sábado, 19 de diciembre de 2020
Ay, chiquet, chiquet, quina mala úlor me da por la nariz el pajarete este del Covid-19. Para mí que va a ser obra divina de mi todo poderoso Dios, uno, entero, verdadero, etc., etc., de los cielos y de por tierra, mar y aire, aprovechando que el Pisuerga pasa por Valladolid con el que poder tapar milagrosamente todos los agujeros del gran capital, al tiempo de meterle un nuevo pellizco al costillar de los trabajadores. ¿A que va a ser esto? Y yo con estos pelos.
El capitalismo: ¿Qué es y hacia dónde se encamina? (Cuando el trabajador sepa y comprenda qué es el capitalismo y hacia dónde carbura empezarán las cosas a cambiar, a mejor para el trabajador)
El capitalismo: ¿Qué es y
hacia dónde camina?
Análisis sobre el capitalismo de José Iglesias
Fernández para Kaos en la Red
Kaosenlared
18 Dic, 2020
La idea de transformación no
está en mejorar los salarios sino en destruir el capitalismo. K. Marx
La evolución de las sociedades
Remarcan K. Marx y F.
Engels que la “historia de todas las sociedades hasta nuestros días es
la historia de la lucha de clases”.1 Es decir, que si nos
remontamos a los modos de producción más conocidos por antropólogos e
historiadores, como el primitivo, asiático, antiguo, esclavista, germánico,
feudal y esclavista, encontramos en todo ellos, cada uno con sus peculiaridades
y su tiempo, ese dominio de clase. Anticipamos esta observación porque son
muchas las propuestas y los sujetos sociales que, por su contenido e ideología,
son y hacen pías recomendaciones para que el sistema se humanice, se vuelva
ecologista y abandone su subsunción del patriarcado y militarismo, fuertes
aliados para su modo de sobrevivencia. Aspiran a domar el león para que no se
coma las gacelas.
Las características
fundamentales del capitalismo.
Cómo modo de producción
social, el capitalismo está estructurado con unas características que,
con el paso del tiempo, no desaparecen; pueden engordar, enfermar, envejecer, y
hasta transmutarse, pero siguen siendo la estructura mater que
lo orienta durante el desarrollo hacia fases más o menos agresivas contra las
poblaciones que domina2. Es decir, cuando el capitalismo
emerge dentro del sistema feudal, está constituido por unos objetivo
fundamental que no se ha modificado en toda su existencia: el beneficio
privado para una clase minoritaria a expensas de controlar al resto de
la clases laboriosas y populares como sujetos de explotación y
rendimiento.
Para mantener el control de
este motor activo en esa dirección, el sistema ha tenido que incluir y
controlar a lo largo del tiempo otras características fundamentales3 cómo la propiedad
privada de los medios e instrumentos de producción, producir para
el intercambio vía el sistema de mercados y el dinero como
medio de acceso a los bienes materiales, desposeer las poblaciones y someterlas
al mercado de trabajo como única forma de acceso a cubrir las
necesidades para la sobrevivencia humana. Una estructura vertical,
jerárquica, con un circuito de reproducción del poder, que permita
someter a las poblaciones, ya convertida en mercancía, a esa minoría
propietarista y ejercer un control sobre las clases que representa el capital y
someten al trabajo. Un estado que, como garante del sistema político, fluctúe y
legisle a conveniencia de los capitalistas según el nivel de conflicto en la
lucha de clases; es decir, poder convertir la democracia burguesa en autocracia
capitalista.
Exponemos a continuación lo
que denominamos la matriz del sistema capitalista, además de
pivotar sobre la propiedad privada, se acompaña y refuerza con la
instauración de una lógica de acumulación de la riqueza, con un
sistema de poder jerárquico , vertical, para controlar
las conciencias de clase de las poblaciones, de un sistema de
apropiación de la riqueza productiva en forma de saberes y tecnologías,
de forma que pueda apropiarse del plus valor generado por los trabajadores sin
que estos desarrollen la lucha de clases que debiera producir
tal robo: Este instrumento permite diseñar y evaluar qué procesos y
alternativas responden a cada característica e institución de todo el entramado
sistémico del capitalismo.
Sobre el terreno de las
relaciones entre características para generar y apropiarse de la riqueza que
producen los trabajadores, el capitalismo organiza una serie de instituciones sociales
y mercantiles para asegurarse el mantenimiento en el tiempo y en el espacio de
esta lógica:
*Todo es y todos somos mercancía.
