiante y el favorito de la Gestapo alemana. Más tarde, reubicado en Múnich, Lebed disfrutó del patrocinio (al igual que Bandera) del oficial de inteligencia nazi Reinhard Gehlen, que a su vez tenía estrechos vínculos operativos con la CIA.

Gehlen se convirtió entonces en el jefe de la inteligencia de Alemania Occidental, empleando a los nazis con los que había trabajado durante la guerra y ayudando a la CIA compartiendo información sobre Europa del Este. Cuando Lebed se enemistó con la OUN-B en Alemania después de la guerra, la CIA lo llevó de contrabando a Estados Unidos junto con otros muchos ultranacionalistas ucranianos.

Con el respaldo del director de la CIA, Allen Dulles, Lebed trabajó en Nueva York (y vivió en el acaudalado condado de Westchester) bajo un nombre falso como oficial de inteligencia antisoviético y se le concedió la ciudadanía. Los derechistas ucranianos del pasado y del presente han sido durante mucho tiempo instrumentos de la política de la Guerra Fría.

“Los antiguos miembros de la resistencia ucraniana que se encuentran ahora en Estados Unidos”, escribió la CIA en un documento de alto secreto de 1950, “serán explotados al máximo”.

Al comienzo de la Guerra Fría, cientos, si no miles, de nazis, incluidos criminales de guerra como el oficial de las SS Otto von Bolschwing (uno de los principales organizadores de la Solución Final y adjunto de Adolf Eichmann), fueron llevados a Estados Unidos desde Alemania, Ucrania, los Balcanes, los Estados bálticos y Bielorrusia.

Entre ellos estaba también Adolf Heusinger, “uno de los muchos altos cargos nazis y fascistas que se habían integrado en las redes militares y de inteligencia estadounidenses”. Heusinger había sido Jefe de Estado Mayor del ejército de Hitler y de 1961 a 1964 fue nombrado Presidente del Comité Militar de la OTAN. La transición de nazi de alto rango a comandante militar del “mundo libre” fue, pues, perfecta.

Mientras tanto, la exigencia de Bandera de tener el control total de la OUN provocó fricciones dentro de la dirección fascista con sede en Alemania. En 1950 Estados Unidos y Reino Unido planearon operaciones conjuntas en Ucrania, pero la CIA decidió trabajar más estrechamente con el ZP/UHVR (la representación en el extranjero del Consejo Supremo de Liberación de Ucrania, la organización que aglutinaba a todas las formaciones nacionalistas de derechas), mientras que el MI6 británico hizo de Bandera su principal contacto entre los ucranianos.

Cuando Bandera fue ejecutado en 1959 después de que Estados Unidos se negara a extraditarlo a la Unión Soviética por crímenes de guerra, Stetsko asumió la dirección de la OUN.

Con el colapso de la Unión Soviética en 1991, Estados Unidos pensó que tenía a Rusia a su alcance. Bajo el gobierno autocrático de Boris Yeltsin, que se alimentaba de vodka, se invitó a Estados Unidos a dirigir un programa neoliberal de “terapia de choque”, que condujo a la destrucción total de la economía rusa.

El capitalismo al estilo estadounidense ha conducido a una grave depresión con desempleo masivo, caída de los salarios, pérdida de las pensiones, adquisición por parte de los oligarcas de industrias antes controladas por el Estado, aumento de la desigualdad y la pobreza, aumento del alcoholismo y una importante disminución de la esperanza de vida.

Aunque Yeltsin opuso cierta resistencia, el gobierno de Clinton consiguió ampliar la OTAN a Polonia, la República Checa y Hungría, violando los acuerdos alcanzados entre George H.W. Bush y Mijail Gorbachov de no extender la organización militar “ni una pulgada” hacia el este. Esta falsa promesa debía ser una concesión a los soviéticos para que no bloquearan la reunificación alemana y el ingreso en la OTAN.

Gerald Sussman https://web.archive.org/web/20221027232459/https://mronline.org/2022/09/14/ukraine/

https://diario-octubre.com/2022/11/21/75-anos-de-la-cia-en-ucrania-y-2/

FUENTE: mpr21.info

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Cómo Larry Fink de Blackrock creó la crisis energética mundial

 

Esta vez, la lucha contra las emisiones va en serio. No porque se pretenda salvar el destino de la Humanidad y proteger el planeta, sino porque va a ser un gran, gran negocio. Y el Capital ya se ha preparado para sacar el máximo rendimiento.


