miércoles, 13 de julio de 2022
Voces solidarias por la paz y la soberanía de Cuba
Voces solidarias por la paz y
la soberanía de Cuba
Diario
octubre / julio 12, 2022
Con banderas cubanas, carteles, consignas, marchas, música y bailes los amigos de Cuba en todo el mundo festejaron el primer aniversario de la victoria sobre el intento de golpe suave en la Isla y repudiaron los anhelos de asfixiar a la mayor de las Antillas.
Roxana Núñez Wilson.— El Primer Secretario del Comité Central del Partido Comunista de Cuba (CCPCC) y presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez agradeció este lunes a todos los amigos que demostraron su apoyo en defensa de la Revolución Cubana.
En
su cuenta oficial en Twitter, el mandatario apuntó que el 11 de julio fue una
fecha celebrada por Cuba y sus amigos, como una victoria contundente del pueblo
cubano sobre el golpe blando que pretendía derrocar al gobierno.
Con
banderas cubanas, carteles, consignas, marchas, música y bailes los amigos de
Cuba en muchas partes del mundo festejaron el primer aniversario de la victoria
sobre el intento de golpe suave y repudiaron los anhelos de asfixiar a la mayor
de las Antillas.
Por
su parte, el miembro del Buro Político y Secretario de Organización del CCPCC,
informó en la propia red social, que se realizaron más de 200 acciones en un
centenar de países y ratificó que “somos un pueblo de paz y amor, con todos y
para el bien de todos”.
En tanto, el también miembro
del Buro Político y canciller cubano, Bruno Rodríguez Parrilla,
resaltó las renovadas muestras de amistad que recibió nuestro archipiélago
el fin de semana.
“Amigos y connacionales
alrededor del mundo reclamaron el cese del bloqueo criminal y reafirmaron su
respaldo a nuestra lucha por la soberanía frente a planes desestabilizadores
del gobierno EEUU”, expresó el Canciller.
En ese sentido, la Asociación
de Amistad Vietnam-Cuba expresó que la Revolución Cubana era un ejemplo a
seguir “por los pueblos que luchan por otro mundo mejor, por la paz, la
independencia, la soberanía nacional, la democracia y el progreso”.
“Estamos decididamente con el
pueblo cubano y su Gobierno y llamamos a expresar con fuerza y determinación la
solidaridad”, subrayó la asociación Cuba Sí France.
Agregó la propia
organización que las acciones desestabilizadoras conformadas desde Estados
Unidos contra la isla encontrarán otra derrota infligida por el pueblo
movilizado junto a su Revolución.
El eurodiputado Manu Pineda,
por su parte, afirmó que “julio es el mes de la Revolución, en el que hace un
año atrás el pueblo salió a defender su Revolución frente a un intento de
derrocarla”.
La Jefa del Comité Ruso por el
fin del bloqueo a Cuba y conductora del canal ruso en Youtube Europa
para Cuba, expresó que todos los revolucionarios cubanos están en las
calles para no permitir que se transgreda su paz y estabilidad, “y nosotros
desde aquí estamos lejos, pero firmes, apoyándolos”.
A su vez, la presidenta de la
Unión de Organizaciones de Amistad de Vietnam (VUFO), Nguyen Phuong Nga,
manifestó su convicción de que bajo la sabia dirección del Partido Comunista
(PCC), la Mayor de las Antillas superará todas las dificultades y retos.
Entre las disímiles voces
amigas que se expresaron estuvieron la Asociación de Amistad Italia-Cuba
(Anaic) y la organización italiana Potere al Popolo, representantes de las
Casas de Amistad con Cuba en España, partidos de la izquierda federalista,
soberanista e independentista catalana, la Asociación de Cubanos Residentes en
Catalunya «José Martí», el Partido Comunista de Colombia, la Asociación de
Cubanos Residentes en Ecuador, la Coordinadora de Solidaridad con Cuba en
Panamá.
Acciones de calle y actos
políticos frente a los Consulados y Embajadas cubanas en el exterior se
realizaron en todos los continentes. Se emitieron comunicados oficiales y
mensajes en texto y videos, cientos de miles de imágenes se compartieron en
redes sociales, muchas de las cuales llegaron desde Argentina, Bolivia,
Ecuador, Suiza, Guatemala, Dominica, Estados Unidos, Alemania, Nicaragua,
Brasil, Colombia, Canadá y Australia, entre otros.
Han sido jornadas que demostraron
una vez más que Cuba no está sola en su lucha por la paz, la soberanía y el
amor, y que no hay odio posible que se imponga cuando los pueblos se unen en
defensa de la verdad y la justicia.
