domingo, 26 de febrero de 2023
Modelo 77: La Transición invisible
De vez
en cuando –y cada vez más frecuentemente– el cine español resucita y nos ofrece
obras excelentes. Este año, como acreditan los premios Goya, la cosecha ha sido
excelente. Modelo 77; As bestas y Alcarràs se han llevado merecidos laureles.
Modelo 77: La Transición invisible
El Viejo Topo
26 febrero, 2023
Hay un tiempo que se ve a simple vista y otro que, por mucho que lo busques, se demuestra invisible. Es como si le hubieran pasado por encima las técnicas de la ocultación. Hay personajes que desaparecen de una fotografía como por arte de birlibirloque. Ahora estás y al cabo de unos segundos te has convertido en un fantasma. En España, el tiempo de la Transición política a la democracia es uno de esos fantasmas. De tanto pasarlo por tratamientos reparadores ya no sabemos si fue un tiempo hermoso como algunos juran hasta quedarse afónicos o algo a lo que se le ha quedado la pobre cara del Ecce Homo de Borja. Han pasado más de cuarenta años desde que empezó el calendario reformista tras la muerte del dictador. Se pactó entonces la reforma política en vez de abrirle la puerta a la ruptura. Esa imagen había que hacerla duradera: a la violencia del franquismo se le oponía la tranquila pacificación de los nuevos tiempos. La fotografía ya no se sostiene después de tantos años, pero se sigue negando que bajo la capa de aparente tranquilidad hubo otra que clama hasta las tripas una realidad distinta. Miles de actos violentos y centenares de muertes en las calles y las cárceles devuelven a la fotografía de aquellos años lo que había sido borrado con las nuevas técnicas de la suplantación.
La Transición
política a la democracia no fue un remanso donde zambullirse plácidamente una
tarde de verano. Demasiadas pérdidas, un reguero incalculable de ausencias y
cuerpos magullados, un calendario en el que íbamos dibujando las crucecitas de
los sueños y otras las de las veces en que esos sueños se habían convertido en
pesadillas. Se hizo lo que se pudo hacer y la prueba de que la
involución estaba al acecho es que en febrero de 1981 hubo un golpe de
Estado. Eso se dice desde el lado que defiende una Transición sin fisuras. Lo
que añado es que ese tiempo también fue el tiempo de las cosas que se
quedaron sin hacer y más de cuarenta años después es como si aún
tuviéramos miedo a que se hagan. Por eso seguimos en un tiempo lleno de
sombras, porque el olvido provoca esas zonas oscuras donde habría de brillar la
luz del conocimiento. El photoshop, con su goma de borrar incorporada, no es un
buen aliado de la historia.
Hace poco que
se ha celebrado la gala de los premios Goya organizada por la Academia de Cine.
Nunca la veo. Es demasiado larga. Sólo vi la del No a la guerra.
Cuando leo los resultados de las votaciones hay veces en que estoy de acuerdo
con esos resultados y otras en que me echo las manos a la cabeza en señal de
protesta solitaria y desconsuelo. Ahora está de moda lo rural. En el
cine, en la literatura, en los planes de una política que habla de la
despoblación sin saber de lo que habla. No sé si yo sé de lo que hablo, pero sé
que vivo en Gestalgar, el pueblo donde nací, un pequeño pueblo de la montaña
valenciana sometido a la espera de ese porvenir que, como escribía Ángel
González, se llama porvenir porque no viene nunca. Entre las películas que sonaban
este año para los Goya, una se lo ha llevado todo: As bestas. Otra
se ha quedado sin nada, aunque sonaba fuerte en todas las previsiones: Alcarràs.
Las dos hablan del mundo rural. Había una tercera que se ha llevado algunos
premios, no los más importantes en el ranking de la alfombra roja pero sí para
la propia película y las personas que han visto reconocido justamente su
trabajo. Hablo de Modelo 77, la inmensa película de Alberto
Rodríguez, con un guión suyo y de Rafael Cobos, compañero habitual en la siempre
magnífica escritura de sus historias.
