martes, 14 de junio de 2016

ARAGÓN Y ANDALUCIA

JARABA, OTRO PUEBLO ARAGONÉS EN PELIGRO: ¿ÑA´QUE NOS JODEN LOS ECOLOGISTAS QUE NO SE CANTEAN EN ESTE ASUNTO?



España
Un proyecto de fracking amenaza cientos de empleos en Zaragoza

Rebelión
Público
14.06.2016

Ocho municipios que viven de los balnearios, el turismo, el agua mineral y una agricultura basada en pozos temen que las prospecciones para extraer hidrocarburos en Soria y Guadalajara que ha avalado el Supremo contaminen sus acuíferos y acaben con su modo de vida.

“Ahora tenemos pleno empleo, pero si falla el agua nos quedamos sin vida. Tendremos un 100% de paro”, explica Joaquín Barriga, alcalde de Jaraba. “Si hubiera alguna desgracia que afectara a los acuíferos, sería para coger a maleta y dejar el pueblo”, coincide José Carlos Tirado, alcalde de Ariza.
Sus municipios son dos de los ocho de la zona suroeste de la provincia de Zaragoza que ven su modo de vida amenazado por el proyecto Cronos, un permiso para investigar y extraer hidrocarburos mediante técnicas de fracking o factura hidráulica del subsuelo de una superficie de 96.961 hectáreas en las vecinas provincias de Soria y Guadalajara, y que acaba de ser ratificado por el Supremo.

Bajo esa zona se encuentran las masas de agua subterránea que, desde hace dos siglos, mantienen la actividad económica de la zona, en la que la explotación de balnearios, el embotellamiento de agua mineral y el turismo conviven con una agricultura y una ganadería que riega y se abastece principalmente con pozos. Y temen que esas prospecciones puedan dañarlas. 

Sin embargo, la amenaza no se circunscribe a esa subcomarca zaragozana de unos miles de habitantes. Los pinchazos se producirán en la zona bajo la que se extiende el unidad hidrogeológica del Alto Jalón, una masa de agua subterránea de 2.295 kilómetros cuadrados de extensión y 350 metros de profundidad que se extiende por Aragón y las dos castillas y que incluye reservas naturales como la Laguna de Gallocanta, punto de parada dos veces al año unas 200.000 grullas en sus migraciones entre Europa y África, y fenómenos geológicos como el rosario de manantiales de los Ojos de Monreal.

Alimenta los cauces de los ríos Jalón -con su casi bimilenario y pionero en la península sistema de regadío-, Mesa y Piedra, que durante siglos ha excavado las galerías y generado las cascadas del parque natural del Monasterio de Piedra. E incluye afloramientos en las cuencas del Ebro, drenajes hacia el Duero en Almazán y bolsas conectadas con el Tajo y el Júcar en Cella, Molina de Aragón y Lidón, según los estudios del Ministerio de Medio Ambiente.

El aval del Supremo y los datos sísmicos repicados
El proyecto, aprobado por el Consejo de Ministros en 2013, levantó las alarmas en las tres provincias y provocó recursos de Ecologistas en Acción, de los dos municipios zaragozanos y de una plataforma antifracking con base en Almazán. Todos ellos han sido desestimados. El último, el de los ayuntamientos, al considerar el Supremo “suficientes” y “rigurosos” los requisitos de prevención ambiental que exige el Gobierno en una zona con varios enclaves de la Red Natura: volver a procesar la información sísmica existente sobre la zona y realizar sondeos exploratorios en pozos poco profundos, para tramitar una declaración de impacto ambiental en caso de abrir los pozos.

El fracking o fractura hidráulica es una técnica de extracción de hidrocarburos basada en la inyección de potentes chorros de agua, arena y compuestos químicos en las bolsas del subsuelo para extraer el combustible por presión. El Gobierno de Aragón ha proscrito esta práctica en su territorio por la vía de los hechos, aunque carece de competencias para un proyecto ubicado en otras comunidades, por mucho que pueda afectar a masas de agua que alcanzan su subsuelo.

Estas, al afectar a las dos castillas, corresponden al ejecutivo central, en manos del PP, único partido que apoya su uso en España, mientras elresto de las formaciones lo rechazan.