Cómo Larry Fink de Blackrock creó la crisis energética mundial

F. William Engdahl

El Viejo Topo

23 noviembre, 2022 

 

La mayoría de la gente está desconcertada por lo que es una crisis energética mundial, con los precios del petróleo, el gas y el carbón disparados simultáneamente e incluso obligando al cierre de grandes plantas industriales como la química o el aluminio o el acero. La Administración Biden y la UE han insistido en que todo se debe a las acciones militares de Putin y Rusia en Ucrania. Esto no es así. La crisis energética es una estrategia desde hace mucho planificada por los círculos empresariales y políticos occidentales para desmantelar las economías industriales en nombre de una distópica Agenda Verde. Esto tiene sus raíces en los años anteriores a febrero de 2022, cuando Rusia lanzó su acción militar en Ucrania.

Blackwater impulsa la ESG

En enero de 2020, en vísperas de los devastadores cierres desde el punto de vista económico y social, el director general del mayor fondo de inversión del mundo, Larry Fink, de Blackrock, publicó una carta dirigida a sus colegas de Wall Street y a los directores generales de las empresas sobre el futuro de los flujos de inversión. En el documento, modestamente titulado «Una remodelación fundamental de las finanzas», Fink, que gestiona el mayor fondo de inversión del mundo, con unos 7 billones de dólares gestionados en ese momento, anunció un cambio radical para la inversión empresarial. El dinero «se volvería verde». En su carta de 2020, que tuvo gran repercusión, Fink declaró: «En un futuro próximo –y antes de lo que la mayoría Prevé– habrá una reasignación significativa del capital… El riesgo climático es un riesgo de inversión». Además, declaró: «Todos los gobiernos, empresas y accionistas deben enfrentarse al cambio climático» (https://www.blackrock.com/corporate/investor-relations/2020-blackrock-client-letter).

En otra carta dirigida a los clientes inversores de Blackrock, Fink presentó la nueva agenda de inversión de capital. Declaró que Blackrock saldrá de ciertas inversiones con altas emisiones de carbono, como el carbón, la mayor fuente de electricidad para EE.UU. y muchos otros países. Añadió que Blackrock examinará las nuevas inversiones en petróleo, gas y carbón para determinar su adhesión a la «sostenibilidad» de la Agenda 2030 de la ONU.

Fink dejó claro que el mayor fondo del mundo comenzaría a desinvertir en petróleo, gas y carbón. «Con el tiempo», escribió Fink, «las empresas y los gobiernos que no respondan a las partes interesadas y aborden los riesgos de sostenibilidad se encontrarán con un creciente escepticismo de los mercados y, a su vez, con un mayor coste de capital.» Añadió que «el cambio climático se ha convertido en un factor definitorio de las perspectivas a largo plazo de las empresas… estamos al borde de una remodelación fundamental de las finanzas» (https://www.blackrock.com/corporate/investor-relations/2020-blackrock-client-letter).

A partir de ahí, la llamada inversión ESG, que penaliza a las empresas emisoras de CO2 como ExxonMobil, se ha puesto de moda entre los hedge funds y los bancos y fondos de inversión de Wall Street, incluidos State Street y Vanguard. Tal es el poder de Blackrock. Fink también consiguió que cuatro nuevos miembros del consejo de administración de ExxonMobil se comprometieran a acabar con el negocio del petróleo y el gas de la empresa.

La carta de Fink de enero de 2020 fue una declaración de guerra de las grandes finanzas contra la industria energética convencional. BlackRock fue miembro fundador del Grupo de Trabajo sobre Divulgaciones Financieras Relacionadas con el Clima (el TCFD) y es firmante de los Principios de Inversión  Responsable de la ONU, una red de inversores apoyada por la ONU que impulsa la inversión en carbono cero utilizando los criterios altamente corruptos de los factores ambientales, sociales y de gobernanza en las decisiones de inversión. No existe un control objetivo sobre los datos fak de los ESG de una empresa. Además, Blackrock firmó la declaración del Vaticano de 2019 que aboga por los regímenes de precios del carbono. BlackRock también se unió en 2020 a Climate Action 100, una coalición de casi 400 gestores de inversiones que gestionan 40 billones de dólares.

Con esa fatídica carta del director general de enero de 2020, Larry Fink puso en marcha una colosal desinversión en el billonario sector mundial del petróleo y el gas. Cabe destacar que ese mismo año Fink, de BlackRock, fue nombrado miembro del Consejo de Administración del distópico Foro Económico Mundial de Klaus Schwab, el nexo corporativo y político de la Agenda 2030 de la ONU con cero emisiones de carbono. En junio de 2019, el Foro Económico Mundial y las Naciones Unidas firmaron un marco de asociación estratégica para acelerar la implementación de la Agenda 2030. El FEM cuenta con una plataforma de Inteligencia Estratégica que incluye los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible de la Agenda 2030.