Digo que vivo
en un pueblo pequeño, rural de pura cepa, como los que salen en las películas
de Rodrigo Sorogoyen y Carla Simón. Y sin embargo también digo que el tiempo
que es más mío es el de la película de Alberto Rodríguez. El tiempo
invisible y violento de la Transición, el que a tanta gente no le apetece
recordar, el que siempre se queda como el fantasma al que nadie invitaría a
cenar porque siempre acaba derramando el vino en la mantelería de la bisabuela elegida
para la celebración. ¿Quién se acuerda de las luchas en las cárceles cuando
mediados los años setenta del pasado siglo? ¿A cuánta gente las siglas COPEL le
sonarán al letrero de una gasolinera? ¿Alguien recuerda el nombre de un joven
anarquista llamado Agustín Rueda al que la policía torturó hasta la muerte
después de detenerlo en uno de los enfrentamientos dentro de la cárcel de
Carabanchel en 1978? La Ley de Amnistía de 1977 sacó a la calle a los
presos políticos del franquismo y salvó de la quema de la justicia a
sus verdugos. Justicia de guante blanco para los torturadores: hasta ahora
mismo. Esa ley, que se demostraría en su condición olvidadiza como una ley de
punto final para los crímenes de la dictadura, dejaría en su encierro los
delitos llamados sociales y comunes. Como si la miseria y la desigualdad de
oportunidades no fueran asuntos políticos. Como si las emociones que
despierta Modelo 77 no fueran políticas, como todas las
emociones, incluso las que fingen con torpeza no serlo o ser todo lo contrario.
De eso, precisamente de eso, va la película de Alberto Rodríguez y Rafael
Cobos. La cárcel Modelo de Barcelona es el espacio donde transcurre una
historia de rebeldía y dignidad que tuvo su momento de gloria en los años 76 y
77 y fue decayendo luego hasta caer, como tantas otras historias, en
el olvido más absoluto. Son esos dos sustantivos tan poco habituales los que
dan título al documental COPEL: una historia de rebeldía y dignidad dirigida
por el Colectivo COPEL en el que participaron algunos de los reclusos
protagonistas de las luchas carcelarias en aquellos años.
Las prisiones
en lucha tuvieron su imagen más conocida con los presos subidos a los tejados
de las cárceles. Lo nunca visto. Y es lo que vemos en Modelo
77: la democracia que no se atreve a salirse de los límites de una justicia
injusta. Los robagallinas, asesinos y homosexuales no admiten ninguna
redención. La película, la enorme película que es Modelo 77, no les
pregunta a los encerrados por qué sufren la privación de libertad. Saben
quienes la han escrito que la dictadura destrozaba las vidas dentro y fuera de
las cárceles, que ninguna redención esperaba a quienes se pudrían en sus celdas
por una ristra incalculable de años sumidos en la mierda, que vivir era un
oficio imposible en las galerías del horror. Y también, de añadido, la
imposibilidad de contarlo para que la historia de ese horror saliera de
los muros carcelarios. Por eso la importancia de la COPEL en esos años: el
relato de lo invisible. “Si los discursos como los de los detenidos o los de
los médicos de las prisiones son luchas, es porque confiscan un instante al
menos el poder de hablar de las prisiones, actualmente ocupado exclusivamente
por la administración y por sus compadres reformadores. El discurso de lucha no
se opone al inconsciente: se opone al secreto”: lo dice Michel Foucault en una
entrevista con Gilles Deleuze en 1972. No sé si eso ha cambiado mucho en las
cárceles de una democracia dicen que consolidada, como si hubiera algo en la
vida y en los sitios que no admitiera alguna revisión.
Tal vez entre
todos los olvidos de la Transición sea el que cuenta Modelo 77 el
menos considerado a la hora de hacer un recuento profundo de aquel tiempo. Por
eso, tal vez, sea lo que cuenta la película de poco agrado para los
señores y las señoras de la Academia de Cine. El miedo no se acaba nunca,
es como una hidra a la que tampoco el cine consigue dejarla sin cabezas. Y
hablo de ahora mismo, no de los años que fueron los de la rebeldía carcelaria
de la COPEL, cuando este país parecía que iba a salir sin aspavientos
de una tiranía ensangrentada hasta las cachas. Termino con lo que Manuel,
el preso principal protagonista de esta película, dice a su abogado: “Nada va a
cambiar. Este país es para los hijos de los dueños”. En teoría eso lo dice a
finales de los años setenta del pasado siglo. ¿No es como si esas palabras
fueran de hace sólo un rato? Igual estoy equivocado, pero a mí me parece que
sí. En todo caso, no dejen de ver Modelo 77. Aunque sólo sea para
añadir a esta opinión mía asentimiento o discrepancia, no dejen de ver esta
película, ¿vale? No dejen de verla.
Fuente: InfoLibre.