La mercancía se produce para el intercambio; el intercambio se realiza en
el mercado; estos son de bienes y servicios controlados
por sus propietarios los empresarios; de moneda o dinero, en manos
de banqueros y especuladores; de mano de obra, detentada únicamente
por sus propietarios los trabajadores. En todos estos mercados
lo que los mueve es el beneficio, motor de la producción e
intercambio de las mercancías y del empleo asalariado. Esta producción y
consumo masivo requiere, así mismo, la organización de mercados globales. que, Sin
beneficio, no hay actividad económica ni empleo. Sin empleo, marginados
de la esfera de producción, las poblaciones laboriosas se quedan marginados
de la esfera de consumo y a la protección de los servicios de bienestar social encomendados
al Estado. De aquí el poder de los empresarios y banqueros para doblegar con
facilidad a sus intereses a las poblaciones residentes en un territorio y a lo
largo de los tiempos; de pasar sin excesivo conflicto de clases de un Estado
del Bienestar a un Estado de índole represivo.
Capitalismo: relaciones
sistémicas o entry points
PROPIEDAD |
JERARQUIA |
CONCIENCIA |
||
Poder privado para |
Poder de controlar |
Poder determinar |
||
decidir sobre la |
el comportamiento |
culturalmente la |
||
propiedad |
de la gente |
formación de ideas, |
||
actitudes y gustos |
||||
SISTEMA CAPITALISTA |
||||
ACUMULACION |
TECNOLOGIA |
CLASE |
||
Lógica de |
Desarrollo de las |
Capital / Trabajo |
||
acumulación |
fuerzas productivas |
Generación y |
||
del capital |
y su impacto en |
apropiación de la |
||
la naturaleza |
plusvalía |
Fuente: Elaboración propia,
Capitalismo hoy: cómo se
transmuta y empobrece a las poblaciones
Aprovechando las llamadas
crisis capitalistas,4 y el escaso conflicto de clase
que se organiza durante estas fases de parada y avance, empresas y
banqueros aprovechan la situación de desempleo para introducir reformas
laborales y sociales que van mermando el nivel de bienestar de los trabajadores
y los grupos de población dependientes de estos; estas reformas modifican
esencialmente las relaciones laborales y las políticas de bienestar social
conseguidas hasta la fecha por la lucha de clases de los movimientos obreros.
Tal es el rastro sangrante dejado por el neoliberalismo que
algunos sectores del buenismo/humanismo empresarial ven ahora la necesidad de
enviar un mensaje positivo a la sociedad debido al fuerte impacto que está
presentando el Coronavid-19. Por un lado, temiendo la inestabilidad
social a que puede dar lugar una tan enorme desigualdad y pobreza, y, por otro
lado, tratando de aprovechar las nuevas oportunidades de negocio, que
aporta esta situación.
Desaparecidos los espacios con
experiencias de modelos socialistas,5 que ideológicamente se
presentaban como alternativas al capitalismo, 6 y abandonados los programas de
transformación del sistema por buena parte de los partidos, sindicatos,
cooperativas, mutuas y colectivos afines 7 que aún habitan el universo de
izquierdas, 8 los
monopolios generalizados 9 por
todos los espacios de la globalización capitalista no encuentran resistencias
para extender su lógica depredadora sobre los recursos naturales y explotadora
sobre los seres humanos en todo el planeta.10 Como inciso, Constantino
Bértolo lamenta la deriva ideológica de las izquierdas afirmando: “no
se puede seguir insistiendo en la necesidad de la revolución mientras uno se
sonroja intelectualmente de la revolución”.11
Es decir, aprovechando la
crisis actual, una crisis que algún autor matiza que la debemos catalogar como
“una crisis dentro del
neoliberalismo, no una crisis
del neoliberalismo”,12 al capitalismo planetario se
le abre una nueva situación en
el conflicto mundial capital-trabajo,13 en la que encuentra la
oportunidad de liquidar el viejo modelo de crecimiento con bienestar social
para una parte de la población mundial, junto a una situación de poder total
que le permite reestructurar los espacios geopolíticos y geoeconómicos
del planeta sin apenas convocar un frente múltiple de geografías y
sujetos con oposición fuertemente organizada. Es decir, advierte el momento en
que le conviene ‘acordar o encontrar de la forma más pacífica’ un nuevo
“reparto del mundo [mercados] entre las grandes corporaciones multinacionales,
acompañada del reparto [territorial] del planeta entre las grandes potencias
capitalistas”.14 O como establece Roger
Martelli, “la mundialización del capital hace que no haya un solo orden del
mundo, sino cuatro que se entremezclan, sin anularse. […] La tendencia
histórica a largo plazo avanza hacia el cuarto modelo, hacia la casa común
planetaria, pero el dominio está todavía en el tercero, en la red mundial
jerarquizada de matriz capitalista-imperialista”.15 En esta línea de cambios,
incluso algún economista neo-convencional ya admite abiertamente esta mutación
del capitalismo: lo que cambia es “el modelo de toma de decisiones, en el que
ni el gobierno catalán ni el español tendrán la soberanía actual”.16
El capitalismo, en su
necesidad de expansión territorial, siempre ha sabido cómo integrar los
