jueves, 6 de octubre de 2022

Cuando los corresponsales y Agencias se ponen al servicio de la OTAN y mienten sin vergüenza

 

Cuando los corresponsales y Agencias se ponen al servicio de la OTAN y mienten sin vergüenza


Diario octubre / octubre 6, 2022

 


La maquinaria de propaganda de la OTAN está servida. Desde hace semanas no hay corresponsal ni Agencia de noticias que no tilde al ejército ucraniano (los batallones nazis y los mercenarios extranjeros contratados por empresas privadas han sido olvidados) de valientes luchadores que avanzan y avanzan. No se explica que bombardean a los que ellos consideran su propio territorio (las regiones del sur) y se esconden las matanzas y crímenes de guerra para que el público USA/UE no se atreva ni a dudar que los malos son los rusos. El sabotaje al gaseoducto Nord Stream ha pasado a segundo término antes de que se sepa la verdad porque las pruebas empezaban a ser sospechosas. En este contexto, contrastar la información se convierte en una causa prohibida y hacerlo es estar a sueldo de Putin. Es un desafío casi imposible. Observen este ejemplo: en las últimas horas ningun medio occidental (de esos libres y democráticos) se ha hecho eco de esta otra campana porque dicen que es propaganda. La de ellos, no.


Las Fuerzas Armadas de la Federación Rusa continúan con la operación militar especial.

Las Fuerzas Aeroespaciales Rusas han neutralizado la sede del Comando Aéreo del Este de las Fuerzas Armadas de Ucrania en el suburbio suroeste de Dnepropetrovsk.

Se lanzaron ataques con misiles en las áreas de concentración de las unidades de las brigadas mecanizadas 14 y 92 de las Fuerzas Armadas de Ucrania cerca de Dvurechnaya, Petropavlovka y Kupyansk (región de Jarkov) en la dirección de Kupyansk. Los ataques se han saldado con la eliminación de hasta 100 militares, entre ellos mercenarios extranjeros y 16 unidades de material militar.

Se ha lanzado un ataque de fuego masivo contra las unidades de la 66ª Brigada Mecanizada de las Fuerzas Armadas de Ucrania y 2 bases provisionales de grupos nacionalistas cerca de Torskoye en dirección Krasny Liman.

 El ataque se ha saldado con la eliminación de más de 120 nacionalistas y 14 unidades de equipo blindado.

El ataque con misiles lanzado contra la mano de obra y el equipo de la 54.a Brigada Mecanizada de las Fuerzas Armadas de Ucrania cerca de Grigorovka en dirección a Lisichansk ha resultado en la eliminación de hasta 90 militares, 3 tanques y 6 vehículos blindados.

Se lanzaron ataques con misiles en un depósito de municiones de la 65.a Brigada Mecanizada de las Fuerzas Armadas de Ucrania cerca de Zaporozhye, así como en los talleres de fabricación para la reparación de aeronaves en la planta de Motor Sich.

 Los ataques han resultado en la eliminación de más de 15 toneladas de municiones, incluidos proyectiles para el sistema de cohetes de lanzamiento múltiple HIMARS fabricado en EE. UU., así como 2 helicópteros de combate Mi-24 ucranianos.

Los ataques lanzados por las Fuerzas Aeroespaciales Rusas contra las unidades de las brigadas 24 Mecanizadas, 17 Tanques y 128 de Asalto de Montaña de las Fuerzas Armadas de Ucrania desplegadas cerca de Belaya Krinitsa, Arkhangelskoye, Lyubimovka y Zolotaya Balka han resultado en la eliminación de 9 tanques, 12 vehículos de combate de infantería. , 20 vehículos de motor y hasta 250 militares.

La aviación operacional-táctica y del ejército, las tropas de misiles y la artillería han neutralizado 5 puestos de mando de las Fuerzas Armadas de Ucrania cerca de Kharkov, Kramatorsk (República Popular de Donetsk), Nikopol (región de Dnepropetrovsk), Zelyony Gai (región de Kherson) y Bereznegovatoye (región de Nikoláyev), como así como 43 unidades de artillería, 157 áreas de concentración de mano de obra y equipo militar.

Se han destruido 5 depósitos de misiles, armamento de artillería y municiones cerca de Torskoye, Malinovka, Zhelannoye (República Popular de Donetsk), Dimitrovo (región de Zaporozhye) y Shevchenkovo ​​(región de Nikoláyev).