Cultivan electrodos en el cerebro de peces cebra vivos
Cultivan
electrodos en el cerebro de peces cebra vivos
TERCERAINFORMACION /
25.02.2023
Investigadores suecos han logrado fabricar bioelectrónica directamente en el cerebro, el corazón y en las aletas de peces cebra, así como en el sistema nervioso de sanguijuelas. Los autores señalan que el nuevo método allana el camino para la producción in vivo de circuitos electrónicos totalmente integrados en tejidos de seres vivos.
Con el gel inyectable, los
investigadores lograron cultivar electrodos en tejido vivo. Aquí se prueba en
un circuito microfabricado./ Thor Balkhed
Un equipo liderado por científicos de las
universidades suecas de Linköping, Lund y Gotemburgo ha inyectado un cóctel de
sustancias químicas en el cerebro, el corazón y la aleta caudal de peces cebra
y en el sistema nervioso de sanguijuelas medicinales. Mediante un ingenioso
sistema que aprovecha las propiedades biológicas del tejido, estas sustancias
químicas formaron en los animales un gel capaz de conducir la electricidad,
algo que resulta útil para estudiar la
función cerebral.
Los resultados, publicados esta semana en Science, allanan el camino para la
fabricación de circuitos electrónicos
totalmente integrados en organismos vivos.
“Durante varias décadas hemos intentado crear
electrónica que imitara la biología. Ahora dejamos que la biología cree la electrónica
por nosotros”, comenta el líder del trabajo Magnus Berggren, de la Universidad de
Linköping.
Vincular la electrónica al tejido biológico es
importante para comprender funciones biológicas complejas, combatir
enfermedades cerebrales y desarrollar futuras interfaces entre el hombre y la
máquina.
Sin embargo, la bioelectrónica convencional
tiene un diseño fijo y estático que resulta difícil, si no imposible, de
combinar con señales de sistemas biológicamente vivos, señala un comunicado de
la Universidad de Linköping.
Para salvar esta brecha entre biología y tecnología, los investigadores desarrollaron un método para crear materiales blandos, sin sustrato y conductores electrónicos en tejidos vivos.
Los
investigadores de la de la Universidad de Linköping Xenofon Strakosas, Magnus
Berggren, Daniel Simon y Hanne Biesmans. / Thor Balkhed
Enzimas que actúan como moléculas de ensamblaje
Inyectando un gel que contiene enzimas que
actúan como moléculas de ensamblaje, los científicos lograron cultivar
electrodos en el tejido de peces cebra y sanguijuelas medicinales.
En concreto, en experimentos realizados en la
Universidad de Lund, el equipo logró formar electrodos en el cerebro, el
corazón y las aletas caudales del pez cebra y alrededor del tejido nervioso de
sanguijuelas. Los animales no sufrieron daños por el gel inyectado ni se
vieron afectados por la formación de electrodos.
Según los investigadores, la estructura del gel
cambia al estar en contacto con las sustancias del cuerpo, haciéndolo conductor
de la electricidad.
Las moléculas endógenas del cuerpo bastan para
desencadenar la formación de electrodos. No hay
necesidad de modificación genética ni de señales
externas, como luz o energía eléctrica, que han sido necesarias en experimentos
anteriores.
“Nuevo paradigma en bioelectrónica”
Este estudio, según sus responsables, allana el
camino hacia un “nuevo paradigma en bioelectrónica”. Si antes era
necesario implantar objetos físicos para iniciar procesos electrónicos en el
cuerpo, en el futuro bastará con inyectar un gel viscoso, afirman.
Los investigadores demuestran además que el
método puede dirigir el material conductor electrónico a subestructuras
biológicas específicas y crear así interfaces adecuadas para la estimulación
nerviosa.
A largo plazo, podría ser posible fabricar
circuitos electrónicos totalmente integrados en organismos vivos, aseguran.
“Nuestros resultados abren vías completamente
nuevas para pensar en biología y electrónica. Aún nos quedan muchos problemas
por resolver, pero este estudio es un buen punto de partida para futuras
investigaciones”, subraya Hanne
Biesmans, coautora del trabajo.
Referencia:
M. Berggren et al. “Metabolite-induced
in vivo fabrication of substrate-free organic bioelectronics”. Science (febrero,
2023)
Fuente: SINC
Democracia y manipulación de la opinión pública
Democracia y manipulación de
la opinión pública
Por Raúl Zibechi
Rebelion
| 25/02/2023 |
Fuentes: La Jornada
La forma más adecuada para garantizar la estabilidad gubernamental ha sido,
hasta ahora, la democracia controlada o democracia de baja intensidad.
