sábado, 2 de febrero de 2019

VENEZUELA/BANGLADESH: LA UNIÓN EUROPEA BUSCA CANDIDATO/A O CRIMINAL ASIMILADO PARA DAR UNOS GOLPETAZOS DE ESTADO A LA POLÍTICA QUE VENEZUELA APLICA EN BANGLADESH PARA DAR TIEMPO A QUE FLORENTINO PÉREZ SE ATE LOS ZAPATOS


Bangladesh: No hay puntada sin hilo. Una huelga con las mujeres como protagonistas


Por Todo por Hacer
Kaosenlared
02.02.2019

Esta huelga representa el primer gran desafío para la primera ministra, Sheikh Hasina, desde que alcanzara su cuarto mandato en unas jornadas electorales empañadas de violencia, después de que se acusara de fraude electoral e intimidación provocando fuertes protestas que se llevaron la vida de al menos 17 personas, mientras que cientos han resultado heridas y otros cientos detenidas.





H&M, Primark, Walmart, Benetton, Mango, Inditex e incluso Armani son algunas de las empresas textiles que mantienen el casi total de su producción en Bangladesh. Desde que el 24 de abril de 2013 se produjera el derrumbe del edificio Rana Plaza en Savar, cobrándose la vida de 1.130 trabajadores (en su mayoría mujeres), se puso en evidencia a nivel internacional las pésimas condiciones de las y los trabajadores del textil en Bangladesh. Sin duda aquel episodio obligó a la industria textil y a las autoridades bangladesíes a mejorar las condiciones laborales y de infraestructuras. Pero ni Accord y Alliance, empresas creadas para la inspección de las fábricas del textil ni la eterna promesa de la subida de sueldo de un 50%, son suficientes para dignificar la vida de casi cuatro millones de trabajadoras que viven en situaciones infrahumanas, con sueldos deplorables y jornadas eternas de 10 o más horas. En diciembre comenzaron los primeros paros, mientras las marcas de moda se preparaban para navidad, sus trabajadoras se movilizaban y junto a ellas se unieron los obreros portuarios en lucha por aumento de salario, un aumento que se definió en septiembre y que sólo lo estarían pagando a partir de enero sin efecto retroactivo.
En enero de este mismo año, 2019, comienza a hacerse eco en Europa Occidental la noticia de la última protesta de las trabajadoras del sector textil en Bangladesh. Una huelga que apenas tiene repercusión mediática, pero que ha sabido durante más de cinco días mantener en jaque a toda la línea de la industria del textil en el país asiático.
Alrededor de 3.500.000 personas -en su gran mayoría mujeres- forman parte de la mano de obra de la industria textil en Bangladesh. El 80% de la producción es exportada por un valor que solo el año pasado alcanzó poco más de 26.000 millones de euros, siendo el segundo mayor exportador de ropa después de China. Para poder competir con China, Bangladesh, junto a otros países como Camboya, India o Vietnam no duda en recurrir al culto de la mano de obra extensiva a muy bajo costo, y sin ningún tipo de estabilidad, seguridad ni salubridad en sus condiciones laborales.
Unas 4.500 fábricas, junto con pequeños talleres que realizan trabajos menores, mantienen al sector textil en condiciones infrahumanas.

