A los trabajadores andaluces nos ofrecen 30 años de
guerra
Lo único que
tiene que ofrecer el capitalismo a los trabajadores andaluces, además de
expoliar las inmensas riquezas naturales que hay en nuestra tierra, es servir a
los turistas, poner cervezas y construir barcos, aviones, tanques y blindados
de guerra para también expoliar los recursos naturales y energéticos de otros
pueblos hermanos, especialmente de África.
Con el chantaje
de “o guerra o paro” que nos hacen a la clase obrera TODAS las fuerzas políticas parlamentarias del Estado
español, nos mandan servir a las potencias imperialistas hermanadas
a través de la Unión Europea y que representan los intereses de los monopolios
con insaciable apetito por las materias primas de los países esquilmados y
subyugados por ellos. Expolio que provoca que millones de seres humanos se
jueguen la vida para llegar a una Europa donde tampoco tienen futuro. Pues hoy
el mundo, bajo el régimen capitalista, no tiene nada que ofrecer al
proletariado internacional más que desempleo, esclavitud, hambre o guerra.
Después de los
chantajes de Airbus y Navantia, ahora el gobierno “más
progresista de la historia”, a través de su ministerio de defensa (más
bien, de guerra), viene a los trabajadores andaluces prometiéndonos trabajo para 30 años, lo que en realidad
quiere decir:
1) 30 años de
negocio para las empresas privadas armamentísticas Santa Bárbara (de la empresa
estadounidense General Dynamics), Sapa Placencia, Indra y Escribano Mechanical
& Engineering, que se embolsarán 2100 millones de euros que salen de
los bolsillos de todos los trabajadores españoles.
2) Que las
potencias imperialistas piensan mantener sus guerras al menos por 30 años.
Quién sabe si se puede prometer que el planeta todavía será habitable para la
especie humana en 2050 si no cambiamos el régimen de producción.
El capitalismo,
lejos de dedicar los recursos que necesitan los trabajadores del mundo para
vivir dignamente, para prevenir enfermedades, para desarrollarse integralmente
como seres humanos, dedica ingentes cantidades de recursos, generados por las
clases trabajadoras, a la destrucción del planeta y millones de seres humanos.
Desde una de
las empresas beneficiaras de este nuevo contrato, Escribano Mechanical &
Engineering, reconocen:
“Una
industria rentable: La industria de la Defensa es un sector líder y
estratégico para el desarrollo socioeconómico español. Con un alto
valor añadido y una complejidad industrial y tecnológica, una fuente de
innovación y crecimiento en España, Escribano M&E es un gran ejemplo
de éxito en los negocios”.
Como ellos
mismos dicen, el desarrollo socioeconómico del Estado español, eslabón
intermedio, lacayo y servil del imperialismo europeo y norteamericano, pasa por
las guerras de rapiña.
Así lo
sentencia también abiertamente, al presentar el nuevo blindado de combate
llamado “Dragón”, el secretario de Estado para la Defensa, el “socialista”
Ángel Olivares (ex-alcalde de Burgos entre 1999 y 2003 con el apoyo de
Izquierda Unida y Tierra Comunera-Partido Nacionalista Castellano):
«Es uno de
los pilares esenciales sobre los que se sustenta la Defensa Nacional y sin el
que las Fuerzas Armadas no podrían participar en operaciones internacionales de
mantenimiento de la paz. Es un objetivo estratégico e irrenunciable
para España«.
Para embaucar a
la clase obrera en las guerras, tal como hacían ya los “socialistas” en la I
Guerra Mundial, los “socialistas” de hoy recurren al chovinismo más repugnante
para hacernos cómplices de las matanzas perpetradas por los monopolios a los
que sirven:
«Estos
blindados van a estar entre los mejores del mundo y van a ser españoles«.
Pero ¿en
qué operaciones internacionales de mantenimiento de la “paz” participa
el ejército español? Las misiones en el exterior publicadas en la web del ministerio de defensa son, más allá de la
literatura hipócrita y engañabobos a la que nos tienen acostumbrados, para:
– el
frente militar de la OTAN en las fronteras de Rusia, con presencia en los
países ex-socialistas del Este: Policía Aérea en el Báltico (“aviones de la
OTAN realizan misiones de vigilancia y control del espacio aéreo de Estonia,
Letonia y Lituania”), Presencia Avanzada Reforzada-Letonia (“Garantizar
la estabilidad de la seguridad euroatlántica, mantener una Europa en paz, unida
y libre, así como prevenir conflictos mediante medidas de defensa y disuasión
creíbles “).