En su carta como director general de 2021, Fink redobló el ataque al petróleo, el gas y el carbón. «Dado lo fundamental que será la transición energética para las perspectivas de crecimiento de cada empresa, pedimos a las empresas que revelen un plan sobre cómo su modelo de negocio será compatible con una economía neta cero», escribió Fink. Otro directivo de BlackRock dijo en una reciente conferencia sobre energía que «donde vaya BlackRock, otros le seguirán» (https://oilprice.com/Energy/Energy-General/Why-Are-Investors-Turning-Their-Backs-On-Fossil-Fuel-Projects.html).

En sólo dos años, se estima que en 2022 se habrá salido de la inversión en exploración y desarrollo de petróleo y gas a nivel mundial por un billón de dólares. La extracción de petróleo es un negocio caro y el corte de la inversión externa por parte de BlackRock y otros inversores de Wall Street supone la muerte lenta de la industria.

Biden, ¿un presidente de BlackRock?

Al principio de su entonces deslucida candidatura presidencial, Biden tuvo una reunión a puerta cerrada a finales de 2019 con Fink, quien supuestamente le dijo al candidato que «estoy aquí para ayudar.» Después de su fatídica reunión con Fink, el candidato Biden anunció: «Vamos a deshacernos de los combustibles fósiles…» En diciembre de 2020, incluso antes de que Biden tomara posesión de su cargo en enero de 2021, nombró a Brian Deese, jefe global de inversiones sostenibles de BlackRock,  asistente del presidente y director del Consejo Económico Nacional. Aquí, Deese, que desempeñó un papel clave para Obama en la redacción del Acuerdo Climático de París en 2015, ha dado forma silenciosamente a la guerra de Biden contra la energía.

Esto ha sido catastrófico para la industria del petróleo y el gas. Deese, el hombre de Fink, participó activamente en la entrega al nuevo presidente Biden de una lista de medidas antipetroleras para que las firmara por orden ejecutiva a partir del primer día de enero de 2021. Eso incluía el cierre del enorme oleoducto Keystone XL, que llevaría 830.000 barriles diarios desde Canadá hasta las refinerías de Texas y la detención de cualquier nuevo arrendamiento en el Refugio Nacional de Vida Silvestre del Ártico (ANWR). Biden también se reincorporó al Acuerdo Climático de París que Deese había negociado para Obama en 2015 y que Trump canceló.

El mismo día, Biden puso en marcha un cambio del llamado «Coste Social del Carbono» que impone un castigo de 51 dólares por tonelada de CO2 a la industria del petróleo y el gas. Esa medida, establecida bajo la autoridad puramente ejecutiva sin el consentimiento del Congreso, está suponiendo un coste devastador para la inversión en petróleo y gas en Estados Unidos, un país que sólo dos años antes era el mayor productor de petróleo del mundo.

Acabar con la capacidad de las refinerías

Peor aún, las agresivas normas medioambientales de Biden y los mandatos de inversión ESG de BlackRock están acabando con la capacidad de las refinerías estadounidenses. Sin refinerías, no importa cuántos barriles de petróleo se tomen de la Reserva Estratégica de Petróleo. En los dos primeros años de la presidencia de Biden, EE.UU. ha cerrado alrededor de un millón de barriles diarios de capacidad de refinado de gasolina y gasóleo, en parte debido al colapso de la demanda con el Covid, el descenso más rápido de la historia de EE.UU. Los cierres son permanentes. En 2023 se cerrará una capacidad adicional de 1,7 millones de barriles diarios como resultado de la desinversión de BlackRock y Wall Street y de las regulaciones de Biden.

Citando la fuerte desinversión de Wall Street en el petróleo y las políticas antipetróleo de Biden, el director general de Chevron declaró en junio de 2022 que no cree que Estados Unidos vuelva a construir otra refinería nueva.

Larry Fink, miembro de la Junta del Foro Económico Mundial de Klaus Schwab, se une a la UE, cuya presidenta de la Comisión de la UE, la notoriamente corrupta Ursula von der Leyen, dejó la Junta del FEM en 2019 para convertirse en jefa de la Comisión de la UE. Su primer acto importante en Bruselas fue impulsar la agenda de la UE Zero Carbon Fit for 55. Eso ha impuesto importantes impuestos sobre el carbono y otras restricciones sobre el petróleo, el gas y el carbón en la UE mucho antes de las acciones rusas de febrero de 2022 en Ucrania. El impacto combinado de la fraudulenta agenda ESG de Fink en el gobierno de Biden y la locura de Carbono Cero de la UE está creando la peor crisis energética y de inflación de la historia.

Fuente: http://williamengdahl.com/gr15November2022.php

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