La media salarial se sitúa en 55€ mensuales y es que desde el año 2013, el año de la catástrofe industrial más terrible del nuevo siglo, no existe un aumento salarial, mientras que el coste de la vida va en aumento progresivo. Tras la insatisfacción creciente en el sector, el año pasado se definió un aumento del 50% para llevar el salario mínimo a 82€ mensuales. Sin embargo, las principales fábricas se vienen negando a pagar ese aumento. Así todo, las trabajadoras han denunciado que no es suficiente, lo que provocó la indignación de las textiles y el llamado a la huelga.
Ni es la primera ni la segunda convocatoria en los últimos tiempos. Desde junio pasado y a lo largo de todo el año se fueron sucediendo las huelgas de las trabajadoras. La solidaridad y el apoyo a las trabajadoras se fue extendiendo poco a poco a todo el país sumándose otros sectores como el portuario, encargado de subir el cargamento a los barcos para su exportación. Así estos dos sectores, el textil y el portuario mantuvieron en jaque, el diciembre pasado, a la línea de suministros de la industria textil general.
Unas cincuenta fábricas textiles fueron cerradas por sus empresarios ante el temor de que sean las propias trabajadoras, ya en huelga, quienes tomen las fábricas. Un temor justificado por los distintos procesos de lucha que se han ido sucediendo a lo largo del año pasado y que en más de una ocasión se manifestó en prácticas ludditas con la destrucción de la maquinaria de las fábricas.
Las trabajadoras vuelven a la carga, llaman a la huelga, levantan barricadas, cortan autopistas, toman el centro de la ciudad para visibilizar la lucha y hacerse oír. Ante las protestas, los empresarios cierran sus fábricas y llaman al orden. La represión está siendo extrema, hasta donde podemos saber más de trescientas personas están detenidas, miles resultaron heridas y hay al menos un muerto que fue asesinado en la jornada del martes 8 de enero cuando la policía disparó balas de goma y gases lacrimógenos contra 5.000 trabajadores que protestaban. “Los trabajadores se atrincheraron en la carretera. Tuvimos que alejarlos para facilitar las condiciones del tráfico“, dijo la jefe de policía Sana Shaminur Rahman.
El líder sindical Aminul Islam acusó a los dueños de las fábricas, que trabajan para firmas multinacionales como H&M, Primark, Walmart o Inditex, de recurrir a la violencia para controlar a los huelguistas. Así todo Aminul Islam declaró: “están más unidas que nunca” y “no parece que vayan a dejar las calles hasta que no se cumplan las demandas”.
Esta huelga representa el primer gran desafío para la primera ministra, Sheikh Hasina, desde que alcanzara su cuarto mandato en unas jornadas electorales empañadas de violencia, después de que se acusara de fraude electoral e intimidación provocando fuertes protestas que se llevaron la vida de al menos 17 personas, mientras que cientos han resultado heridas y otros cientos detenidas.

Para la primera ministra, Sheikh Hasina, su primer temor sería que la lucha de las obreras se sume a las protestas de las fraudulentas elecciones. Así el jueves 10 de enero el Ministro de Comercio de Bangladesh, Tipu Munshi, anunció que estudiará la posibilidad de un aumento salarial en el sector y espera poder poner fin a los enfrentamientos que “comenzaron” el 5 de enero. De esta forma se creó un comité tripartito donde se congregan a los emisarios del gobierno, gerentes de planta y los representantes sindicales. El comité formado para estudiar el aumento de los salarios espera resolver el conflicto laboral a lo largo de este mes, dijo el ministro a la prensa local.
No podemos pasar por alto que, en el país vecino de la India, se ha llevado a cabo al mismo tiempo una huelga general de dos días que paralizó al país entero, coincidiendo con la acción de un muro humano hecho por cinco millones de mujeres para exigir la igualdad de género después de que grupos de conservadores impidieran el paso a dos mujeres al templo de Sabarimala, al cual desde el año pasado el gobierno había levantado el veto que prohibía a las mujeres su paso.
Se hace evidente que a la pregunta de dónde y quién es el sujeto político de hoy en día, en este nuevo siglo, la respuesta es acertada si decimos que no es ni blanco ni hombre ni europeo. Sin embargo, el necesario llamado al boicot y la solidaridad con las compañeras en su lucha debería empezar a formar parte de nuestra agenda si no queremos una vez más caer en el sectarismo que caracteriza al feminismo blanco nor-occidental. Flora Tristán, la paria, ya hablaba de la lucha internacionalista en su Unión Obrera y Las mujeres de Rote Zora supieron en los 70 crear un estrecho lazo con las obreras de Corea del Sur en situación similar a las obreras bangladesís, boicoteando las tiendas de Alder, marca de ropa alemana que tuvo que ceder ante las repetidas huelgas de las surcoreanas y la amenaza constante de las Rote Zora.

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¡ OJO AL DATO !