Un sistema que
consigue la estabilidad a través de la desinformación que promueven los medios
de comunicación monopolizados, que se está revelando como más eficiente que las
dictaduras.
Un estudio
realizado por científicos con grupos de peces, cuyos resultados estiman pueden
extrapolarse a las sociedades humanas, fue publicado en la revista Science en 2011,
bajo el título Individuos desinformados promueven el consenso democrático en
grupos animales (https://bit.ly/3SrWoqB).
La
investigación concluye que para contrarrestar la influencia de una minoría
obstinada, la presencia de individuos desinformados inhibe espontáneamente este
proceso, devolviendo el control a la mayoría numérica.
El trabajo
insiste en la importancia de lo que denomina las personas desinformadas en la
toma de decisiones, cuyo resultado sería democrático porque sencillamente son
mayoría.
En este punto,
los científicos parecen influidos por el concepto de democracia de las clases
dominantes, que la reducen al papel de la mayoría en la elección de sus
representantes. El problema, en nuestras sociedades, es que esas mayorías son
creadas por la manipulación de la información, tarea que recae en lo grandes
medios de comunicación monopolizados por pequeños grupos de empresarios
altamente concentrados.
Aunque el
trabajo es bastante más extenso que los párrafos citados, que lo sintetizan,
debe retenerse la importancia de la desinformación o, si se prefiere, de la
confusión que son capaces de crear para distorsionar las percepciones de la
población, empujada a apoyar a menudo opciones que van en contra de sus
intereses. Pero también para paralizar su capacidad de reacción con un
auténtico bombardeo, tarea que recae particularmente en los medios
audiovisuales, sobre todo la televisión, el segmento de la comunicación más
concentrado e impermeable al disenso.
Ejemplos
abundan: desde la desinformación sobre las causas de la pandemia del covid-19,
con sobreinformación sobre el murciélago en un mercado chino como causa,
ocultando el comprobado papel de la deforestación para cultivos industriales,
hasta las causas de la guerra en Ucrania. Rechazar la invasión de Rusia no debe
ir de la mano de la negación de la existencia de un golpe de Estado en Kiev en
2014, ni el cierre de 217 medios en Ucrania durante el primer año de la guerra,
mientras se acreditaron 12 mil periodistas locales y extranjeros para cubrirla,
según informa Reporteros Sin Fronteras (https://bit.ly/3lZhhNm).
Tampoco se
encuentran en los medios occidentales informes sobre el nazismo en Ucrania, ni
acerca de la guerra de Arabia Saudita contra Yemen, con su corolario de
muertes, hambrunas y desastre humanitario. No se considera invasión la
presencia de las fuerzas armadas de Estados Unidos en Siria, y así en muchos
otros casos.
Ni qué hablar
del sabotaje estadunidense al gasoducto Nordstream, Seymour Hersh, quien
elaboró un pormenorizado informe sobre cómo fue destruido, será silenciado y
vilipendiado, como acaba de asegurar Noam Chomsky (https://bit.ly/3m0xZME).
Lo cierto es
que la desinformación juega un papel relevante en el sostenimiento del orden
sistémico occidental, sector del mundo que controla los principales medios que
llegan a la población. Como señala una reciente cobertura de El Salto: los mejores
contenidos periodísticos pueden no tener ninguna consecuencia, porque el poder
y los medios a su servicio los ignoran (https://bit.ly/3IHe0vc).
Es evidente que
la democracia no existe en los medios. Ese control casi absoluto ha conseguido
algo que décadas atrás parecía imposible: erradicar el conflicto de la
percepción del público. Los más brutales crímenes pueden pasar desapercibidos
si los medios se empeñan en ello.
Cuando este
control mediático se desborda, porque la realidad resulta demasiado evidente,
como en Perú en los últimos 70 días, ahí está la policía, el golpe de Estado
permanente, para reventar las protestas.
A mi modo de
ver, esta realidad tiene dos consecuencias mayores.
La primera es
que no tiene mucho sentido luchar por la opinión pública, ni competir con los
medios del sistema, algo que los pueblos que luchan nunca conseguirán. Se trata
de crear medios propios, sin duda, pero no para competir por la opinión de las
mayorías, sino para consolidar nuestro campo, a los pueblos en movimiento y a
todos y todas aquellas que los acompañan. No es algo menor.