FUENTE: pcc.cu
Militares del Servicio Aéreo Especial británico mataron a decenas de personas desarmadas en sus operaciones en Afganistán, según la BBC
Militares del Servicio Aéreo
Especial británico mataron a decenas de personas desarmadas en sus operaciones
en Afganistán, según la BBC
DIARIO
OCTUBRE / julio 13, 2022
Según una nueva investigación de la BBC, los altos cargos del cuerpo militar estaban al corriente de los presuntos asesinatos, pero no entregaron las pruebas para iniciar una investigación, aunque estaban obligados a hacerlo.
Una unidad del Servicio Aéreo Especial británico (SAS, por sus siglas en inglés) mató a decenas de civiles en circunstancias sospechosas durante su operación militar de 6 meses en Afganistán hace más de una década, según reveló este martes una nueva investigación emitida en el programa ‘Panorama’ de la BBC.
De
acuerdo con documentos y fuentes anónimas citadas por el canal, un escuadrón del SAS podría haber matado
a 54 personas desarmadas en la provincia de Helmand, en 2010 y 2011, en el marco de las misiones denominadas “mata o captura”, cuya función principal era detener a comandantes
talibanes. La BBC también informa que los militares colocaban fusiles AK-47 en
el lugar de los hechos para justificar el asesinato de hombres desarmados.
Sin
embargo, varias fuentes implicadas en la selección de objetivos para las
operaciones revelaron que el Reino Unido tenía graves problemas con el servicio
de inteligencia, por lo que los civiles podrían haber estado en la lista de
objetivos. La BBC asegura que el número total de víctimas de los militares
británicos podría ser de tres dígitos, y que oficiales de alto nivel del
servicio estaban al corriente de los presuntos crímenes, aunque nunca
entregaron las pruebas para iniciar una investigación, a pesar de estar
obligados a hacerlo.
Tras
un análisis de los informes militares sobre las redadas nocturnas del SAS, se
descubrió “un patrón de informes sorprendentemente similares de hombres afganos
muertos a tiros al sacar rifles AK-47 o granadas de mano de detrás de las
cortinas y de muebles después de haber sido detenidos”. Sin embargo, en todas
las redadas analizadas no hubo informes sobre heridos entre los militares
británicos, además de haber más personas muertas que armas supuestamente
encontradas, lo que sugiere que los militares del SAS dispararon a personas
desarmadas y posiblemente falsificaron pruebas.
El
equipo de la BBC visitó varias casas asaltadas por el escuadrón del SAS. En una
de ellas murieron 9 afganos, entre los que había un adolescente. Según la
información oficial, los militares llegaron y se acercaron a la casa cuando los
afganos abrieron fuego contra ellos, por lo que se vieron obligados a
matarlos. Sin embargo, no solo el número de armas era menor que el de
muertos, sino que varios expertos en balística, a los que la BBC mostró
fotografías del lugar, dijeron que no había evidencias de un tiroteo.
Reacción
del Ministerio de Defensa
Por
su parte, el Ministerio de Defensa británico rechazó firmemente las evidencias
proporcionadas por la BBC y aseguró que la cadena había sacado
“conclusiones injustificadas de acusaciones que ya han sido investigadas a
fondo”. “Hemos proporcionado una declaración detallada y completa a ‘Panorama’,
destacando inequívocamente que 2 operaciones de la Policía de Servicio
realizaron una investigación extensa e independiente sobre las acusaciones
acerca de la conducta de las fuerzas del Reino Unido en Afganistán”, indica el
comunicado, que también subraya que ninguna de estas investigaciones “encontró
pruebas suficientes para procesar” este caso.
“Afirmar
lo contrario es irresponsable, incorrecto y pone en riesgo a nuestro valiente
personal de las Fuerzas Armadas en el campo de batalla y su reputación”, se
detalla en el comunicado, añadiendo que el ministerio estaba “dispuesto a
considerar cualquier nueva evidencia”, pero que actualmente “se opone
firmemente a esta información subjetiva”.
FUENTE: actualidad.rt.com
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La inflación es el impuesto de la guerra, y el Pacto de Rentas garantiza que lo pagará la clase obrera
La inflación es
el impuesto de la guerra, y el Pacto de Rentas garantiza que lo pagará la clase
obrera
Por José Luis Carretero Miramar
KAOSENLARED
13 de julio de 2022
La ministra Nadia Calviño, íntimamente
relacionada con la burocracia europea, quiere un Pacto de Rentas. Pablo
Hernández de Cos, el gobernador del Banco de España ya adelantaba en enero que
era necesario un acuerdo entre los llamados “agentes sociales” para establecer
un gran pacto que limite los salarios. Antonio Garamendi, responsable de la CEOE,
por supuesto, también quiere un Pacto de Rentas, aunque, eso sí, pretende no
dar nada a cambio de la limitación de las retribuciones de los trabajadores.