EN EL DÍA DE HOY, ABURRIDO Y HASTA LAS PELOTAS DE TANTA SIMPLEZA Y MELONES SUELTOS, ¡ME CAGO EN LA PUTA! QUE ME DECLARO PRESIDENTE ENCARGADO EN PLAN BIEN DE CARTAGENA, ANTEQUERA, BELCHITE, DE LA REPÚBLICA INDEPENDIENTE DE TORRERO, DEL PUENTE PIEDRA DE ZARAGOZA, ISLAMAYOR, PARTE SUR DEL IMPERIO ROMANO, DE GUACHINTÓN ENTERO Y VERDADERO, DEL CORTE INGLÉS  Y DE LA ALHAMBRA DE GRANADA, Y QUE PASA? EH, QUE PASA? (No sea tonto, hágase presidente de algo. Aproveche la ocasión)

MARXISMO


EJE CENTRAL DEL MARXISMO: EL DESARROLLO DEL SER HUMANO
EXTRACTO DEL PREFACIO DEL LIBRO MARX Y SU CONCEPTO DEL HOMBRE, ERICH FROMN, FONDO DE CULTURA ECONÓMICA. TERCERA REIMPRESIÓN EN ESPAÑOL, 1970

Marx escribió más de 20 obras a lo largo de su vida, incluso una novela cómica

Dicho Libro de 172 páginas es un Breviario del Fondo de Cultura Económica.

Concebir al marxismo (materialismo histórico, su filosofía, y materialismo dialectico, su ciencia) como un dogma de fe es tanto como reconocer explícitamente la supina ignorancia o la mala fe de quien así lo conciba, y reducirlo a un simple tratado de economía o una simple teoría política sin más, significa el equivalente a una variante de la ignorancia o mala fe mencionadas.

“La filosofía de Marx […] representa una protesta contra la enajenación (una absoluta carencia de conocimiento profundo de sí mismo –conciencia personal- y del papel que desempeña el sujeto en la vida y en la historia –conciencia social-) , su pérdida de sí mismo y su transformación en cosa; es un movimiento contra la deshumanización y automatización del hombre, inherente al desarrollo del industrialismo occidental. Es despiadadamente crítica de todas las “respuestas” al problema de la existencia humana que tratan de aportar soluciones por la negación o simulación de las dicotomías inherentes a la existencia humana […] y cuya esencia misma es la preocupación por el hombre y la realización de sus potencialidades […] Marx contempla al hombre en toda su concreción, como miembro de una sociedad y una clase dada y, al mismo tiempo, como cautivo de estas. La plena realización de la humanidad del hombre y su emancipación de las fuerzas sociales que lo aprisionan está ligado, para Marx, al reconocimiento de estas fuerzas y al cambio social basado en este reconocimiento.

[…] La filosofía de Marx (el materialismo dialéctico) es una filosofía […] imbuida de fe en el hombre […] para liberarse y realizar sus potencialidades […] Si el pensamiento Occidental, del siglo XIII al XIX (o quizás, para ser más exacto, hasta el estallido de la primera Guerra Mundial en 1914), fue un pensamiento de esperanza, una esperanza enraizada en las ideas de los profetas y el pensamiento greco-romano, los últimos cuarenta años han sido de un pesimismo y una desesperanza crecientes (ha de tenerse en cuenta que esta afirmación fue realizada en la década de 1960, por lo que de actualizarse en 2018, habría que cifrar tales pesimismo y desesperanza en un siglo aproximadamente) […]. Si no podemos salir de esta desesperanza, es posible que aún podamos sostenernos algún tiempo sobre la base de nuestra fuerza material pero, a la larga, la perspectiva histórica de Occidente estará condenada a la extinción física o espiritual.

[…] El mundo se desangra hoy entre dos ideologías rivales: la del “marxismo” y la del “capitalismo” […]. Aunque la verdad es que la Unión Soviética es un sistema de capitalismo conservador de Estado y no la realización de un socialismo marxista y aunque China niega, por los medios que emplea, esa emancipación de la persona humana que es el fin mismo del socialismo, ambas utilizan la fuerza del pensamiento marxista para atraer a los pueblos de Asia y África […], e identificando al marxismo y el socialismo con el capitalismo de Estado soviético y el totalitarismo chino […], hay que entender el pensamiento de Marx y descartar la imagen ignorante y deformada del marxismo.