 1 sistema de misiles de defensa aérea Buk-M1 ha sido destruido cerca de Chasov Yar (República Popular de Donetsk).

 1 radar para el misil de defensa aérea S-300 ha sido destruido cerca de Aleksandrovka (región de Dnepropetrovsk).

La aviación de combate de las Fuerzas Aeroespaciales de Rusia derribó 1 Su-25 ucraniano cerca de Toretsky (República Popular de Donetsk) y 1 Su-24 de la Fuerza Aérea de Ucrania cerca de Belaya Krinitsa (región de Kherson).

Las instalaciones de defensa aérea han destruido 8 vehículos aéreos no tripulados cerca de Nikolayevka (región de Jarkov), Urozhaynoye, Stepnoye, Zaporozhskoye (República Popular de Donetsk), Pyatikhatki, Aleksandrovka, Kakhovka y Koshara (región de Kherson).

 2 misiles balísticos Tochka-U han sido derribados cerca de Rovenki (República Popular de Lugansk).

 Además, 9 proyectiles lanzados por HIMARS y Olkha MRLS han sido destruidos en el aire cerca de Novaya Kakhovka y Chernobayevka (región de Kherson).

En total, 312 aviones y 157 helicópteros, 2.145 vehículos aéreos no tripulados, 379 sistemas de misiles de defensa aérea, 5.336 tanques y otros vehículos blindados de combate, 860 vehículos de combate equipados con MLRS, 3.445 cañones y morteros de artillería de campaña, así como 6.226 unidades militares especiales los vehículos han sido destruidos durante la operación militar especial.

FUENTE: insurgente.org

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El euro sin la industria alemana

 

Tras el sabotaje hay que preguntarse: ¿Qué pasará si se rompen los lazos comerciales y energéticos con Rusia? ¿Cómo cambiará la relación entre el dólar y el euro? ¿Por qué no se discuten las consecuencias económicas para Alemania y otros países europeos?


El euro sin la industria alemana

 

Michael Hudson

El Viejo Topo

6 octubre, 2022 


© Ilustración: Chen Xia/GT.


La reacción al sabotaje de tres de los cuatro sistemas de oleoductos Nord Stream se ha centrado en especulaciones sobre quién lo hizo y si la OTAN hará un intento serio por descubrir a los responsables. Sin embargo, en lugar de pánico, ha habido un gran suspiro de alivio, incluso de calma en la diplomacia anglosajona.

La desactivación de los gasoductos acaba con la incertidumbre y las preocupaciones de EEUU y la OTAN. Una incertidumbre que había crecido considerablemente por las  manifestaciones que se produjeron en Alemania  exigiendo el fin de las sanciones y la puesta en marcha del Nord Stream 2 para resolver la escasez de energía.

Los alemanes empezaban a comprender lo que significaría el cierre de sus empresas siderúrgicas, de fertilizantes, de vidrio y de papel higiénico. Estas grandes compañías anunciaron que tendrían que cerrar por completo (o cambiar sus operaciones a otros países) si Alemania no se apartaba de las sanciones comerciales y monetarias contra Rusia.

Al otro lado del Atlántico, la halcón del Departamento de Estado, Victoria Nuland, ya había anunciado, a principios de Enero, cuál era la opinión de Estados Unidos: “de una forma u otra, Nord Stream 2 no funcionará”. Un mes más tarde en conferencia de prensa, junto al canciller alemán, el presidente Biden respaldo directamente la amenaza: “ No habrá un Nord Stream 2. Le pondremos fin… Lo prometo, seremos capaces de hacerlo”.

La mayoría de los observadores asumieron que estas declaraciones reflejaban un hecho obvio: los políticos alemanes estaban completamente en el bolsillo de EEUU y de la OTAN. Los líderes de Alemania habían retenido las turbinas negándose a autorizar Nord Stream 2, y Canadá se apoderó de las dínamos de Siemens necesarias para enviar gas a través de Nord Stream 1. Estas medidas parecían resolver las cosas hasta que un número creciente de ciudadanos y los empresarios alemanes comenzaron a calcular lo que significa bloquear el gas ruso para el tejido industrial y, por lo tanto, para el empleo doméstico.