“Es lamentable que defender al pueblo cueste dinero”
Ariza ha tirado la toalla en la vía judicial, confirma su alcalde, y no irá al Constitucional, cuyo amparo sí estudia solicitar la plataforma. Jaraba lo decidirá en un pleno a final de mes. “No sé cómo abordar este tema. Se nos va de las manos”, confiesa el primer edil de Jaraba: “Ir al Constitucional cuesta dinero, y nosotros tenemos poco y preferimos invertirlo en la escuela del pueblo. Lo consideramos prioritario. Mientras haya pueblo, claro”.

Otro pueblo vecino, Alhama de Aragón, ya declinó hace tres años meterse en pleitos. “Entendemos que quien debería sacar las castañas del fuego es el Gobierno de Aragón, la Diputación o la comarca, Deberían defender el territorio”, sostiene su alcalde, José María Castejón, para quien “los ayuntamientos pequeños no tenemos capacidad para afrontar pleitos de este tipo. Y tampoco podemos hacer la guerra cada uno por su lado”. Barriga plantea la posibilidad de solicitar justicia gratuita para ir al Constitucional. “Es lamentable que para pleitear por algo que afecta al pueblo haya que pagar”, dice.

Alhama, con 1.200 habitantes, ha logrado diversificar su economía gracias a la factoría de componentes de iluminación Zalux, que emplea a 300 personas de toda la comarca. Los dos balnearios, uno de ellos con un lago termal único en Europa, de casi dos hectáreas de extensión y con caudal de origen subterráneo, emplean a 120 más entre nueve y once meses al año. 

Una forma de vida que depende del agua
Sin embargo, la dependencia del agua es total en el resto de la zona, con municipios como Ibdes, Ariza o Monreal de Ariza y enclaves turísticos como el Monasterio de Piedra, un parque natural de grutas y cascadas excavadas por el río del mismo nombre que supone uno de los principales atractivos turísticos de la provincia.

También el Mesa y el Jalón, cauce del que se abastece Calatayud –la segunda población de la provincia, con más de 20.000 habitantes-, se verían afectados por una eventual contaminación de los acuíferos, coinciden los alcaldes, que recuerdan cómo la excavación de los túneles de la línea del AVE Madrid-Zaragoza ya mermaron el agua que llega a Jaraba.

“Las fronteras geológicas no coinciden con las administrativas”, anota Tirado, que llama la atención sobre los negativos efectos que podría tener para la agricultura de la zona un nuevo pinchazo de ese tipo en un acuífero, ya fuera en Guadalajara o en Soria.

Más de 2.500 hectáreas protegidas
Las masas de agua subterránea de carácter mineral y termal sí cuentan, en las zonas en las que afloran, con perímetros de protección recogidos en el Plan Hidrológico del Ebro (PHE) y en los que están limitadas las actividades productivas. 

Incluyen, en los páramos del Alto Jalón, un total de 2.500 hectáreas que engloban los balnearios de Termas Pallarés, Alhama, Cantarero, San Roque, la Virgen o los Baños de Serón; acuíferos con embotelladoras como los de Fontjaraba, Fontecabras, El Cañar y Lunares y, también, otras masas de agua como las de San Vicente, Virgen de las Nieves, El Prado, La Peña y San Luis.

Sin embargo, las medidas de protección no afectan a los daños que puedan sufrir como consecuencia de actuaciones en las grandes masas de agua a las que están conectados esos afloramientos. Es otra de las lagunas en la gestión del agua en España: el territorio de las confederaciones se establece según las vertientes superficiales de los ríos, sin tener en cuenta los acuíferos.


188.000 euros de capital para una inversión de 30 millones 
El decreto que dio luz verde al proyecto Cronos, que contempla una inversión de 15 millones de euros durante seis años, preveía que los trabajos de prospección comenzaran en seis meses, que comienzan a correr desde la sentencia del Supremo, y que el primer pozo de fracking pudiera ser abierto a partir del tercero.