[…] La crítica a Marx es, sin embargo, algo muy distinto del juicio acostumbrado, fanático o condescendiente, tan característico de las opiniones actuales sobre él. Estoy convencido de que sólo si entendemos el sentido real del pensamiento de Marx y podemos diferenciar, en consecuencia, del seudomarxismo ruso y chino, seremos capaces de entender las realidades del mundo de hoy y estaremos preparados para enfrentarnos realista y positivamente a su reto […], la persona de Marx, como sus ideas, han sido calumniadas y difamadas por muchos autores.

[…] Se hacen continuas referencias a Marx y a marxismo en la prensa, los discursos políticos, los libros y artículos escritos por estudiosos de las ciencias sociales y filósofos respetables; no obstante, con pocas excepciones, parece que los políticos y periodistas jamás han echado siquiera una mirada a una línea escrita por Marx y que los estudiosos de las ciencias sociales se contentan con un conocimiento mínimo de Marx. Aparentemente se sienten seguros actuando como expertos en este tema, puesto que nadie con prestigio y posición en el reino de la investigación social pone en cuestión sus ignorantes afirmaciones.


Manuel Sogas Cotano
Mao, RD, Diciembre 2018

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CARTA ABIERTA A LOS ESTADOS UNIDOS


Carta abierta a los Estados Unidos

Dejen de interferir en la política interna de Venezuela

Noam Chomsky e intelectuales internacionales



VIENTOSUR/29/01/2019  

El gobierno de los Estados Unidos debe dejar de interferir en la política interna de Venezuela, especialmente con el objetivo de derrocar al gobierno del país. Las acciones de la administración Trump y sus aliados regionales empeorarán casi seguro la situación en Venezuela, lo que llevará a un sufrimiento humano innecesario, violencia e inestabilidad.

La polarización política en Venezuela no es nueva; el país lleva mucho tiempo dividido por las diferencias raciales y socioeconómicas. Pero la polarización se ha profundizado en los últimos años. Esto se debe, en parte, al apoyo de los Estados Unidos a una estrategia de la oposición para destituir al gobierno de Nicolás Maduro por medios extraelectorales. Si bien la oposición está dividida respecto a esta estrategia, los EE.UU. han apoyado a los partidarios de la línea dura en su objetivo de derrocar al gobierno de Maduro mediante protestas a menudo violentas, un golpe de Estado militar u otras vías que eluden las urnas.

Bajo la administración de Trump, la retórica agresiva contra el gobierno venezolano se disparó a un nivel más extremo y amenazador, con sus representantes hablando de “acción militar” y condenando a Venezuela, junto con Cuba y Nicaragua, como parte de una “troika de tiranía”. Los problemas derivados de las políticas del gobierno venezolano han empeorado por las sanciones económicas de Estados Unidos, que serían ilegales bajo los parámetros de la Organización de Estados Americanos y las Naciones Unidas, así como de la legislación de los Estados Unidos y otros tratados y convenciones internacionales. Estas sanciones han reducido los medios por los cuales el gobierno venezolano podría haber escapado de la recesión económica, y a la vez han causado una dramática caída en la producción de petróleo y han agravado la crisis económica, causando la muerte de muchas personas que no pudieron acceder a medicamentos que hubieran podido salvar sus vidas. Mientras tanto, los gobiernos de EE.UU. y sus aliados continúan culpando únicamente al gobierno de Venezuela por el daño económico, incluso el causado por las sanciones estadounidenses.

Ahora EE.UU. y sus aliados, incluido el secretario general de la OEA, Luis Almagro, y el presidente de extrema derecha de Brasil, Jair Bolsonaro, han empujado a Venezuela al precipicio. Al reconocer al presidente de la Asamblea Nacional, Juan Guaidó como el nuevo presidente de Venezuela –algo ilegal según la Carta de la OEA– la administración Trump ha acelerado drásticamente la crisis política de Venezuela con la esperanza de dividir a los militares venezolanos y polarizar aún más a la población, obligándola a elegir un bando. El obvio y a veces explícito objetivo es expulsar a Maduro a través de un golpe de Estado.