Ante estas manifestaciones, la voluntad de Alemania de autoimponerse una depresión económica empezó a vacilar. Si los políticos alemanes hubiesen decidido poner fin a las sanciones el frente de la guerra contra Rusia habría saltado por los aires. Italia y Francia podrían haber seguido su ejemplo. Esta perspectiva hizo urgente arrancar el mecanismo de las sanciones de las manos de los políticos europeos

A pesar de ser un acto de violencia, el sabotaje de los gasoductos ha restablecido la calma en las relaciones entre Estados Unidos y sus aliados europeos. No hay más incertidumbres. Europa ya no podrá apartarse de la política estadounidense  restaurando el comercio con Rusia.

La sola amenaza que Europa pusiera fin a las sanciones comerciales y financieras contra Rusia se ha resuelto a favor de los Estados Unidos. Ya no habrá gas barato para las industria europeas. La presión ha caído en tres de las cuatro tuberías, y el agua salada las corroerá haciéndolas inútiles.

¿Hacia dónde van el euro y el dólar a partir de aquí?

Después del sabotaje habrá que preguntarse ¿Qué pasará si se rompen los lazos comerciales y energéticos con Rusia? ¿Cómo cambiará la relación entre el dólar estadounidense y el euro? ¿Por qué no se discuten abiertamente las consecuencias económicas para Alemania, Italia y otros países europeos?

El resultado no lo discute ningún economista sensato: se producirá un colapso económico en Alemania y en casi toda Europa. La próxima década será un desastre. Puede haber recriminaciones por el precio pagado por permitir que la OTAN dicte la diplomacia europea, pero no hay nada que Europa pueda hacer al respecto por el momento.

Las exportaciones industriales alemanas y la atracción de flujos de inversión extranjera fueron los principales factores que sustentaron el tipo de cambio del euro. Para Alemania, el gran atractivo de pasar del marco alemán al euro era evitar que su superávit exportador hiciera subir el tipo de cambio del marco alemán y en consecuencia sacara los productos alemanes de los mercados mundiales.

La expansión de la eurozona –incluyendo a Grecia, Italia, Portugal, España y otros países con déficit en la balanza de pagos– impidió que el euro se disparara. En la práctica la eurozona protegía la competitividad internacional de la industria alemana.

Después de su introducción a 1,12 dólares, el euro se hundió a 0,85 dólares en julio de 2001, pero se recuperó y, de hecho, subió a 1,58 dólares en abril de 2008. Desde entonces, ha ido descendiendo y, desde febrero de este año, las sanciones han empujado al euro por debajo de la paridad con el dólar, a $0,97 hace unos días.

El principal problema con un euro débil es el aumento de los precios del gas y del petróleo y, también, de productos como el aluminio y los fertilizantes que requieren grandes insumos de energía para su producción. Y a medida que el tipo de cambio del euro cae frente al dólar, el costo de mantener la deuda europea en dólares (condición normal para las filiales de las multinacionales estadounidenses) aumenta, reduciendo sus ganancias.

Este no es el tipo de depresión en la que los «estabilizadores automáticos» pueden funcionar para restablecer el equilibrio macroeconómico. La dependencia energética es estructural. Para empeorar las cosas, las reglas económicas de la eurozona limitan sus déficits presupuestarios a solo el 3% del PIB. Esto impide que sus gobiernos nacionales apoyen sus economías mediante el gasto deficitario. Los precios más altos de la energía y los alimentos, y el servicio de la deuda en dólares, dejarán menos ingresos para gastar en bienes y servicios.

Como puntapié final, el analista internacional Pepe Escobar  nos recuerda: “Alemania está obligada por contrato a comprar al menos 40 mil millones de metros cúbicos de gas ruso al año hasta el 2030… Según los contratos aunque a Berlín no le llegue gasolina, por ejemplo producto de un sabotaje, igualmente debe pagar a Gazprom”. Se puede esperar una larga batalla judicial antes de que el dinero cambie de manos. Y la capacidad de pago final de Alemania se debilitará constantemente.

A medio mundo le pareció muy raro que el mercado de valores de EEUU se haya disparado hace una semana. Tal vez, el Equipo de Protección contra un Colapso de Wall Street haya intervenido para tratar de asegurar al mundo que todo estaba razonablemente bien. Pero el mercado de valores cayó el jueves y el viernes. La realidad no podía ignorarse más tiempo.

La competencia de la industria alemana con la de los Estados Unidos está terminando. Ha perdido Alemania. Esto ayudará fuertemente a la balanza comercial estadounidense. Pero en la cuenta de capital, la depreciación del euro reducirá el valor de las inversiones estadounidenses en Europa y el valor de sus beneficios se contraerá sí o sí. En otras palabras, las ganancias globales reportadas por las multinacionales estadounidenses caerán.