diversos autoritarismos ancestrales (patriarcales y religiosos) a sus diversos
períodos de desarrollo. Ahora bien, el sistema se encuentra con una coyuntura
única y favorable para las fuerzas conservadoras en la historia de la lucha de
clases, 17 por
lo que han decidido aprovechar
el poderío que les brinda las circunstancias actuales, ya no para integrar como
en el último siglo, sino para destruir domesticando al enemigo de clase. Han
pensado que es el momento de poner/imponer nuevas reglas, de
recomponer el capitalismo planetario a partir de las permanentes bases
estructurales que lo sustentan. 18
Es sabido que el afán del
capitalismo por la obtención de beneficios le lleva a aprovechar todas las
oportunidades de obtenerlo, haciendo del mismo un sistema enormemente dinámico
que cambia constantemente pero sin alterar jamás su objetivo fundamental, que
es el beneficio para el capital. Y en las últimas décadas estos cambios han sido
de una formidable magnitud e importancia. Mencionamos a continuación algunas de
las variaciones más significativas:
Además de la globalización,
que ya está siendo puesta en cuestión, y las instrumentales innovaciones
tecnológicas de la última parte del siglo XX, indudablemente, sabemos que detrás, debajo, o en el interior
del capitalismo planetario, el capitalismo financiero se ha convertido
en hegemónico y determinante sobre el capitalismo productivo. Esto quiere
decir que buena parte de la transformación de los espacios económico/políticos
del mundo estarán, en el corto plazo, inicialmente conformados por los
intereses de los poderes financieros.19 No
en balde, de acuerdo con los datos “del Banco de Pagos Internacionales, la
cantidad de dinero ficticio, creado financieramente, supera más de diez
veces el número de bienes y servicios que se pueden comprar en este mundo.
[Además], este dinero financiero crece de manera exponencial”.20 De aquí que nos interese
detectar hacia dónde pretenden ir los imperios financieros para entender las
transformaciones que se están ya dando en las economías reales. De todas
formas, esto no nos impide ver algunas de las limitaciones de la economía
financiera que nos marcan un norte hacia dónde dirigir nuestras reflexiones:
- Una es la estructura de
propiedad de las empresas multinacionales productoras de bienes y
servicios, y que está compuesta, en buena parte, por las inversiones que
realiza el sector financiero en las mismas. Es decir, de una buena parte
de los pasivos de las empresas de la economía real los propietarios de los
mismos son las entidades financieras que, al depreciar, o aumentar la
infrautilización de la capacidad productiva,21 o hacer obsolescente
parte del capital productivo, están causando pérdidas en las mismas, así
como un decrecimiento de la economía productiva que como capital
financiero ha de asumir. Por tanto, hemos de pensar que tiene que
haber alguna limitación dónde la economía financiera deje de ahogar a sus
propios intereses, a los beneficios que obtiene de la economía real.22 Pero, ¿dónde situamos
esta restricción?
- Otra es la necesidad
sistémica del capitalismo de una producción y realización de plusvalías en
el medio y largo plazo como base de la acumulación de riqueza no
ficticia. Es decir, en la medida que esta coyuntura, en la que el
capitalismo financiero está imponiendo un ritmo bajo, o de decrecimiento,
a la economía productiva, pero esta ha de tener un punto de inflexión
hacia una senda de desarrollo positivo; esta ‘austeridad’ en la economía
real no puede tener como objetivo el hundimiento total del sector del
capitalismo productivo. Por tanto, pienso que la recuperación del sector
productivo se hará cuando las reformas en el mercado laboral y las
privatizaciones estén en el punto óptimo que beneficia a los dos sectores
de la economía: la productiva y la financiera. Pero, ¿dónde
situamos este punto de recuperación?
- Ha cambiado también muy
sustancialmente lo que podemos llamar la composición del capital
propiedad, por falta de un nombre mejor: por un lado, el dominio y poder
del capital financiero creciente desde los setenta, y por otro, cómo
frente a los capitales formados por capitalistas que tradicionalmente se
han considerado ‘empresariales’ que crecen y se concentran, nos encontramos
ahora con un mundo distinto de ‘capitalistas’, en el sentido siguiente:23 La presencia de los
fondos de pensiones –los mayores inversores del mundo- y los fondos de
inversión hacen que ‘el capital’ esté constituido ahora por millones de
capitalistas anónimos, de poco poder individual y absolutamente alejados
de las decisiones que se toman en su nombre (casi como si depositasen los
fondos en una caja de ahorros o banco) , sólo interesados por la
rentabilidad que obtendrán de sus fondos y la seguridad de los mismos.
Gestionados y dominados por un grupo relativamente pequeño de
accionistas-managers de los fondos, preocupados principalmente por sus
pingües remuneraciones anuales y que los inversores estén satisfechos con
sus beneficios (beneficios anuales más valor de las acciones en bolsa).
