jueves, 16 de enero de 2020

GOBIERNO DE ESPAÑA. ESTAS COSAS NO LAS DEBERIAMOS DAR POR SABIDAS, SENCILLAMENTE PORQUE NO LAS SABEMOS, Y PARA SABERLAS, DISCUTIRLAS Y DECIDIR DEBERÍAN ESTAR LOS CÍRCULOS DE PODEMOS E IZQUIERDA UNIDA, QUE SERÍA LA MEJOR FORMA DE APOYAR AL GOBIERNO, TOMANDO CONCIENCIA DE CUALES SON LOS PROBLEMAS QUE TENEMOS Y NO SOLO DE BOQUILLA (LA BOQUILLA UNICAMENTE FAVORECERÁ AL PP, CIUDADANOS, VOX Y AL RESTO DE LA DERECHA POLÍTICA, Y EN CONSECUENCIA A LA SEÑORA BOTIN DEL SANTANDER)



Trabajo y Seguridad Social: el significado político de separar los ministerios
  • Sánchez deja Trabajo en manos de Yolanda Díaz, abogada laboralista muy cercana a Iglesias, pero se asegura de que la Seguridad Social la controle Escrivá, elegido por el PSOE  
  • La coordinación es el reto más importante de un gobierno plural, sobredimensionado y estructurado en bloques ministeriales
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  • Sara Montero
  • CUARTOPODER.ES
  • martes, 14 de enero de 2020

La nueva ministra de Trabajo, Yolanda Díaz recibe la cartera de manos de la ministra saliente, Magdalena Valerio junto con el nuevo ministro de Seguridad Social, Inclusión y Migraciones, José Luis Escrivá Belmonte, la Vicepresidenta de Asuntos Económicos y Transformación digital, Nadia Calviño, la ministra de Educación y Formación Profesional, Isabel Celaá y la ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto durante la toma de posesión de su cargo. EFEFernando Alvarado  

Un Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, capitaneado por José Luis Escrivá, otro de Trabajo y Economía Social, encabezado por Yolanda Díaz. El ya antiguo Ministerio de Trabajo, Migraciones y Seguridad Social, que dirigía la socialista Magdalena Valerio, se ha partido en dos entes que, por separado, intentarán coser algunos de los rotos que dejó la gestión de la crisis económica desde dos áreas mastodónticas. ¿Pero qué significado político tiene esta nueva organización?, ¿cómo se coordinarán dos perfiles tan distintos? Por el momento, la primera medida del primer Consejo de Ministros, que se celebrará este martes, saldrá del departamento de Escrivá: una subida de las pensiones del 0,9%.

¿Por qué se divide en dos ministerios?

"Históricamente son dos áreas que han estado interrelacionadas. Las políticas laborales y las de la Seguridad Social se encuentran muy entrelazadas. Si decides mover el Salario Mínimo Interprofesional (SMI), afecta a las bases de cotización. Ahora bien, por el hecho de sacarlas de un ministerio no creo que se pueda hablar de consecuencias negativas", explica José María Goerlich, catedrático del Derecho del Trabajo y de la Seguridad Social de la Universidad de Valencia, preguntado por este periódico sobre el sentido de separar las dos áreas. En la toma de posesión de ambos ministros estaba presente, vigilante, la vicepresidenta económica, Nadia Calviño

La primera explicación de la división es obvia. El presidente del Gobierno, el socialista Pedro Sánchez, ha configurado un ejecutivo amplio, con 22 ministros, para dar cabida a su nuevo socio, Unidas Podemos. De hecho, el Ministerio de Trabajo fue uno de los escollos de la fracasada negociación de verano entre las dos fuerzas. Con una repetición electoral mediante y acuerdo posterior, el ministerio ha acabado recayendo en Yolanda Díaz, miembro de Unidas Podemos y muy cercana a Pablo Iglesias.

Eso sí, con la duplicación de ministerios, el gobierno se ha asegurado de que la Seguridad Social se queda en manos de un técnico elegido por el PSOE: "La Seguridad Social tiene un presupuesto muy potente. Hay que gobernarla técnicamente, con arreglo a parámetros de solvencia", explica Goerlich sobre el encaje del perfil elegido por Sánchez para este ministerio. Para configurar su Consejo de Ministros, ha querido mandar un mensaje de alta solvencia económica que de credibilidad ante las previsiones de una nueva desaceleración económica.