La empresa adjudicataria de los permisos es Frontera Energy Corporation, una sociedad con sede en Zaragoza que tiene un capital social de 188.025 euros y que el mismo día que recibía la autorización para las prospecciones de Cronos obtenía otra denominada Aquiles para una superficie mayor y con un presupuesto de otros 15,2 millones.

Sus administradores son Oisin Fanning, CEO de San Leon Energy, una sociedad con sede en Dublín cuyas acciones se han depreciado un 99% en los últimos cinco años, y María Puig, ejecutiva de la desaparecida caja de ahorros CAI.

Fuente original: http://www.publico.es/espana/fracking-amenaza-mar-subterraneo-del.html

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PODEMOS ES EL CULPABLE DE QUE SE SUDE EN VERANO Y SE TIRITE DE FRÍO EN INVIERNO, QUE ME LO HA DICHO EL ANGEL MARCELO DEL MINISTRO DE INTERIOR QUE NI FUNCIONA NI HA FUNCIONADO



Las mentiras y falsedades del establishment político-mediático español sobre "Unidos Podemos"



Rebelión
Público.es
13.06.2016

He escrito extensamente que la transición de la dictadura a la democracia en España no fue nada modélica, pues el equilibrio de fuerzas entre las derechas (que controlaban los aparatos del Estado y los grandes medios de información) y las izquierdas (que habían liderado a las fuerzas democráticas), que acababan de salir de la clandestinidad, era tan desigual que era prácticamente imposible que el producto de tal proceso fuera equilibrado y modélico. De ahí que las instituciones democráticas continuaron estando altamente influenciadas por las fuerzas conservadoras, próximas a los intereses financieros y económicos que dominaban la vida económica, política y mediática del país (ver mi libro Bienestar insuficiente, democracia incompleta. Sobre lo que no se habla en nuestro país. Anagrama, 2002).

Como consecuencia de ello, la democracia española se ha caracterizado por su escasa calidad, y como indicador de ello, la diversidad ideológica de los mayores medios de información ha sido siempre muy limitada en España. Todavía hoy, no hay un mayor medio de información que pudiera considerarse de izquierdas. Lo más próximo que hubo tiempo atrás fueron los rotativos de centro, como El País, que cuando estuvo dirigido por Joaquín Estefanía estuvo abierto a colaboradores de izquierdas. Pero tal abertura desapareció, transformándose en un rotativo de derechas bajo la dirección del actual director Antonio Caño, profundamente conservador. Su reportaje sobre Podemos carece de cualquier sentido de balance o equilibrio, destacando por su hostilidad y agresividad. Un tanto igual ocurre con la Radio Televisión Española (RTVE), que se ha ido derechizando más y más. Hay una diferencia notable entre la RTVE en la época de Iñaki Gabilondo, y la de ahora de Alfonso Nasarre, director de Radio Nacional de España (RNE). La discusión sobre Podemos en la tertulia de RNE de hoy, 8 de junio, era mucho peor que la discusión que había tenido lugar en la cadena de ultraderecha estadounidense Fox el día anterior sobre Bernie Sanders, el candidato socialista en las primarias del Partido Demócrata de aquel país.

Todos ellos mienten a sabiendas, sin el más mínimo reparo en su comportamiento
Veamos los datos. Todos los medios, liderados por El País, han reproducido extensamente las declaraciones del vice coordinador del Comité Electoral del PSOE, Óscar López, en las que acusaba a Unidos Podemos de querer nacionalizar toda la banca, señalando esta medida como ejemplo del extremismo de tal partido, algo impropio de la socialdemocracia, acusación que se ha repetido muchísimas veces en artículos y tertulias a lo largo del territorio español, sin nunca dar la oportunidad de ser respondida, mostrando la falsedad de tal acusación y tal presunción.

Miremos en primer lugar lo que dice el programa de Unidos Podemos sobre la banca. En la sección sobre la banca se dice lo siguiente: “En esta nueva política industrial cobran un mayor peso los instrumentos financieros públicos para crear sinergias entre las capacidades innovadoras y financieras del sector privado y del sector público. Con el fin de que España cuente también con una importante red de banca pública para llevar a cabo estas políticas, el Gobierno renegociará los términos del Memorando de entendimiento firmado con la UE para poner en marcha una potente y eficaz banca pública a partir de las entidades ya nacionalizadas Bankia y Banco Mare Nostrum, que no serán reprivatizadas, y del ICO“.