Generando a modo de círculos concéntricos de decisión y poder que
confluyen en el 1% de los grandes accionistas que utilizaran en su
beneficio todo el poder de las ingentes masas de capital. Son estos los
capitalistas que toman las decisiones de inversión y las dirigen en
función de sus intereses y ni siquiera en los de los pequeños y anónimos
accionistas. Actualmente el volumen cuantitativo de estos capitales
relativamente pequeños e impersonales se ha ampliado fuertemente e integra
mucho más a los pequeños ahorradores que en el pasado. ¿Tienen estos
cambios algún efecto significativo en la actuación del capital o en las reacciones
de la población a esta? ¿Qué significa esta pequeña propiedad que junto
con la propiedad de las viviendas llevan a (emulando a la Sra. Thatcher)
un capitalismo popular, a hacer que muchos trabajadores se sientan
propietarios?. Merece la pena tener en cuenta estas modificaciones en la
composición interna del capital.
Algunos de los espacios
fuertes 24del
planeta ya están experimentando una reestructuración de acuerdo con los
diferentes modelos de imperialismo capitalista que en ellos se cruzan, conviven
y dominan.25 Cada uno presenta sus características
propias de implantación del nuevo modelo imperialista de acumulación, pero
todos confluyen en unas líneas generales y comunes que moldean los clásicos
sectores sistémicos del capitalismo. No cambian esencialmente la producción
y distribución de mercancías, la circulación y realización del capital, la
reproducción y acumulación de la riqueza productiva, así como la concentración
y el reparto de poder intra-clase en cada uno de los espacios económicos y
políticos del planeta. Ahora bien, todos ellos están cruzados por dos elementos,
cuya presencia o influencia en la nueva lógica de acumulación, al sistema le
conviene disminuir sustancialmente: la utilización de los recursos
naturales y el enorme excedente de la población mundial que
habita el planeta. Tampoco hemos de olvidarnos de la privatización gratuita (o
desposesión) del espacio público (urbano y rural), una manera sutil de
continuar apropiándose del mismo, ni de la desaparición del ámbito de
lo público como distinto del ámbito de lo privado, en la medida que la
sociedad civil es uno de sus objetivos preferentes a consolidar en esta etapa
de transmutación.
Como parte de ese proceso, muchas
de las políticas que el capitalismo viene aplicando ya tienen repercusiones
en ámbitos que, según el proceso a medio y largo plazo, irán
configurando los dos elementos anteriores:
- En el ámbito político. Sustituir por organismos administrativos
y burocráticos, la gestión y seguimiento de las políticas que se
proponen en las instituciones democráticas.26 De hecho, A.
Merkel está reclamando a los países de la eurozona la cesión de
soberanía; de lo contrario, dice, “no seremos capaces de continuar
construyendo Europa”.27 Bajo estos
tribunos/tecnoburócratas,28 las
nuevas funciones del Estado se centrarán en mantener el sistema policial,
el sistema judicial, el sistema carcelario/penal, el sistema militar, y un
sistema fiscal con capacidad para recaudar desde la población los
impuestos necesarios para mantener estas actividades represivas estatales.29 Así mismo, el papel del
sistema legislativo en los parlamentos democráticos (congresos y
senados), para diluyendo los delitos de fraude y corrupción que
diariamente se cometen en el capitalismo, lograr que sean eliminados. Durante
el proceso de mutación hacia la naturaleza tecno-burocrática del Estado,
buena parte de estos sistemas pasarán por un proceso de privatización,
aparte de la eliminación de los ámbitos público/privado. Otras
instituciones oficiales quedarán gestionadas en un régimen mixto de
Estado-mercado. De todas maneras, no queremos decir que se debilita la
presencia del Estado, pues el capitalismo va a necesitar más que nunca dar
más peso a la función de represión para exigir la intensificación de la
explotación de los trabajadores y reducir las poblaciones a un una
situación de miseria: “sin un Estado capitalista fuerte, el capitalismo no
aguantaría mucho como sistema”.30 Con sus
argumentos, Marx/Engels ya afirmaban que “el gobierno del
Estado moderno no es más que una junta que administra los negocios comunes
de toda la clase burguesa”.31
- En el ámbito económico. En el sector productivo, no habrá apenas alguna
regulación relacionada con los aspectos laborales ni ecológicos,
siguiendo el modelo de zona franca implantado en países
con economías pobres: la condición de parado es una situación del
trabajador, en la que su fuerza de trabajo ya va camino del lugar de
desguace.32 La
mayoría de las actividades sociales serán privadas y sujetas al mecanismo de
mercado: la atención social, la cultura y la educación públicas ya
hace tiempo que se han convertido en bienes mercantiles que rinden
beneficio monetario e ideológico al sistema. Por tanto, quién tenga poder
adquisitivo sobrevivirá, y quien no contribuirá a reducir la tasa de
crecimiento vegetativo, uno de los objetivos del capitalismo maltusiano.