Incluso García Ferreras, el insigne periodista amiguísimo de Eduardo Inda que
se dejó asesorar tan blandamente por Villarejo, quiere un Pacto de Rentas.
Todos están de acuerdo.
Todos coinciden, como ocurrió con la
visita de la OTAN a Madrid, como acontece con la entrada en guerra de nuestro
país, como sucede con el silenciamiento y represión de los movimientos sociales
y sindicales que se resisten al expolio neoliberal, como pasa con el nuevo
monarca, que nada tiene que ver con los tejemanejes del anterior y, que, se
supone, ha debido llegar a su puesto “por sus propios méritos”.
Todos dicen lo mismo, así que deberíamos
preocuparnos.
Un Pacto de Rentas es un acuerdo entre
empresarios y sindicatos para limitar los salarios y los beneficios. Una
herramienta para actuar frente a una inflación desbocada que, se supone, se
acelera cuando los trabajadores pretenden adecuar sus salarios a las alzas de
precios, provocando una “segunda ronda” de subida de estos últimos. Es decir,
lo que dicen que les preocupa es que, si los precios han subido un 10 %, los
trabajadores pretendan subir sus salarios ese mismo 10 % , para mantener su
poder adquisitivo, y eso “obligue” a los empresarios a seguir con las subidas
de precios.
El contenido del acuerdo, por tanto,
consistiría en que los trabajadores admitamos que nuestros sueldos no suban,
aunque lo haga la inflación, y, así, aceptemos perder poder adquisitivo. A
cambio, no se sabe muy bien que nos van a dar los empresarios, ya que nadie ha
hablado en ningún momento de controles de precios ni de los márgenes de
beneficio. Quizás, y eso se determinará en la oportuna negociación, la CEOE
acepte que el Estado implemente algún pequeño subsidio para quienes salgan peor
parados (y, por lo tanto, que ese subsidio lo paguen los propios trabajadores
mediante los descuentos del IRPF de sus nóminas) o que se establezca alguna
limitación menor para repartir dividendos o algún nuevo impuesto a los sectores
que están obteniendo beneficios de escándalo gracias, precisamente, a la alta
inflación. Quizás. Está por ver.
La alta inflación, por su parte, es el
resultado previsible de la dinámica militarista emprendida por el capitalismo
occidental, a la que nuestro gobierno se ha prestado con entusiasmo y
abnegación. Entrar en una guerra indirecta con quien tiene la llave de nuestro
consumo energético es una actitud que crea las bases para un alza sostenida de
los precios. Si a esto le sumamos el colapso aún irresuelto de las cadenas de
suministro globales tras la pandemia, y la absoluta voracidad de los grandes
capitales, que no quieren renunciar a los brutales márgenes de beneficio que ha
representado el alza de precios para las petroleras, y que representan las
consiguientes subidas de tipos de interés para las financieras, tenemos una
tormenta perfecta.
La inflación es el impuesto de la
guerra. Y nadie prevé detener dicha guerra. Los bancos centrales de los países
occidentales, en todo caso, pretenden retomar la senda de la austeridad, como
lo hará el Banco Central Europeo asociando “condicionalidades” al futuro
“mecanismo anti-fragmentación” de la deuda de los países miembros de la UE.
“Condicionalidades” es el nombre eufemístico para los recortes neoliberales que
pretenden garantizar que los flujos financieros internacionales no atacarán a
la deuda de los países periféricos, porque les vamos a garantizar que van a
hacer siempre un buen negocio, degradando los servicios públicos y los mercados
laborales para que no encuentren “rigideces” en su proceso de extracción del
plusvalor.
El objetivo del Pacto de Rentas es
imposibilitar un proceso de rearme y de movilización de la clase trabajadora,
entorno a la defensa del salario y, por tanto, de la porción que obtiene el
trabajo de la riqueza nacional. La alta inflación ha espoleado las luchas
obreras en algunos sectores, como el metal o la limpieza. Pone en cuestión la
abulia generalizada entre los trabajadores del sector público e incita a los
pensionistas a pelear por la integridad de sus pensiones. Asoma a la clase
media y a los sectores más acomodados de la clase trabajadora a la posibilidad
de la dilución de sus ahorros. Empieza a poner nerviosa a una población que ha
sufrido mucho en las últimas dos décadas.
La salida que Calviño, Hernández de Cos
y Ferreras buscan a este escenario de inestabilidad es bastante evidente: la
clase trabajadora se ata las manos y los empresarios siguen haciendo lo que les
da la gana. La guerra de Ucrania no se detiene. El gas deja de llegar o llega
mucho más caro. Las energéticas siguen teniendo beneficios récord, aunque
repartan una pequeña fracción, que el Estado dedica a inundar en burocracia a
la población más excluida, a cambio de subsidios exiguos. Cumplimos las
“condicionalidades” de la Comisión Europea con una nueva reforma regresivade
las pensiones. Los sindicatos, absolutamente desprestigiados, se dedican a
predicar las bondades de la concertación, la paz entre las clases y la ternura
de un gobierno que, al menos, no es de ultraderecha y no nos obliga a ir a
misa.