La realidad es que, a pesar de la hiperinflación, la escasez y una profunda depresión, Venezuela sigue siendo un país políticamente polarizado. Los Estados Unidos y sus aliados deben dejar de alentar la violencia presionando por un cambio de régimen violento y fuera de la legalidad. Si la administración Trump y sus aliados continúan su curso imprudente en Venezuela, el resultado más probable será el derramamiento de sangre, el caos y la inestabilidad. Estados Unidos debería haber aprendido algo de sus iniciativas de “cambio de régimen” en Irak, Siria, Libia y su larga y violenta historia de patrocinio de “cambios de régimen” en América Latina.

Ninguna de las partes en Venezuela puede simplemente vencer a la otra. El ejército, por ejemplo, tiene al menos 235.000 efectivos de primera línea, y hay al menos 1,6 millones en las milicias. Muchas de estas personas lucharán, no solo sobre la base de la creencia en la soberanía nacional que se mantiene ampliamente en América Latina, frente a lo que parece ser una intervención liderada por Estados Unidos, sino también para protegerse de una posible represión si la oposición derroca al gobierno por la fuerza.

En semejante situación, la única solución es un acuerdo negociado, como sucedió en el pasado en países latinoamericanos cuando las sociedades políticamente polarizadas no pudieron resolver sus diferencias a través de las elecciones. Ha habido esfuerzos con potencial, tales como los liderados por el Vaticano en el otoño de 2016, pero no recibieron apoyo de Washington y sus aliados, concentrados en el cambio de régimen. Esta estrategia debe cambiar para que exista una solución viable a la crisis actual en Venezuela.

Por el bien del pueblo venezolano, la región y por el principio de la soberanía nacional, estos actores internacionales deben apoyar las negociaciones entre el gobierno venezolano y sus oponentes que permitirán que el país salga finalmente de su crisis política y económica.