O, como ya señalaban Marx/Engels en 1848, se trata de
volver a imponer a los trabajadores que lo “que cobren no sea más que el
valor de los medios de subsistencia indispensable para vivir y perpetuar
su linaje”.33 En este proceso de
transmutación del capitalismo, decía un trabajador español que “ya solo me
queda robar para comer”.34 Sobre estos dos
aspectos, modelo laboral y política demográfica, nos extenderemos
posteriormente.
- En el ámbito social. Desmantelamiento total de la universalidad de los
bienes de que disfruta la población de los países ricos con
estado del bienestar. Las contingencias humanas previsibles, como la
pobreza,35 la enfermedad, el
analfabetismo, el desamparo social, quedarán sujetas a las relaciones
asistenciales que puedan organizarse en y desde las asociaciones
caritativas del sector privado. Este es precisamente el ámbito
preferente en el que los recortes presupuestarios se están concentrando
con mayor dureza para la población. También es el ámbito donde lo público
ha de dar paso a lo privado; la acción social del Estado ha de diluirse a
favor de la actividad del mercado. Estamos en camino de que el poder
vuelva a recuperar, modernizadas, la famosas y funestas Leyes de
pobres inglesas (1536), una manera legal de reprimir a los
considerados vagabundos e indigentes, autorizar la separación de los hijos
de los padres para ponerlos a trabajar en fábricas y minas, y a las
esposas de los maridos para obligar a unas y a otros a trabajar sin
salario en concepto de aprendizaje, en <<casas de trabajo>>,
un tipo de eufemismo que venía a sustituir el de correccional,
reformatorio, cárcel o prisión. Por no mencionar las terribles
circunstancias a las que se ve constreñida la población inmigrante.
El tema de la
población merece un tratamiento más amplio. Este es un aspecto que
cobrará gran atención en el futuro, y que no es ajeno a la reestructuración
espacial del planeta. Porque, como señalaba Charles Darwin, “nacen
más individuos de los que pueden sobrevivir”.36 China ya hace décadas que
tiene programas de control sobre su demografía. La UNESCO, la OMS, la FAO y
otros organismos públicos internacionales tienen experiencia de estos programas
de control de la población de acuerdo con programas regionales y locales aplicados
en otros momentos. Actualmente, el capitalismo planetario se
encuentra que su ejército de reserva de fuerza de trabajo no sólo es
excesivo sino que va en aumento, lo que exige el diseño de unas políticas
para reducirlo drásticamente. Son varias las instituciones internacionales (BM,
FMI, OMS, OCDE, etc.), y umbres de dirigentes mundiales cimeras, que vienen considerando la evolución de la población
mundial como un serio desequilibrio demográfico, con un gran costo para
la acumulación capitalista, que debe ser controlado puntualmente en todo el
planeta. Incluso en nuestros días se recurre a menudo a vincular y justificar
con la degradación del medio ambiente la necesidad de una respuesta al
‘problema’ poblacional. Es fácil encontrar la ‘preocupación humana’ de los
políticos del sistema así como el destino que programan, para la población
excedente del planeta: En cada conferencia de la ONU se recuerda que el control
demográfico ha de recibir una atención prioritaria. En una de las sesiones de
apertura, el director de población, asuntos económicos y sociales de la
ONU, Joseph Chamie, hizo suyas las palabras del Secretario General
diciendo: “el rápido e incontrolable crecimiento de la población unidos al
desarrollo económico durante el siglo XX, fueron simultáneos con la degradación
ambiental”.37 Para para la implementación
de las metas de la Conferencia Internacional sobre Población y Desarrollo de El
Cairo (1994) la Comisión también revisó el informe de Annan sobre
las tendencias demográficas, vinculándolas a la movilización de recursos
financieros). En el State of the World Forum, celebrado en 1995, y
al que acudieron más de quinientos innovative leaders, acuerdan
como “la sociedad desarrollada, y sobre todo informatizada, no necesita la mano
de obra que ya existe; con el trabajo del 20% de la población se pueden
mantener los ratios de crecimiento que perpetúan el sistema. De ahí la idea de
la sociedad 20/80: un 20% imprescindible y un 80% inútil”.38 Así mismo, la Comisión revisó
el informe 2001 del Secretario General de las Naciones Unidas, Kofi
Annan, sobre el estado de la población mundial. Según la información
oficial, «el informe señala la preocupación acerca del efecto que el
crecimiento rápido de la población tiene sobre el desarrollo de la economía y
la degradación del medio-ambiente«. No hay que ser un lince para entender
que si la población mundial no disminuye drásticamente hasta ‘niveles óptimos’,
lo que está en riesgo para los intereses del sistema es el crecimiento
económico y la sobre utilización de recursos naturales y financieros, tres