Puede verse que lo que Unidos Podemos está proponiendo es que los bancos que se han rescatado con dinero público (bancos que habían colapsado por la incompetencia, cuando no corrupción, de su gestión privada) se mantengan en el sector público para desarrollar una función pública proveyendo crédito a las familias y a las empresas (sobre todo pequeñas y medianas empresas) que lo necesiten. Esta propuesta es opuesta a la del PSOE, que pretende privatizar de nuevo tales bancos, poniéndolos otra vez en manos de banqueros y accionistas que consideraran su objetivo principal el optimizar sus intereses, es decir, sus beneficios, a costa de los intereses de la ciudadanía, medida que va precisamente en contra del principio socialista de anteponer el bien común sobre el beneficio privado. Es un indicador más del abandono del proyecto socialista por parte del PSOE que critique ahora a Unidos Podemos por hacer lo que la socialdemocracia hizo siempre. Es un indicador más de la renuncia del PSOE al ideario socialista.

Otra propuesta que hace Unidos Podemos es utilizar el ICO, el Instituto de Crédito Oficial, como institución bancaria pública que expandiría sus responsabilidades crediticias, propuesta muy necesaria que ya hicimos el Profesor Juan Torres y yo cuando apuntamos las líneas generales de un programa económico progresista, que Podemos hizo suyo. De nuevo, es importante señalar que cuando hicimos tal propuesta, el economista del PSOE y también gurú mediático de El País (y de La Sexta), el Sr. José Carlos Díez, la ridiculizó, ignorando que lo que estábamos proponiendo era una práctica común en muchos países de Europa, incluidos países de tradición socialdemócrata, como son Noruega, Suecia y Dinamarca. En realidad, España es uno de los países con uno de los sectores bancarios público más pequeños, siendo ello causa de que exista en España una hipertrofia del sector bancario privado (tres veces mayor que en EEUU, en términos proporcionales).

Este intento de ridiculizar una medida tradicionalmente socialdemócrata es un indicador más de la renuncia del PSOE a sus principios socialdemócratas, renuncia que es constante en su discurso y práctica política. Léanse los textos del director del equipo económico del Sr. Pedro Sánchez, el Sr. Jordi Sevilla. En su libro De nuevo socialismo, Jordi Sevilla, que se define explícitamente y sin tapujos como liberal, utiliza frases como “¿Quién a estas alturas quiere aumentar el gasto público?” y “¿Alguien puede defender a estas alturas del siglo que un programa socialdemócrata debe estar a favor de más impuestos y más gasto público e introducir rigideces normativas en la economía?”, dicho y escrito en el país que tiene uno de los gastos públicos (incluyendo el gasto público social, que financia los servicios públicos del Estado del Bienestar como sanidad, educación, escuelas de infancia, servicios domiciliarios, servicios sociales, vivienda social, entre otros) más bajos de la UE-15 (el grupo de países de semejante nivel de desarrollo al de España). Siguiendo esta mentalidad, Jordi Sevilla fue el inspirador del famoso dicho del presidente Zapatero de que “bajar impuestos es de izquierdas”, creando un agujero en el presupuesto del Estado de nada menos que de 27.000 millones de euros. Los recortes de gasto público que inició el presidente Zapatero fueron precisamente para reducir el déficit público que tal recorte de impuestos había generado en las cuentas públicas. Ni que decir tiene que estos recortes debilitaron enormemente al ya insuficientemente financiado Estado del Bienestar español. A la luz de estos datos, hay que añadir a las preguntas que se hacía el Sr. Sevilla la más importante, que no cita: “¿Quién a estas alturas estaba renunciando al proyecto socialista en democracia, es decir, al proyecto socialdemócrata?”. Pero crean que la dirección del PSOE nunca se hará esta pregunta. La falta de autocrítica de la dirección de este partido y la continuación de sus políticas neoliberales tiene poco que ver con tal proyecto político.