El efecto de las sanciones estadounidenses y la Nueva Guerra Fría fuera de Europa

La capacidad de muchos países para pagar sus deudas internas y externas ya estaba llegando al punto de ruptura antes que las sanciones contra Rusia elevarán los precios mundiales de la energía y los alimentos.

Los aumentos de precios provocados ​​por las sanciones se han visto agravados por el aumento del tipo de cambio del dólar frente a casi todas las monedas (irónicamente, excepto frente al rublo, cuya tasa se ha disparado en lugar de colapsar). Los precios de las materias primas internacionales todavía se cotizan principalmente en dólares, por lo que la apreciación del dólar está elevando aún más los precios de importación para la mayoría de los países.

El dólar en alza también eleva el costo en moneda local del servicio de las deudas externas. Muchos países de Europa y del Sur Global ya han llegado al límite de su capacidad para pagar sus deudas denominadas en dólares y todavía están lidiando con el impacto de la pandemia del Covid.

Ahora que las sanciones de Estados Unidos y de la UE/OTAN han hecho subir los precios mundiales del gas, del petróleo y de los cereales, y que la apreciación del dólar ha elevado el costo del servicio de las deudas, los países se encuentran en una disyuntiva feroz: importan la energía y los alimentos que necesitan para vivir o pagar su deuda externa. En este dilema alguien tiene que ceder.

El martes 27 de septiembre, el secretario de Estado, Antony Blinken, derramó lágrimas de cocodrilo y dijo que atacar los oleoductos rusos “no beneficia a nadie”. Pero si ese fuera realmente el caso, nadie habría atacado las tuberías. Lo que el Sr. Blinken realmente estaba diciendo era otra cosa: “No hagas preguntas tontas”. Nadie cree que los investigadores de la OTAN vayan a trabajar en serio y pongan en evidencia a Estados Unidos.

Los estrategas de Washington tienen un plan sobre cómo proceder a partir de ahora. Intentarán mantener una economía global neoliberal todo el tiempo que puedan. Usarán la estratagema habitual para los países que no pueden pagar sus deudas: el FMI les prestará el dinero, a cambio de la privatización de todo lo que queda de dominio público, de otros activos y de los recursos naturales. Ya hay ávidos inversores, entre los estadounidenses y sus aliados, dispuestos a comprarlos a precio de subasta.

¿Funcionará? ¿O los países deudores se unirán y encontrarán formas de restaurar el mundo sin las «condiciones» que pone Estados Unidos?

Que el sur del mundo implemente una alternativa al orden neoliberal es la gran preocupación de los estrategas estadounidenses.  Sus mejores pensadores saben que la crisis no se resuelve saboteando Nord Stream 1 y 2. La solución probablemente será, una vez más, la intervención militar y nuevas revoluciones de colores para recuperar el poder perdido en el Sur Global y Eurasia

Sin embargo, el hecho que las sanciones antirrusas hayas funcionado justo lo contrario de lo que creía la administración Biden ofrece una perspectiva para un nuevo orden económico. El desprecio que expresan los diplomáticos estadounidenses hacia otros países que actúan en su propio interés parte de una visión unilateral y presuntuosa: Washington cree que no hay alternativa al dominio del dólar.

Por tanto, a menos que los países trabajen juntos para crear una alternativa al FMI, al Banco Mundial, a la Tribunal Internacional, a la Organización Mundial del Comercio (y a otras agencias de la ONU controladas por los estadounidenses) la dominación financiera y militar se seguirá desarrollando de acuerdo con las líneas que han planificado los estrategas de Washington.

Entonces, ahora la gran pregunta es la siguiente: ¿serán los países capaces de desarrollar un orden económico alternativo para protegerse de un destino como el que ha impuesto Estados Unidos a Alemania y Europa?

Fuente: Observatorio de la crisis.