26/01/2019
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Firmantes
Noam Chomsky, Profesor Emérito, MIT y Profesor Laureate, Universidad de Arizona
Laura Carlsen, Directora, Programa de las Américas, Centro de Política Internacional
Greg Grandin, profesor de Historia, Universidad de Nueva York
Miguel Tinker Salas, profesor de Historia de América Latina y Estudios Chicano / a Latino / a en Pomona College
Sujatha Fernandes, profesora de Economía Política y Sociología, Universidad de Sydney
Steve Ellner, editor gerente asociado de Perspectivas de América Latina
Alfred de Zayas, exexperto independiente de la ONU sobre la promoción de un orden internacional democrático y equitativo y único relator de la ONU que visitó Venezuela en 21 años
Boots Riley, escritor / director de Sorry to Bother You, músico
John Pilger, periodista y cineasta
Mark Weisbrot, codirector del Centro de Investigación Económica y Política
Jared Abbott, PhD Candidate, Departamento de Gobierno, Universidad de Harvard
Dr. Tim Anderson, director, Centro de Estudios Contra Hegemónicos
Elisabeth Armstrong, profesora del estudio de mujeres y género, Smith College
Alexander Aviña, PhD, profesor asociado de Historia, Universidad Estatal de Arizona
Marc Becker, profesor de Historia, universidad estatal de Truman
Medea Benjamin, cofundadora de CODEPINK
Phyllis Bennis, Directora de Programas, New Internationalism, Institute for Policy Studies
Dr. Robert E. Birt, profesor de Filosofía, Bowie State University
Aviva Chomsky, profesor de Historia, Universidad Estatal de Salem
James Cohen, Universidad de París 3 Sorbonne Nouvelle
Guadalupe Correa-Cabrera, Profesora Asociada, Universidad George Mason
Benjamin Dangl, PhD, editor de Hacia la libertad
Dr. Francisco Dominguez, Facultad de Ciencias Sociales y Profesionales, Universidad de Middlesex, Reino Unido
Alex Dupuy, John E. Andrus Profesor de Sociología Emérito, Universidad de Wesleyan
Jodie Evans, Cofundadora, CODEPINK
Vanessa Freije, profesora asistente de Estudios Internacionales, Universidad de Washington
Gavin Fridell, Cátedra de Investigación de Canadá y Profesor Asociado en Estudios de Desarrollo Internacional, St. Mary’s University
Evelyn González, Consejera, Montgomery College
Jeffrey L. Gould, Profesor Rudy de Historia, Universidad de Indiana
Bret Gustafson, profesor asociado de Antropología, Universidad de Washington en St. Louis
Peter Hallward, profesor de Filosofía, Universidad de Kingston
John L. Hammond, profesor de Sociología, CUNY
Mark Healey, profesor asociado de Historia, Universidad de Connecticut
Gabriel Hetland, profesor asistente de Estudios Latinos de América Latina, el Caribe y los Estados Unidos, Universidad de Albany
Forrest Hylton, Profesor Asociado de Historia, Universidad Nacional de Colombia-Medellín
Daniel James, Bernardo Mendel Cátedra de Historia Latinoamericana
Chuck Kaufman, Co-Coordinador Nacional de la Alianza por la Justicia Global
Daniel Kovalik, profesor adjunto de Derecho, Universidad de Pittsburgh
Winnie Lem, profesora, Estudios de Desarrollo Internacional, Universidad de Trent
Dr. Gilberto López y Rivas, profesor investigador, Universidad Nacional de Antropología e Historia, Morelos, México
Mary Ann Mahony, profesora de Historia, Universidad Estatal de Connecticut Central
Jorge Mancini, Vicepresidente de la Fundación para la Integración Latinoamericana (FILA)
Luís Martin-Cabrera, profesor asociado de Literatura y Estudios Latinoamericanos, Universidad de California San Diego
Teresa A. Meade, Florence B. Sherwood Profesora de Historia y Cultura, Union College
Frederick Mills, profesor de Filosofía, Bowie State University
Stephen Morris, profesor de ciencias políticas y relaciones internacionales, Middle State State University
Liisa L. North, profesora emérita, Universidad de York
Paul Ortiz, profesor asociado de Historia, Universidad de Florida
Christian Parenti, profesor asociado, Departamento de Economía, John Jay College CUNY
Nicole Phillips, profesora de Derecho en la Universidad de la Fundación, Dra. Aristide Faculté des Sciences Juridiques et Politiques y profesora adjunta de derecho en la Facultad de Derecho de la Universidad de California en Hastings
Beatrice Pita, profesora del Departamento de Literatura de la Universidad de California en San Diego
Margaret Power, profesora de Historia, Instituto de Tecnología de Illinois
Vijay Prashad, Editor, El TriContinental
Eleanora Quijada Cervoni FHEA, facilitadora de educación del personal y mentora de EFS, Centro de Educación Superior, Aprendizaje y Enseñanza en la Universidad Nacional de Australia
Walter Riley, abogado y activista
William I. Robinson, profesor de Sociología, Universidad de California, Santa Bárbara
Mary Roldan, Dorothy Epstein Profesora de Historia Latinoamericana, Hunter College / CUNY Graduate Center
Karin Rosemblatt, profesora de Historia, Universidad de Maryland
Emir Sader, profesor de Sociología, Universidad del Estado de Río de Janeiro
Rosaura Sánchez, profesora de Literatura Latinoamericana y Literatura Chicana, Universidad de California, San Diego
TM Scruggs Jr., profesor emérito, Universidad de Iowa
Victor Silverman, profesor de Historia, Pomona College
Brad Simpson, profesor asociado de Historia, Universidad de Connecticut
Jeb Sprague, profesor de la Universidad de Virginia
Christy Thornton, profesora asistente de Historia, Johns Hopkins University
Sinclair S. Thomson, profesor asociado de Historia, Universidad de Nueva York
Steven Topik, profesor de Historia, Universidad de California, Irvine
Stephen Volk, profesor de Historia emérito, Oberlin College
Kirsten Weld, John. L. Loeb profesor Asociado de Ciencias Sociales, Departamento de Historia, Universidad de Harvard
Kevin Young, profesor asistente de historia, Universidad de Massachusetts Amherst
Patricio Zamorano, investigador de estudios latinoamericanos; Director Ejecutivo, InfoAmericas

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