Perfiles diferentes y compensados con la coordinación como clave

Por tanto, habrá una abogada laboralista, militante de Esquerda Unida, para derogar la reforma laboral del PP y un economista para manejar las cuentas de la Seguridad Social. Dos perfiles diferentes y compensados que tendrán que trabajar juntos. La cohesión y la coherencia serán un reto añadido al gobierno de coalición y una exigencia de los sindicatos. "Una vez que la decisión se ha tomado, se trata de que haya una coordinación entre los dos ministerios que abordan materias que están íntimamente relacionadas", explicaba hace unos días Unai Sordo, secretario general de CCOO. Sin embargo, en esas mismas declaraciones optaba por la prudencia: "La valoración hay que hacerla sobre las políticas que desarrolle y no sobre las personas que lo compongan".

Por el momento, en su discurso del este lunes, Yolanda Díaz reivindicó su herencia sindicalista y se marcó como objetivo de su ministerio combatir "una precariedad que lo invade todo", teniendo como pilar central de legislatura la redacción de un nuevo Estatuto de los Trabajadores, cuya conclusión permitirá ver cómo se concreta la promesa de derogación de la reforma laboral. Apostó decididamente por el diálogo social y tuvo un recuerdo para la siniestralidad laboral: : "No más muertes en el trabajo por favor".
La otra pata de su ministerio será la Economía Social, que se eleva al título de la institución para "buscar formas más justas de convivencia" también en la empresa.

La asimétrica pareja de baile de Díaz será José Luis Escrivá Belmonte, un perfil independiente que proviene de la presidencia de la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (Airef). Su discurso ha estado plagado de advertencias y equilibrios. Esperanza con mesura. El nuevo ministro ha prometido "crecimiento inclusivo", sí, pero acompañado de "métricas y metas tangibles". Cerrará el déficit de la Seguridad Social "de forma rápida", pero también "efectiva". El mensaje que este fichaje pretende trasladar a la opinión pública ante el nuevo gobierno de coalición se deduce de una de las palabras preferidas del nuevo ministro: "Certidumbre".

El nombre importa: ¿Qué es la "inclusión"?

Las denominaciones de los ministerios suelen dar algunas pistas sobre las intenciones de los gobiernos que los nombran. Como ejemplo, cuando Pedro Sánchez llegó a Moncloa tuvo que reconvertir el Ministerio de Empleo en Trabajo de nuevo. "Hay una connotación ideologógico-lingüistica", advierte José María Goerlich.

En cualquier caso, en el nombre de este nuevo ministerio se introduce la palabra "Inclusión", que  Escrivá ha situado como uno de los grandes retos de la legislatura. "Las recientes crisis económicas han generado profundos efectos en la sociedad española, algunos de los cuales se han ido corrigiendo, pero otros no", se justificaba el ministro. Algo tan transversal como la lucha por la igualdad, se concreta en el desarrollo del "futuro ingreso vital mínimo", como herramienta para ese "crecimiento inclusivo".

Si hay un colectivo que será exigente con este ministro, ese será el de los pensionistas, que han protagonizado algunas de las manifestaciones más importantes (e insistentes) de los últimos años al grito de "gobierne quien gobierne, las pensiones se defienden". "Son uno de los grandes retos no de esta legislatura, sino de la anterior. Viendo el documento firmado, hay algunas cosas claras, como el coeficiente o el factor de sostenibilidad, pero veremos a dónde conduce una reforma que garantice la sostenibilidad", confirma el catedrático de la Universidad de Valencia sobre la complejidad del reto que le espera al ministro. Escrivá remite la reforma al Pacto de Toledo, que exige acuerdo entre las fuerzas políticas y que descarriló la legislatura pasada.

Por último, el ministro en su comparecencia se ha referido a la inmigración, que será caballo de batalla durante la legislatura, con la ultraderecha tratando de introducirlo en el debate político. Tras reconocer  como un "hecho incontrovertido" que en las próximas décadas, "España va a ver cómo se reduce de manera importantísima su población de origen español a la hora de trabajar", ha prometido una estrategia a "largo plazo" y una política migratoria "consistente" para asegurar "que los flujos migratorios que lleguen sean los que España necesitará en el futuro". También ha prometido trabajar para garantizar "la inclusión social y económica de inmigrantes y solicitantes de asilo que lleguen a este país en situaciones de alta vulnerabilidad".