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La OTAN emite una alerta por la salida al mar del submarino nuclear ruso “Belgorod”. [Yo la verdad es que no sé cómo les podrá ir la cosa a los trabajadores y jubilados alemanas, checos, polacos, daneses, americanos, franceses, angoleños, ingleses, etc. Lo más seguro es que les vaya bien puesto que no viven en Corea del Norte, Sur, Este y el Otro, donde creo que tienen salarios bajos y una dictadura de corre corre que te pillo, pero lo que sí es seguro es que a los trabajadores españoles, incluidos los que trabajando y cobrando por lo trabajado pertenecen a ese novo estrato social de la pobreza, y también a los que no tienen trabajo y jubilados no nos conviene en absoluto que la guerra empezada en Ucrania a instancias de los capitales americanos dominantes junto con el Sargento Gorila (este es un sargento americano que aparecía en los tebeos de Hazañas Bélicas) y capitales principales colaterales se extienda al mundo entero como parece ser pretensión de los dichos capitales, de donde no hay que deducir sencillamente porque no se puede deducir, que a mí me guste el peinado del señor Putin. Llevamos camino de una nueva guerra mundial, en general, comenzada nada más finalizar la II Guerra Mundial, y en concreto y como antecedente más inmediato con la guerra de Ucrania, que dio comienzo no en 2022 sino en 2014 con el golpe de Estado en Ucrania auspiciado, preparado y financiado por los capitales de USA y la Unión Europea. Esto es grave. Esto es para tener miedo (yo lo tengo), pero lo más grave y temeroso de todo, me parece a mí, es que en general a los trabajadores (a los que voten PSOE, PP, VOX y otros, también) nos parece que esto no va con nosotros sino con el Guerrero del Antifaz, El Llanero Solitario, Pulgarcito, Pantera Negra y, sobre todo, con Roberto Alcázar y Pedrín (más de derechas que el grifo del agua fría), que con pistola en mano y un cacho de estaca por bandera, son quienes al final nos van a traer la paz, un jamón con chorreras y súbete aquí que verás Madrid. Tal cual]

 

La OTAN emite una alerta por la salida al mar del submarino nuclear ruso “Belgorod”


TERCERAINFORMACION / 05.10.2022

La OTAN emitió una advertencia de emergencia en relación con la salida al mar del submarino nuclear ruso “Belgorod”.



El comando de la Alianza del Atlántico Norte anunció una advertencia de emergencia a las armadas de los países que forman parte de la OTAN y son aliados de la OTAN. El motivo de esto fue el envío a aguas abiertas del submarino nuclear ruso “Belgorod”, que no solo es uno de los submarinos más sigilosos, sino que también es capaz de transportar el torpedo submarino nuclear no tripulado Poseidón, que, según La Repubblica , es capaz de provocar un enorme tsunami.

“La alarma surge de un informe de inteligencia de la OTAN enviado en los últimos días a los mandos aliados más importantes. El informe trata sobre el movimiento del submarino nuclear “Belgorod”, que entró en funcionamiento en julio. Ahora el submarino ha salido para sumergirse en los mares del Ártico y se teme que la misión del submarino sea probar el supertorpedo Poseidón, a menudo denominado el “arma del Apocalipsis”, por primera vez.


“Con 184 metros de eslora y 15 de manga, el submarino puede moverse bajo el agua a una velocidad de unos sesenta kilómetros por hora y con una autonomía de aproximadamente 120 días sin necesidad de volver a la superficie. Las hélices también se consideran innovadoras porque están diseñadas para proteger contra el sonar”, según la edición italiana de “La Repubblica”.

La OTAN considera que el submarino nuclear ruso “Belgorod” es uno de los oponentes más fuertes, lo que se explica, entre otras cosas, por el uso de las tecnologías más modernas en su desarrollo.

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En Ucrania está a punto de comenzar una guerra diferente

 

En Ucrania está a punto de comenzar una guerra diferente

 

DIARIO OCTUBRE / octubre 6, 2022

 

Tres semanas después de la celebrada contraofensiva del ejército ucraniano en la provincia de Jarkov, los acontecimientos que al principio quedaron oscurecidos por la niebla de la guerra pueden verse ahora con mayor claridad.


De julio a agosto hubo una acumulación de fuerzas ucranianas y de la OTAN recién formadas (“voluntarios extranjeros”) transportadas al cuadrante noreste de la provincia de Járkov.

 

La gran mayoría de las fuerzas ucranianas eran reclutas, una parte importante de los cuales había recibido unas semanas de entrenamiento intensivo en las bases de la OTAN en Polonia, Alemania y Gran Bretaña.

La mayor parte del equipamiento entregado por la OTAN durante este periodo se destinó a este nuevo ejército en lugar de dispersarse a otras zonas a lo largo de los 1.000 kilómetros de la línea de contacto que va de Jarkov y Jerson.