– controlar
los recursos minerales y energéticos de África: EUTM RCA (República
Centroafricana), EUTM-Somalia (“La Unión Europea adiestra a las fuerzas
somalíes para combatir el terrorismo y la piratería”), EUTM-Malí,
Destacamento Marfil (Senegal), Apoyo a RCA – OP A/C (Gabón) (“el Ejército
del Aire proporciona transporte táctico y logístico a las operaciones
internacionales en la República Centroafricana”), EUNAVFOR ATALANTA
(“proteger del ataque de los piratas el tráfico marítimo en el océano Índico
occidental“).
– control
de los mares por las potencias imperialistas de la OTAN, en pugna con
las otras potencias imperialistas como Rusia y China: Grupos navales permanentes
de la OTAN (“Son las fuerzas que proporcionan una presencia marítima
permanente a la OTAN y las primeras que se activan, incluso antes de que
se declare una crisis”). Guardián del mar (“Operación de la OTAN
enfocada en el conocimiento del entorno marítimo para disuadir y luchar contra
el terrorismo, así como mitigar el resto de amenazas”).
Como botón de
muestra del lenguaje hipócrita de estos mercenarios de las multinacionales
yanquis y europeas, hay que mencionar las operaciones EUTM-Somalia y EUNAVFOR
ATALANTA concebidas supuestamente para combatir el ataque de los “piratas” en
el océano Índico occidental.
Lo que nuestros
ejércitos llaman “piratas”, no son más que habitantes de esas costas africanas,
especialmente de Somalia, que se organizaron para combatir el saqueo de sus caladeros por parte de flotas pesqueras
de Asia, América del Norte y Europa. Estos “piratas” o “terroristas”
son, en realidad, “Guardacostas Voluntarios de Somalia«, y cuenta con un
70% de apoyo popular.
Pero no sólo
eso. También respondían al vertido de residuos radioactivos como uranio y
metales pesados. Según el Instituto de Estudios sobre Conflictos y Acción
Humanitaria, se estima que a raíz de la contaminación tóxica, hasta el 40% de
la población somalí puede padecer cáncer. La ONU de esto no dice nada, muy al
contrario, insiste en que:
“Los actos
de piratería […] pueden dar lugar a […] perturbaciones importantes para
el comercio y la navegación, pérdidas financieras a los propietarios de buques,
un aumento de las primas de seguros y los gastos de seguridad”.
Por tanto, los
verdaderos “piratas” y “terroristas”, o “corsarios” deberíamos decir pues están
pagados por todos nosotros, son los ejércitos que actúan bajo órdenes de las
instituciones imperialistas como la OTAN y la Unión Europea, defendiendo los
intereses de sus multinacionales.
Es para estos
criminales que el gobierno “más progresista de la historia” nos ofrece trabajar
durante 30 años.
No merece la
pena luchar por conseguir o mantener esos puestos de trabajo. ¿No sería más
razonable y necesario desarrollar la sociedad y la economía en base a las
necesidades que tiene el pueblo trabajador? ¿No sería más razonable
desarrollarnos como sociedad, como seres humanos, en armonía y colaboración con
otros pueblos del mundo intercambiando conocimientos y recursos para prosperar
juntos en lugar de apropiárselos a sangre y fuego, a costa de la vida y el
éxodo de millones de seres humanos, y que al final sólo beneficiará a
multimillonarios que acumulan cantidades obscenas de riqueza? Hoy el número de refugiados bate todos los récords: 80
millones de personas.
Luchar sólo por
el pan de hoy es dejar en manos de los bandidos que nos saquean el pan y la
vida de mañana. Los trabajadores andaluces y españoles no
necesitamos un pan manchado de sangre. Necesitamos vivir en un mundo en paz y
con todas las necesidades cubiertas, pues hay recursos, ciencia y tecnología de
sobra para ello.
Y eso pasa por
la abolición del capitalismo, por la salida de la OTAN, la Unión Europea y
demás organismos imperialistas como el FMI, la OMC o el Banco Mundial. Pasa por
recuperar las 120 empresas privatizadas, por tomar el control de los medios
fundamentales de producción, de los latifundios, las minas, de las fuentes
naturales de energía.
En definitiva,
pasa por instaurar el Socialismo construyendo el poder obrero y popular surgido
desde abajo con representantes directos elegidos en asambleas por trabajadores
de la ciudad y el campo, vecinos de los barrios obreros, pequeños campesinos,
estudiantes y demás capas populares.
Basta de
chantajes con el pan y la guerra
Hoy más que
nunca, el Socialismo es una necesidad
Hoy más que
nunca, el internacionalismo proletario es una necesidad
Proletarios del
mundo, unámonos
Comité Regional
del Partido Comunista Obrero Español en Andalucía
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