Frente al Pacto de Rentas, sin embargo,
tenemos a una izquierda transformadora desnortada, confusa y fragmentada. La
indecisión a la hora de enfrentarse al gobierno deja el campo abierto para la
irrupción de una contestación desde la ultraderecha. La cooptación de
militantes de los movimientos por la política institucional instaura una
evidente crisis moral y un tono general depresivo que no termina de cerrarse en
las organizaciones de base. Los espacios de autoorganización social se han
estrechado hasta la inanición en los años de gobierno “progresista”. La clase
trabajadora mira perpleja al sindicalismo de pacto y a los estudiantes eternos
que repiten una y otra vez que las clases ya no existen, hasta que obtienen un
oscuro puesto de asesor del asesor del concejal de jardinería y de festejos,
donde cumplen ordenadamente todas las normas que ha aprobado el bipartidismo en
cincuenta años de democracia.
Podría ser así. En cierta manera, es
así. Pero…
Si uno mira más de cerca ve que las
huelgas se multiplican. Desde el metal de Cádiz a los tripulantes de cabina de
Ryanair. El sindicalismo combativo, fragmentado pero despierto, empieza a
buscar ámbitos de confluencia, a mirarse a la cara. La plaza de Callao se llena
de gentes que muestran su rechazo a la matanza de la valla de Melilla. El
verano calcina las calles, pero los militantes tratan de encontrarse bajo la
calima. Debatimos y existimos. Algo podría despertar.
La gran guerra ha comenzado y debemos
pararla antes de que lleve al mundo a la destrucción. La “clase media
occidental” y las libertades democráticas difícilmente sobrevivirán a una gran
conflagración, que puede durar décadas, con la periferia emergente del sistema
global. La inflación es el primer impuesto de la guerra. Los propagandistas del
Pacto de Rentas quieren que los trabajadores se aten las manos ante la
inestabilidad que se avecina, que acepten pagar la fiesta de las energéticas y
los bancos. Y de las empresas de armamento.
No es nuestra compasión lo que salvará a quienes se hayan en peligro, en este convulso inicio del siglo XXI, sino nuestra valentía y nuestra acción colectiva.
Por José Luis
Carretero Miramar para Kaosenlared
Frases y pensamientos
El 13 de
julio de 1954 moría en Coyoacán una mujer irremplazable, irrepetible: Frida
Kahlo. Cuerpo abierto por las heridas, alma quebrantada por el dolor, pintora
de su propia vida. La recordamos hoy mediante algunas de sus frases y
pensamientos.
Frases y pensamientos
El Viejo Topo
13
julio, 2022
«Enamórate de
ti, de la vida. Y luego de quien tú quieras».
«Todo puede
tener belleza, incluso lo más horrible».
«Sigo mal y
seguiré peor, pero voy aprendiendo a estar sola y eso ya es una ventaja y un
pequeño triunfo».
«Cada tic-tac
es un segundo de la vida que pasa, huye y no se repite. Y hay en ella tanta
intensidad, tanto interés, que el problema es solo saberla vivir. Que cada uno
lo resuelva como pueda».
«¡Quién diría
que las manchas viven y ayudan a vivir? Tinta, sangre, olor… ¿Qué haría yo sin
lo absurdo y lo fugaz?».
«Amurallar el
propio sufrimiento es arriesgarte a que te devore desde el interior».
«Yo le duro lo
que usted me cuide, yo le hablo como usted me trate y le creo lo que usted me
demuestre».
“¿Se pueden
inventar verbos? Quiero decirte uno: yo te cielo, así mis alas se extienden
enormes para amarte sin medida… somos de las misma materia, de las mismas
ondas…”
«Y tú bien
sabes que el atractivo sexual en las mujeres se acaba voladamente, y después no
les queda más lo que tengan en su cabezota para poderse defender en esta
cochina vida del carajo».
«Yo solía
pensar que era la persona más extraña en el mundo, pero luego pensé, hay mucha
gente así en el mundo, tiene que haber alguien como yo, que se sienta bizarra y
dañada de la misma forma en que yo me siento. Me la imagino, e imagino que ella
también debe estar por ahí pensando en mí. Bueno, yo espero que si tú estás por
ahí y lees esto sepas que, sí, es verdad, yo estoy aquí, soy tan extraña como
tú».
«Donde no
puedas amar, no te demores».
«Pies para qué
los quiero, si tengo alas para volar”.