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PENSIONES. SOLAMENTE MOJÁNDOSE EL CULO SE TIENEN PECES Y PENSIONES, O SEA, FRANCIA





¿La cuestión del robo de las pensiones en el Pacto de Toledo no sería conveniente  frenarlo en seco y estudiarlo, discutirlo y difundirlo a través de los CIRCULOS de Podemos e Izquierda Unida, en primer lugar para que los trabajadores sepamos cómo nos toman el pelo y nos roban lo que es nuestro, y para empezar a formar las mayorías sociales organizadas que  ya estamos necesitando como el comer, y para dejar de actuar a toque de cornetín del jefe que no sirve más que para legitimar y consagrar la situación injusta y galopante que estamos sufriendo los trabajadores y lo que te rondaré morena como no nos sacudamos la modorra que tenemos?

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Los fondos buitre quieren apoderarse del dinero destinado al pago de las pensiones


MOVIMIENTOPOLÍTICO DE RESISTENCIA
 28.12.2019

Los fondos buitre, como Blackrock, están al acecho para apoderarse del dinero destinado al pago de las pensiones. Primero lo harán en Francia y luego en España, ocultos tras la cortina de humo de la “mochila austriaca”.

Fondos como Blackrock ya controlan una parte de los negocios parasitarios de la economía española, como las inmobiliarias, al que accedieron aprovechando el hundimiento económico de hace 11 años.

Cuando en junio se divulgó en Francia el informe de Jean Paul Delevoye sobre las pensiones, Blackrock redactó un documento de 15 páginas con los beneficios que espera obtener de una reforma que pone el énfasis en la capitalización, es decir, en la privatización del sistema público de pensiones.

No obstante, es engañoso creer que tanto en Francia como en España se va a producir un vuelco total en el régimen de pensiones porque hace tiempo que los bancos ofrecen sistemas de capitalización a los futuros jubilados. No hay más que darse un paseo por la sucursal bancaria más cercana. Los llaman “complementos” de las pensiones y casi nadie se ha preguntado por qué un pensionista necesitará que le “complementen” el dinero que va a cobrar cuando se jubile.

No sólo los fondos buitre sino también los bancos y las aseguradoras están detrás de un mordisco que puede ayudar a sanear el sistema financiero, es decir, que puede suponer dinero fresco: un segundo rescate encubierto.

“Los franceses se distinguen en todo el mundo por una elevada tasa de ahorro, un 14 por ciento de su renta disponible cada año”, señala BlackRock. En 2016 eran más de 13.125 millones de euros. En Europa, sólo los alemanes ahorran más.

Ahora bien, con los tiempos que corren, entregar la hucha de las pensiones a un fondo buitre es como ir al casino con los ahorros un fin de semana. Quizá muchos trabajadores no lo sepan, pero los partidos políticos lo saben y los sindicatos también. El futuro de los jubilados no se puede poner en manos de las bolsas de valores, del Ibex 35, de las cotizaciones, de las divisas o de las acciones.

El sistema financiero y las aseguradoras sólo hablan de fuentes de rentabilidad a sus clientes. Pocas veces mencionan los riesgos o recuerdan el desplome de Lehmann Brothers en 2007.

Naturalmente, la gran vergüenza de la privatización no son los fondos buitre, que no hacen más que lo que cabía esperar de ellos. La cuestión es que los gobiernos franceses la están impulsando con desgravaciones fiscales, es decir, están actuando de “gancho” para captar nuevos clientes para los buitres de las finanzas.

La falta de escrúpulos ha llegado a tal punto que en Francia crearon un “Alto Comisionado para las Pensiones” cuyos vínculos con las empresas aseguradoras acaban de aparecer públicamente hace poco. ¿No les sorprende?

Lo más importante y lo que nadie debería olvidar: en Francia el sistema de pensiones lo creó el Partido Comunista en 1945 cuando tras la Segunda Guerra Mundial llegó al gobierno. En un país capitalista las pensiones no dependen de ninguna constitución ni de ninguna ley sino del movimiento obrero organizado y en pie de guerra. El trabajador que quiera cobrar una pensión deberá luchar por ella hasta el fin de sus días y deberá empezar a hacerlo ahora mismo.
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