La segunda es
la convicción de que no existe algo llamado democracia, si es que alguna vez
existió. Desde el momento en que las opiniones y las voluntades de las personas
son moldeadas y manipuladas por gigantescas maquinarias que escapan a cualquier
control que no sea el de las clases dominantes, entrar en el juego electoral no
tiene futuro.
Construir abajo
y a la izquierda, parece el único camino emancipatorio posible.
Fuente: https://www.jornada.com.mx/2023/02/24/opinion/017a1pol
Y. Kotenok sobre la operación militar en Ucrania
Y. Kotenok sobre la operación militar en Ucrania
Sociología crítica
31.12.2022
Sobre el curso de la Operación Militar Especial (NWO)
en Ucrania. 30.12.2022 Fuente: Cor. Cassad
1) ¿En qué etapas dividiría los últimos 10 meses de NWO?1. Desde el comienzo del NWO hasta la salida de Kyiv.2. Finales de marzo-principios de mayo: el final de la batalla por Mariupol.3. Mayo-Julio – la liberación de la LPR.4. Agosto-Septiembre – Contraofensiva APU. Pérdida de Izyum, una operación defensiva exitosa en la cabeza de puente en la margen derecha.5. Octubre-diciembre: la formación final de un frente posicional, retirada de Kherson.
2) ¿Qué
victoria en el frente consideras más significativa?La derrota del enemigo en la aglomeración Severodonetsk-Lisichansk, que
permitió la liberación del territorio de la LPR. Más importante aún, se
puede poner el cerco y la derrota de la agrupación Mariupol de las Fuerzas
Armadas de Ucrania. En ambas batallas, el enemigo sufrió grandes pérdidas
en mano de obra y equipo, perdiendo grandes ciudades y dejando grandes
territorios.Además, la victoria cerca de Mariupol permitió a Rusia abrir un
corredor terrestre hacia Crimea y convertir el Mar de Azov en un mar interior de
Rusia.
3) Una pregunta
similar, pero con un signo menos. ¿Cuál de los fracasos te causó la
impresión más dolorosa?La derrota en Balakliya, que supuso
una retirada forzosa de Izyum y la posterior pérdida de Kupyansk y Krasny
Liman. Este paro fue advertido, pero no se tomaron las medidas adecuadas,
por lo que se permitió la pérdida de territorio y de una parte material importante. Desde
un punto de vista militar, esta es nuestra derrota más significativa en 2022.
4) Ahora, 10
meses después del inicio del NWO, ¿es posible decir que no estábamos lo
suficientemente preparados para el nivel de conflicto militar que está teniendo
lugar en Ucrania?Como lo demostraron los acontecimientos en el frente,
nadie estaba completamente preparado para el tipo de guerra que comenzó en
Ucrania. Incluida Rusia, que tiene que adaptarse a un tipo de guerra para
la que no estaba preparada. Como señalé allá por marzo, la guerra seguirá
el camino de la sirización, lo que implica frentes extendidos y una duración
indefinida de la guerra con su máxima internacionalización. Los problemas
de la Federación Rusa son principalmente de naturaleza objetiva, lo que se
agravó aún más por varios errores no forzados de naturaleza organizativa y
gerencial, algunos de los cuales ya fueron reconocidos oficialmente en el
otoño.
5) Uno de los
personajes principales de la SVO fueron los combatientes de la PMC de Wagner,
quienes se mostraron excelentemente en las operaciones de combate. ¿Era
esto esperado, dada la participación de este PMC en la guerra de Siria, o era
todavía algún tipo de sorpresa?Dado que seguí
las operaciones de Wagner PMC en Siria, Libia y África, no hay sorpresas
particulares sobre su éxito. El trabajo de asalto de alta calidad del
Wagner se pudo observar en Siria (por ejemplo, durante el asalto a Palmira y
Akerbat) o en Libia, durante las batallas por Trípoli. Eso sí, para
quienes no monitorearon la obra de Wagner en teatros remotos, los éxitos de las
PMC fueron algo inesperados. El principal resultado de esta participación
es que las PMC recibieron la legalización final en Rusia, incluso en ausencia
de una ley que regule las actividades de las PMC. No de jure, sino de
facto.