elementos sistémicos indispensables para mantener el poder de los
poderosos. Aparte de otros argumentos, como la excusa de atender “la salud
reproductiva, el que la planificación familiar sea accesible a todos, y el
evitar la degradación del medio ambiente y contribuir a la seguridad global”,
estas medidas buscan dar la sensación de controlar la población mediante
‘medios éticos’. Se entiende que, dada la dureza de los medios de control a
emplear, las políticas sobre población han de ser sugeridas o camufladas
mediante una retórica ética. Más próximos en el tiempo, la idea que persigue
la UNESCO en Rio+20,39 de
que hay que transformar las economías en verdes, en sociedades verdes,
conlleva varias directrices sutiles relacionadas con el control de la
población: “hay que controlar la demanda de recursos que excede en un 20%” la
capacidad biológica del planeta. […] Imposible aplicar un modelo que sea
sostenible, que deje un billón de gente hambrienta, pobre y socialmente
excluida […] Para diseñar un modelo sostenible, hay que comenzar por reconocer
que el mundo ha cambiado, especialmente en aumentos de la población, del
consumo, de los modelos de producción, los cambios climáticos, y el aumento de
los desastres naturales, o provocados por la presencia humana”. Otros temas que
son recurrentes en estos encuentros o informes son la planificación familiar,
actitudes hacia la reproducción y los comportamientos sexuales,40 etc. Afortunadamente,
desde dentro de la profesión médica, Clara Valverde “muestra
que la política neoliberal consiste en una necropolítica cuyo objetivo
declarado es acabar con los excluidos. No se trata de ninguna exageración. El
capital desbocado en su marcha adelante destruye todos los obstáculos que
encuentra en su camino. Y son obstáculos todas aquellas personas que no son
rentables, que no son empleables. Desde los pobres a los discapacitados y
dependientes, pasando por los jóvenes o los ancianos sin recursos. El mérito de
sus reflexiones es mostrar cómo ese «poder matar» se materializa en políticas
concretas”.41
Pero esto es nada nuevo. F.
Engels ya denunciaba hace más de un siglo que interés tenía para el
capitalismo el bienestar de las poblaciones: el capitalismo “no persigue otro
fin en realidad que el de enriquecerse por vuestro trabajo, mientras pueda
vender el producto del mismo, y de dejaros morir de hambre, desde el momento en
que ya no pueda sacar más provecho de este comercio indirecto de carne humana.
[…] En esta guerra social, el capital, la propiedad directa o indirecta de
las subsistencias y de los medios de producción es el arma con la cual se
lucha; asimismo está claro como el día, que el pobre sufre todas las
desventajas de semejante estado: Nadie se preocupa de él; lanzado en este
torbellino caótico, tiene que defenderse como pueda. Si tiene la suerte de
encontrar trabajo, es decir; si la burguesía le concede la gracia de
enriquecerse a su costa; obtiene un salario que apenas es suficiente para
sobrevivir; si no encuentra trabajo, puede robar, si no teme a la policía, o
bien morir de hambre y aquí también la policía cuidará que muera de hambre de
manera tranquila, sin causar daño alguno a la burguesía”. 42
Hemos intentado sintetizar muy
escuetamente los rasgos esenciales del capitalismo, tratando de mostrar que
estos no han cambiado a lo largo de toda su historia. Es necesario añadir, sin
embargo, que el capitalismo es un sistema que cambia constantemente en sus
formas, para adaptarse a la consecución de sus intereses y es imposible recoger
en este trabajo siquiera una parte de las modificaciones que ha explorado, en
particular las que han sido introducidas en los últimos tiempos. Con las crisis
sucesivas desde los setenta (setenta, 2008 y la actual) y con el concurso de
las nuevas tecnologías, el capitalismo ha introducido profundos cambios en el
sistema -neoliberalismo, globalización, aunque actualmente parece que este se
limita-, así mismo cambios en las relaciones laborales -generalización del
paro, de los bajos salarios y la precariedad laboral, fuerte ampliación y
expansión de las formas del trabajo autónomo- falsos autónomos, emprendeduría,
utilización de los contratos mercantiles en lugar de laborales,
‘desalarización’ de los trabajadores, ampliación del trabajo informal, etc
,etc. de forma que está logrando que la mayoría de la ciudadanía se
integre de tal forma en el sistema que los interiorice como los propios
valores personales. Gradualmente la población piensa no según sus propios
intereses y valores sino que ha asumido los del sistema y este no tiene ninguna
necesidad de recurrir a presionarla para aceptarlos. El autor Byung-Chul
Han ha tratado muy adecuada y ampliamente este aspecto que
sintetizamos con sus citas: “el
exceso de trabajo y rendimiento se agudiza y se convierte en autoexplotación.