El miedo al comunismo: otra movilización en contra de Unidos Podemos
Donde las tertulias y artículos alcanzan un nivel casi histérico es al anunciar la implantación de “la dictadura del proletariado” que tendría lugar en el caso de que gane Unidos Podemos. En este punto, me temo que más que ante una mentira, estamos ante una enorme ignorancia debido al enorme conservadurismo en la enseñanza, sobre todo privada, gestionada por la Iglesia, donde gran número de tertulianos parecen haberse educado. El desconocimiento en España de los escritos de Marx, con la constante confusión entre lo que es marxismo, lo que es socialismo y lo que es comunismo, es enorme, incluso, por cierto, en los centros universitarios.

Como indiqué en otro artículo reciente (“Contestación a Susana Díaz: ¿qué es la socialdemocracia?”, Público, 08.06.15), el PSOE tiene en sus escritos oficiales el reconocimiento de la utilidad del marxismo como instrumento intelectual, crítico con el capitalismo. Y como subrayé en aquel artículo, las dos tradiciones basadas en el marxismo, tanto la socialdemocracia como el comunismo, tenían históricamente el mismo objetivo: alcanzar la sociedad socialista. Eran los medios para alcanzar tal objetivo lo que diferenciaban las dos sensibilidades. En los países capitalistas desarrollados, la vía revolucionaria no ha sido considerada posible, siendo la vía democrática la seguida no solo por los partidos socialdemócratas sino también por los partidos comunistas. Y cuando los partidos comunistas han gobernado, y lo han hecho, por lo general, en coalición con los partidos socialdemócratas, sus políticas han sido típicamente socialdemócratas. En realidad, en Italia, las regiones mejor gobernadas, con mejor desarrollo de las políticas públicas de sensibilidad socialdemócrata, fueron las gobernadas por el Partido Comunista Italiano, el mayor partido de prácticas socialdemócratas en Europa, después del SPD alemán. En realidad, lo mismo está pasando en gran número de países subdesarrollados. En la India, por ejemplo, el Estado que ha alcanzado mayores logros socialistas en democracia ha sido el gobernado por el Partido Comunista. Esta amplia experiencia, bien conocida a nivel internacional (y desconocida, ignorada y ocultada en España), muestra que la diferencia en la aplicación de políticas públicas entre partidos de distintas tradiciones ha ido desapareciendo.

En Europa, sin embargo, la característica más preocupante ha sido el creciente abandono de la socialdemocracia por parte de los partidos socialdemócratas, al incorporar estos partidos elementos muy importantes del neoliberalismo. La Tercera Vía, liderada por Blair y seguida también por Schröder en Alemania, por Zapatero en España y por Hollande en Francia, ha ido abandonando la socialdemocracia, convirtiendo a sus respectivos partidos en partidos socioliberales en los que dominan las políticas públicas neoliberales (véase mi libro Ataque a la democracia y al bienestar. Crítica al pensamiento económico dominante. Anagrama, 2015). En realidad, algunos de los responsables de imponer tales políticas neoliberales en el establishment europeo han sido y continúan siendo personas pertenecientes a partidos socialdemócratas. Ahí está la causa de su deterioro electoral.

El por qué del abandono de la socialdemocracia por parte de los partidos socialdemócratas
Este abandono está documentado, y algunos personajes del PSOE así lo han reconocido (en privado). Los argumentos que se han dado por parte de intelectuales de tal partido para explicar su descenso electoral no son creíbles. Uno es que la globalización o el establecimiento del euro (o cualquier elemento externo) no permiten llevar a cabo el proyecto socialdemócrata. Pero el hecho de que Zapatero congelara las pensiones para obtener 1.200 millones de euros para cubrir el déficit, en lugar de mantener el impuesto de patrimonio (con lo cual hubiera conseguido más dinero), no puede atribuirse a ningún factor externo. En realidad, todos los recortes podrían haberse reducido y disminuido mediante un gravamen de las rentas del capital al mismo nivel que las rentas del trabajo, propuesta que ha estado en la oferta electoral del PSOE en varias ocasiones, sin que ello se aplicara nunca. Hoy las rentas del capital (como porcentaje de todas las rentas) son las más altas de los últimos treinta años, a costa de que las rentas del trabajo sean las más bajas. Ni que decir tiene que el establecimiento de la Eurozona bajo el dominio del establishment neoliberal que controla la gobernanza del euro dificulta y obstaculiza la aplicación de políticas socialdemócratas de carácter redistributivo y de expansión de la protección social. Pero como ha mostrado la coalición de izquierdas del gobierno portugués, se pueden revertir las políticas de recortes que han causado tanto daño, si hay voluntad política.