6) ¿Cuál es el
principal resultado político interno de los últimos meses?El resultado principal es que Rusia finalmente ha adquirido plena soberanía
político-militar y económica. El orden mundial actual obviamente se está
derrumbando y Rusia ahora está luchando por su lugar en el futuro mundo
multipolar. Nadie dijo que sería fácil e indoloro. Pero ahora todo
depende solo de nosotros mismos. A diferencia de la mayoría de los otros
países que no tienen una subjetividad político-militar, ahora somos
completamente independientes. Eso en sí mismo justifica el comienzo del
NWO, aunque incluso según Putin, esto fue tardío, siguiendo las promesas de
Occidente. Por supuesto, estos procesos afectan seriamente la situación
interna del país. Por un lado, me gustan los cambios que veo en la
sociedad, pero por otro lado, todavía son insuficientes. Tomará algún
tiempo antes de que paguemos por completo los «santos años 90»
7) ¿Qué países
se han mostrado como socios confiables de Rusia durante estos meses? Y,
por el contrario, ¿qué estados han decepcionado con su posición?China, Irán, Venezuela, Corea del Norte, Bielorrusia, Cuba. En cuanto
a las decepciones, personalmente no tengo ninguna. Todos se comportan
dentro de los límites de las expectativas, incluso algunos socios en la CSTO,
de quienes inicialmente no esperaba nada (esto no se aplica a Bielorrusia, que,
en la medida de sus posibilidades, brindó asistencia a la Federación
Rusa). Por separado, vale la pena descubrir a Turquía, que se sienta en
dos sillas y se guía por su propio beneficio. A pesar de entregar armas a
Ucrania, Erdogan ha logrado seguir siendo un compañero útil para Rusia,
ayudando a redirigir los flujos comerciales y construir esquemas de importación
paralelos. «Amigo Rejep» ciertamente no es un aliado y no se recomienda
darle la espalda, pero el esquema de interacción «nada personal, solo negocios»
todavía funciona.
8) En su
opinión, ¿en qué medida el NWO acercó a Rusia y Estados Unidos a la posibilidad
de un choque directo? ¿O son estos riesgos de una naturaleza completamente
diferente?Estos riesgos ahora son muy altos y tal colisión
podría ocurrir ya en 2023. Las razones de esto son obvias: Estados Unidos,
al no haber logrado la derrota y la rendición de Rusia, se ve obligado a seguir
aumentando las apuestas, pero no les quedan muchos movimientos antes de que el
tema del uso de armas nucleares salga a la luz. , como en 1962 o 1983. Rusia,
por supuesto, no está interesada en una crisis nuclear de este tipo, pero uno
debe estar preparado para el caso de un ataque de la OTAN contra Bielorrusia o
Kaliningrado. Cuanto mejor transmita Rusia tales perspectivas a Occidente,
mayores serán las posibilidades de que no se cruce la notoria línea
roja. Mientras tanto, vemos cómo las líneas rojas de Rusia se ignoran
deliberadamente, porque no amenazan a Occidente con la
destrucción. Occidente entiende solo la fuerza, no las preocupaciones con
las protestas en un abrazo.
9) ¿Qué tan
adecuado es el punto de vista de que todo el 2022 fue una especie de
preparación para la campaña decisiva del año 2023?En mi opinión, esto es una simplificación. 2022 fue el primer año de
una guerra que no necesariamente durará solo 2 años. Teniendo en cuenta la
experiencia de las guerras Irán-Irak e Indo-Pakistán, así como la experiencia
de Siria, tal guerra podría durar mucho más de dos años. Estados Unidos ya
está planeando francamente acompañar la guerra hasta 2025-2026. Necesitamos
hacer lo mismo, formar la preparación y la capacidad para librar una guerra de
este tipo durante varios años (si terminamos antes, bien), al mismo tiempo que
tratamos los problemas de modernización del país a las realidades económicas y
político-militares actuales. Al mismo tiempo, es importante comprender que
la Guerra Fría, independientemente del momento de la guerra en Ucrania,
continuará durante mucho tiempo, al igual que el final de la Guerra de Corea no
condujo al final de la Guerra Fría. Guerra. Entonces necesitamos
sintonizarnos con un largo conflicto y un trabajo serio para desarrollar el
país en las nuevas realidades. Por supuesto, las sanciones no se
levantarán en un futuro previsible. Además, es probable que se produzcan
otros conflictos, en los que la Federación Rusa y los Estados Unidos chocarán
en el territorio de terceros países. Pero quien recuerda la Guerra Fría
pasada sabe cómo sucede. Bueno, en cuanto a los éxitos puramente militares
en el frente, todo depende únicamente de los militares y de cómo llevarán a
cabo la campaña de 2023.