El número total de fuerzas ucranianas reunidas por la OTAN sigue siendo incierto, pero parece haber sido de entre 35.000 y 50.000, incluidos unos 5.000 “voluntarios extranjeros” de la OTAN que finalmente iban a servir como “tropas de choque” para la ofensiva.

En las semanas previas al ataque ucraniano, los rusos habían reducido considerablemente la densidad de hombres y equipos en el triángulo geográfico formado por el río Seversky-Donets, que fluye de noroeste a sureste, y el río Oskol, que fluye de norte a sur.

La confluencia de estos dos ríos se encuentra cerca del sureste de Izium, con el centro de transporte de Kupiansk a caballo entre el Oskol al norte y Andreievka en la orilla izquierda del Seversky-Donets al noroeste.

Los rusos dejaron en su lugar pequeñas pero bien abastecidas formaciones de milicias del Donbas y la Guardia Nacional rusa, cubiertas por un fuego de artillería de largo alcance relativamente potente, un modesto apoyo aéreo cercano y ocasionales ataques de misiles de precisión contra las concentraciones de tropas ucranianas.

Discusión sobre la debilidad rusa en el frente norte

No es posible afirmar que los comandantes rusos debilitaron deliberadamente esa zona en particular o si simplemente se vieron obligados a dejarla debilitada porque no tenían fuerzas suficientes para cubrir todo el frente.

La opinión más extendida es que la línea se debilitó inadvertidamente en esta zona, principalmente porque los comandantes rusos pensaron que el ataque ucraniano tendría lugar en otro lugar.

William Schryver sostiene que el alto mando ruso debilitó intencionadamente su línea en esta zona en particular para inducir a la OTAN a atacar donde lo hicieron, y luego llevarlos deliberadamente a la bolsa triangular definida por los dos ríos (*).

Hay que tener en cuenta que desde el principio de esta batalla, que dura ya tres semanas, las fuerzas rusas que defienden la zona han sido superadas en número por lo menos en 5 a 1 en casi todo momento. Es absurdo creer que esta disparidad en el número de fuerzas no estuviera prevista por los comandantes rusos, por lo que el plan de batalla consistía en explotar la geografía y la superioridad inherente de la potencia de fuego de los defensores para efectuar una retirada táctica e infligir un duro castigoa a los atacantes.

La versión de una retirada rusa desordenada, con mil tanques y vehículos blindados abandonados, miles de bajas y diez mil prisioneros, no son ciertas. La retirada se llevó a cabo de manera disciplinada, avanzando a través de múltiples líneas de defensa preparadas e infligieron graves pérdidas a los hombres y equipos ucranianos en cada paso del camino, mientras que ellos mismos sufrieron pérdidas relativamente modestas.

Varias ciudades y pueblos fueron brevemente defendidos y luego abandonados en el camino. Los propagandistas ucranianos y sus aliados en los medios de comunicación occidentales pregonaron las victorias, pero ninguno de estos relatos se molestó en mencionar el exorbitante precio pagado por los modestos avances en el terreno que decían haber ganado.

Tampoco informan de las posteriores purgas de colaboradores rusos infiltrados en cada una de esas ciudades y pueblos.

A pesar del aluvión de propaganda ilusoria, los movimientos de tipo “guerra relámpago” de los primeros días de la ofensiva se ralentizaron hasta convertirse en un rastro sangriento en la segunda mitad de septiembre, devorando cientos de hombres y docenas de piezas de equipo cada día, con sólo un mínimo avance.

Los rusos establecieron su primera línea de defensa en la orilla oriental del río Oskol. Todos los días durante las últimas dos semanas, los ucranianos han afirmado que sus tropas habían tomado o estaban a punto de tomar Kupiansk, que se encuentra a caballo del río. Pero eso no fue así hasta hace dos días, cuando las fuerzas rusas en la parte oriental de la ciudad la dejaron en manos de los ucranianos, no antes de infligir una matanza totalmente desproporcionada en relación con sus propias pérdidas.

No ha habido mucha lucha de infantería. El ejército ruso suele arrasar los asaltos ucranianos principalmente con fuego indirecto de artillería y ataques aéreos, corregidos continuamente por drones y observadores de vanguardia.