Esta es mucho más eficaz que la explotación por otros, pues va acompañada de un
sentimiento de libertad. El explotador es al mismo tiempo el explotado. Víctima
y verdugo ya no pueden diferenciarse”, como clases sociales antagónicas…el
hombre depresivo, aquel animal laborans que se explota asimismo, a
saber: voluntariamente, sin coacción externa. Él es, al mismo tiempo, verdugo y
victima… El sujeto de rendimiento está libre de rendimiento externo que lo
obligue a trabajar o incluso lo explote”. 43
Estos cambios tienen grandes y
graves consecuencias para luchar frente al sistema. Pero para terminar con una
nota un poco, sólo un poco más optimista, hay que señalar también que a medida
que el capitalismo refuerza su dominio, parte de los trabajadores y las clases
populares están diseñando y ensayando también nuevas formas de reacción y lucha
-nuevas experiencias y extensos movimientos sociales – feminismo,
ecologismo-;movimientos sociales en sus diversas variantes, plataformas,
mareas, comunalismo, etc- que permiten pensar que, como a través de los siglos,
los seres humanos no se dejaran dominar por los intereses materiales e
intentaran avanzar hacia su pleno desarrollo.
José Iglesias Fernández
Barcelona, 1 diciembre del
2020.
1 K.
Marx y F. Engels. El manifiesto comunista, p.39. Fundación de
Estudios Socialistas F. Engels, Madrid 1997.
2 De la misma forma que una persona nace y cambia
constantemente pero sus elementos esenciales nunca se transforman.
3 Entry points. Stephen Resnick &
Richard Wolff. Radical economics: a tradition of theoretical diferences,
p.18. En Radical Economics. B. Roberts & Susan Feiner. Kluwer Academic Publishers, 1992.
4 En
el capitalismo, las crisis son inevitables, recurrentes y profundas: 1797,
1807, 1819, 1837, 1857, 1865, 1873, 1918, 1929, 1945, 1970s, (1986-1988-1989),
1995, 1997, 2001, 2008-2015, Covid -19 2019-2021?
5 A
partir de aquí, sigue un texto que sirvió de base para redactar una parte del
Informe nº 9. Reflexionando sobre las alternativas. Seminario de
Economía Crítica Taifa, 2011.
6 Apenas
colean algunas experiencias históricas, como Cuba y Vietnam del Norte; o alguna
declaración de intención, como Venezuela, y poco más.
7 Asociaciones
sin ánimo de lucro: ONGs, organizaciones religiosas, fundaciones, etc. Grupos
(Carta al banquero CAB, Res Pública Global, etc.,) que todavía proponen un
planeta más humano, parar el neoliberalismo, un sistema educativo mejor,
explotación digna, etc., sin modificar el capitalismo, el gran
sistema que domina al resto de sistemas.
8 A
lo más, quedan algunos colectivos residuales sin fuerza en los ámbitos sociales
y sin programas con contenido alternativo al poder de la ofensiva desencadenada
por el capitalismo. Se carece de una capacidad de transformación teórica.
9 Ver
Apéndice A. Terminología. Monopolios generalizados.
10 Nunca
estuve por la construcción de Europa como espacio político y económico, ni del
capital ni del trabajo. Ver José Iglesias Fernández. La iniciativa de
construir una Europa: un sin sentido en todos los sentidos.
En http://old.kaosenlared.net/noticia/iniciativa-construir-europa-sin-sentido-todos-sentidos
11 Salvador López Arnal. Volver a Lenin. Entrevista a Constantino Bértolo. Rebelión, 27 junio del
2012.
12 Hugo
Radice. Las perspectivas para el socialismo: una cuestión del capital y
la clase.
En http://www.herramienta.com.ar/categoria-tematica/socialismo
13 Todos
sabemos cómo Marx “nos recuerda que el capital es una relación social, en cuyo
corazón se afirma la propiedad del capital sobre los medios de subsistencia del
trabajador. Las condiciones de existencia del trabajo como tal son presentadas
como codeterminadas y coextensivas con las del capital”. Hugo Radice, trabajo
citado.
14 Néstor
Kohan y Claudia Korol. El capitalismo como sistema mundial en expansión. En http://elpolvorin.over-blog.es/
15 Roger
Martelli. “Reflexiones sobre la desmundialización”. El Viejo Topo,
nº 300, enero 2013.
16 Xavier Sala i Martín. “Els governs tindran menys sobirania i
poder”. El capitalisme a 5 anys vista. Ara, 29 gener del 2012.
17 “La
historia de todas las sociedades hasta nuestros días es la historia de las
luchas de clases”. K.Marx y F. Engels. El Manifiesto comunista, p.