Otro argumento utilizado por intelectuales afines al PSOE es que la clase trabajadora, la base electoral de la socialdemocracia, está desapareciendo, y por lo tanto el voto socialdemócrata también está bajando. Pero no hay ninguna evidencia que apoye esta tesis. En realidad, la clase trabajadora existe, y en algunos países vota a la ultraderecha (decepcionada y enfadada con los partidos que renunciaron a la socialdemocracia), y en otros como en España vota a Podemos, y ahora votará a Unidos Podemos. De ahí surge el pánico del establishment político-mediático. El abandono de la socialdemocracia por parte de los partidos socioliberales se debe predominantemente al dominio de los aparatos de tales partidos por parte de profesionales (consecuencia de la profesionalización de la política), la mayoría de clase media de renta alta (la clase profesional) que hacen de la política su profesión y su modus vivendi, desarrollando unos intereses corporativos que dan pie a estas complicidades entre tales aparatos y los grupos financieros y económicos que dominan la vida económica, política y mediática del país. Este maridaje los aleja de la clase trabajadora y otros componentes de las clases populares, que quedan cada vez más distantes, anteponiendo en muchas ocasiones (como en la reforma laboral del presidente Zapatero) los intereses de aquellos grupos sobre los del mundo del trabajo. Esta realidad, fácilmente documentable, se da con particular intensidad en los equipos económicos de tales partidos, tradicionalmente muy próximos al mundo del capital. Y de ahí deriva el problema.

La nueva socialdemocracia
El aspecto más novedoso del surgimiento de nuevas izquierdas a lo largo de todo el territorio español y la radicalización de otras ya existentes (con la excepción del PSOE) es que sus inicios fueron el movimiento 15-M, cuya demanda central no fue la revolución o el socialismo, sino la democracia, señalando como el motivo de su protesta la no existencia de esta democracia en las instituciones representativas. El eslogan del 15-M “No nos representan” resume muy bien dicha denuncia. Y el otro, “No hay pan para tanto chorizo” también definió las raíces del problema de falta de democracia: el maridaje entre los grupos económicos y financieros y el establishment político (incluyendo el PSOE) y mediático (la gran mayoría de los medios).

Pero tal demanda entra en conflicto con la enorme concentración de la riqueza en España y en la mayoría de países capitalistas avanzados, puesto que poder económico se traduce en poder político. Y es ahí donde encontramos una clara contradicción entre las exigencias de mayor democracia, por un lado, y la lógica de la acumulación de capital vigente en el capitalismo de hoy por el otro. De ahí que las políticas redistributivas deban ser esenciales en un programa que exige la democratización de este país, puesto que las desigualdades (a cuyo crecimiento han contribuido las políticas del PSOE) han alcanzado unos niveles inaceptables para cualquier persona con sensibilidad democrática. La enorme hostilidad que la coalición Unidos Podemos está recibiendo se basa precisamente en este hecho. Los grandes centros de poder financiero y económico se sienten amenazados por Unidos Podemos y temen perder sus privilegios. De ahí que movilicen sus instrumentos políticos y mediáticos para destruir a dicha coalición. Y esto es lo que está pasando en este país. Agradecería al lector que si ve mérito en lo que estoy diciendo, distribuya este artículo ampliamente, puesto que por desgracia no tengo acceso a los mayores medios de información, en los cuales estoy prácticamente vetado.

Vicenç Navarro. Catedrático de Ciencias Políticas y Políticas Públicas. Universidad Pompeu Fabra, y autor del libro ‘Ataque a la democracia y al bienestar. Crítica al pensamiento económico dominante’ (Anagrama, 2015).

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