La batalla de Liman

En el extremo sur del cerco, los rusos abandonaron rápidamente Izium, oponiendo sólo la suficiente resistencia para cubrir su retirada. Luego se concentraron en las cercanías de Liman, en la orilla oriental del Oskol, y fue la defensa de Liman la que desde entonces se convirtió en el mayor y más sangriento enfrentamiento de la larga batalla.

Durante varios días, los ucranianos y las tropas de choque de “voluntarios extranjeros” lucharon, con grandes pérdidas de hombres y material, para establecer cabezas de puente duraderas a través del Oskol. Finalmente, su superioridad numérica se impuso y avanzaron sus fuerzas a través del río.

Durante más de una semana, los repetidos intentos de los ucranianos de atacar y derrotar a los defensores de Liman fueron rechazados con enormes pérdidas para los atacantes. Miles de soldados ucranianos y cientos de piezas de su equipo, suministrado por la OTAN, fueron destruidos en la carnicería, pero han seguido enviando aún más tropas, blindajes y vehículos a la contienda, fanáticamente decididos a tomar la ciudad a cualquier precio.

La guarnición de Liman y sus alrededores, apoyada por la artillería de largo alcance y los ataques aéreos, ha infligido una terrible herida a la capacidad de combate de las formaciones ucranianas contra las que luchó. El Ministerio de Defensa ruso afirma que miles de ucranianos han muerto en los últimos combates a lo largo de la línea de defensa del río Oskol, entre Kupyansk y Liman. Esas cifras se suman a los miles de muertos en la primera semana de la ofensiva. Ahora las fuerzas ucranianas, muy mermadas, se encuentran al final del saliente creado por esa contraofensiva de última hora.

Un viraje en el curso de la guerra

La batalla de Liman será vista como el eje de esta fase de la guerra. Para llegar a ese punto, los ucranianos han gastado una parte insustituible del ejército que la OTAN se esforzó en reunir durante el verano. Puede que aún les queden varios miles de soldados menos aptos para participar en futuros combates, pero han perdido muchas de sus tropas de choque de “voluntarios extranjeros”, así como vastas cantidades de equipo suministrado por Occidente y existencias limitadas de munición que ya no pueden ser reemplazadas fácilmente, por la sencilla razón de que los países europeos de la OTAN, e incluso Estados Unidos, simplemente han agotado sus limitadas existencias.

Desde hace varias semanas, trenes aparentemente interminables de equipos militares rusos fluyen desde Rusia hacia Ucrania. No se trata de columnas de tanques y vehículos oxidados y anticuados, como quieren hacer creer los propagandistas. Se trata de cientos de tanques de primera categoría, piezas de artillería autopropulsadas, vehículos de combate de infantería, cientos de lanzacohetes, un número impresionante de sistemas de defensa aérea e innumerables vehículos de apoyo de todo tipo.

Nada de esta enorme acumulación de fuerza militar se distribuyó rápidamente por las líneas del frente. Las fuerzas que han estado luchando en Kupiansk, Liman y otros lugares en las últimas semanas han sido abastecidas, pero no reforzadas sustancialmente. El refuerzo que se está llevando a cabo está claramente destinado a otro lugar.

A ello hay que sumar la movilización parcial de las reservas rusas: 200.000 soldados en total, la mayoría de los cuales acabarán siendo desplegados para ocupar el lugar de las tropas de combate, mucho más experimentadas, que se han visto obligadas a servir de apoyo de fondo durante los últimos siete meses de la guerra.

Lo más importante es el número de batallones profesionales rusos que no han participado en esta guerra y que ahora se añadirán a la potencia de fuego de la línea de frente, sin duda equipados en gran parte por la nueva incorporación de blindaje y artillería que se ha visto en la zona de combate.

Más de ochocientos aviones de múltiples tipos se han reunido en varias bases rusas que rodean el actual teatro de operaciones. Aunque se han seguido realizando cientos de salidas aéreas diarias en el campo de batalla, sólo han desplegado una fracción de la fuerza disponible.

“Rusia está luchando en esta guerra con una mano atada a la espalda”, dice Schryver, a pesar de que Estados Unidos y sus vasallos de la OTAN han pasado de una escalada a la siguiente.

Tras el impactante sabotaje de los oleoductos Nord Stream en el Mar Báltico, y dada la masiva pero aún no utilizada acumulación militar en las zonas de combate activas, es casi seguro que octubre será un punto de inflexión importante en la guerra ruso-ucraniana.

(*) https://imetatronink.substack.com/p/turning-point

FUENTE: mpr21.info

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