39. Fundación de Estudios Socialistas Federico Engels, 1997. Sin embargo,
en Cosmópolis, las pantallas de Time Square anuncian la expresión
modificada por Eric DeLillo, autor de la novela que Cronenberg llevará al cine:
“un espectro recorre el mundo. El espectro del capitalismo”.
18 Ya
a finales de los 80, varios economistas (Aglietta, Boyer, Lipietz, Mistral)
avanzaban la idea de un capitalismo planetario expresado en “un sistema global
de acumulación”, o en “áreas estratégicas y regímenes internacionales de
acumulación”, o en un “régimen monetario internacional que se establece
alrededor de una moneda única”, etc. En Taifa, Seminario de Economía Crítica. Crítica
a la economía ortodoxa. Universidad Autónoma de Barcelona, 2004.
19 Poderes
que tienen rostro, pero que la propiedad que ejercen sobre los medios de
comunicación, hace que los periodistas los oculten. Kathy Ryan dice que “los
poderes económicos sin rostro gobiernan nuestras vidas”. La Vanguardia,
31 octubre del 2012.
20 “El
dinero total ficticio era de 707 billones de dólares, mientras que el PIB del
planeta era de 63 billones en junio del 2011”, pp. 117. Antonio Baños
Boncompain. Posteconomía. Hacia un capitalismo feudal. Los libros
del lince, 2012.
21 Ver
Apéndice C. Grado de utilización de la capacidad productiva, 1995-2010.
22 El
FMI acaba de establecer cierto punto de referencia. El economista jefe de la
institución dijo que “cuando el crecimiento que se espera se sitúa en unas tasa
negativas repetidas, los países no han de continuar aplicando ajustes
adicionales”. El periódico de Cataluña, 11 octubre del 2012.
23 Le
debo esta idea a Raúl Zibechi, en una conversación privada.
24 América
del norte (EEUU, Canadá, México), Brasil, China, Europa, India, Japón, Rusia, y
espacios menores, como los ocupados por países productores de petróleo.
25 Ver
apéndice A. Terminología. Capitalismo planetario.
26 China
ya presenta una fuerte experiencia, mientras que en Rusia está más oculta.
27 El
Periódico de Cataluña.
23 abril del 2013.
28 Anthony
Burgess considera que “estas personas se dedican a la política, o ejercen altos
cargos de funcionarios, por la razón negativa de que tienen escaso talento para
cualquier otra cosa, y la razón positiva de que el poder siempre es
apetecible”. “La condición mecánica”. El País, 27 octubre del 2012.
29 Cada
vez es más evidente que la función de estos sistemas (policial, militar y
judicial) es controlar, y reprimir, más que proteger a la ciudadanía.
30 Adrián
Sotelo. A
reestructuración do mundo do traballo, p.86. Confederación Intersindical Galega, 2005.
31 Karl Marx y Friedrich Engels. El manifiesto comunista, p. 41. Fundación Estudios Socialistas F Engels, 1997.
32 Los
parados crónicos son trabajadores que han sido sometidos al desguace.
33 K.Marx
y F. Engels. El Manifiesto comunista, p. 45. Trabajo citado.
34 Como
tantos millones de personas en el Estado español, Blas Monsalve es un obrero de
37 años que ya vive al límite de la desesperación. El País, 3
enero del 2013.
35 La
tasa de riesgo de pobreza aumentó en los tres últimos años. Ver Apéndice. La
pobreza en varias zonas del planeta. Según datos de Eurostat, a finales de
2010 había más de 82 millones de pobres en la Unión Europea.
36 Charles
Darwin. El origen de las especies, p. 441. En http://www.uls.edu.sv/libroslibres/cienciasnaturales/origen_especias.pdf
37 Bioética
web. ONU: intensifica el control de la población mundial. 23
Febrero de 2004.
En http://www.bioeticaweb.com/content/view/325/845/
38 Hans-Peter
Martin y Harald Schumann en The Global Trap. Citado por Antonio
Baños Boncompain. Trabajo citado más abajo.
39 Unesco’s
Commitment to Sustainable Development. From Green Economies to Green
Societies.
En http://www.uncsd2012.org/content/documents/226213311e.pdf
40 Rio+20. Populación, Rights and
Susteinability: Voices from the Global South.
En http://www.uncsd2012.org/index.php?page=view&type=1000&nr=201&menu=126
41 Clara
Valverde Gefaell. De la necropolítica neoliberal a la empatía radical.
Prólogo de Santiago López Petit, Icaria.
42 Federico
Engels. Las condiciones de la clase obrera en Inglaterra. 1845.
En http://www.archivochile.com/Ideas_Autores/engelsf/engelsde00008.pdf
43 Byung-Chul
Han. La sociedad del cansancio, pp. 11-12. Epulibre 2010.