viernes, 26 de noviembre de 2021

¿Cuál fue el impacto del Plan Cóndor en América Latina?

 

¿Cuál fue el impacto del Plan Cóndor en América Latina?

Tercerainformacion / 25.11.2021

Según los Archivos del Terror, hubo 50.000 personas asesinadas, 30.000 desaparecidas y 400.000 estuvieron encarceladas.



A finales de 1992 fueron halladas en Paraguay, en archivos secretos de la policía, pruebas sobre la existencia en los años 1970 y 1980 de una campaña coordinada entre las dictaduras de América del Sur, de conjunto con los servicios de inteligencia de Estados Unidos (EE.UU.), para neutralizar a militantes de izquierda y acallar todo pensamiento emancipador.

Esos documentos se encontraron gracias a la gestión del educador Martín Almada y el juez José Agustín Fernández, y ofrecen pruebas irrefutables del exterminio y violaciones de derechos humanos contra personas que fueron identificadas como adversarios.

De acuerdo con esos registros documentales, conocidos hoy como Archivos del Terror, fueron asesinadas unas 50.000 personas, 30.000 resultaron desaparecidas y 400.000 estuvieron encarceladas, de las cuales muchas sufrieron tortura. Entre las víctimas se cuentan 3.000 niños.

Plan Cóndor y dictaduras militares

A juicio de la periodista argentina Stella Calloni, los regímenes militares derechistas de  Argentina, Bolivia, Chile, Paraguay, Uruguay y Brasil participaron en esa campaña de terror.

En Paraguay se apoyaron en el dictador Alfredo Stroessner, en el poder entre 1954 y 1989, y en Bolivia lo hicieron en la dictadura de Hugo Banzer, iniciada en 1971.

Chile se incorporó tras el ahogamiento en sangre por el general golpista Augusto Pinochet del mandato del presidente socialista Salvador Allende, en 1973, año en que el presidente Juan María Bordaberry implantó una dictadura en Uruguay.

Tres años después, tras la muerte del presidente Juan Perón, el general Jorge Rafael Videla y los militares llegaron al poder en Argentina, país que registró la mayoría de los 30.000 desaparecidos que hubo en la región. En el caso de Brasil, los militares destruyeron en 1964 el gobierno democrático y popular de João Goulart.

La campaña de exterminio recibió el nombre en clave de Operación Cóndor. Sus primeras coordinaciones fueron hechas entre Pinochet y el general Manuel Contreras, jefe de la Dirección de Inteligencia Nacional (DINA) de ese país.

Otro pilar del terror

Documentos hecho públicos revelan que esta cruzada de aniquilación fue urdida además con la guía cómplice de Estados Unidos.

Historiadores consideran tras esas acciones represivas estuvo Henry Kissinger, primero asesor de Seguridad Nacional y luego Secretario de Estado (1973-1977) de esa nación.

Martín Almada, quien sobrevivió a crueles torturas en Paraguay, denunció que las fuerzas militares y policiales de esos países (y de otros, como El Salvador) fueron formadas para asesinar en la Escuela de las Américas.

EE.UU. proclamaba que esa instalación suya, ubicada entonces en la Zona del Canal de Panamá y hoy en Fort Benning (estado de Georgia), se especializaba en contrainsurgencia, pero en verdad enseñaba la tortura como instrumento cotidiano para reprimir. No pocos graduados de este lugar devinieron años después connotados violadores de los derechos humanos.

Bomba atómica contra el Cono Sur

Además de activarse contra todo lo que se antojase ideas socialistas y comunistas, esas dictaduras y la Operación Cóndor favorecieron en esas naciones la aplicación de recetas neoliberales, lo cual acarreó significativas consecuencias en su ulterior evolución económica, política y social.

A juicio de Almada, las dictaduras utilizaron el exterminio, la tortura y el exilio de sus enemigos civiles, preferentemente intelectuales y líderes jóvenes. También se orientaron a aniquilar a religiosos que abrazaron la Teología de la Liberación.

Según estudiosos, debido al Plan Cóndor generaciones de luchadores revolucionarios perdieron a muchos de sus líderes más íntegros.

Almada considera que Kissinger lanzó una bomba atómica sobre el Cono Sur de América Latina, donde Operación Cóndor dejó más de 100.000 víctimas fatales entre 1975 y 1989.

¿Deja vu Kast?

Meses atrás, medios chilenos llamaron la atención sobre un aspecto del programa del político ultraderechista José Antonio Kast, quien se postula para la Presidencia de Chile.

En el punto 33 de su programa, el representante del Partido Republicano valora que lo ocurrido en Colombia durante el Paro Nacional de 2021 es una repetición del estallido social en Chile a finales de 2019.

Al respecto, propone crear una “Coordinación Internacional Anti-Radicales de Izquierda”. Según él, si llega al Palacio de la Moneda “nos coordinaremos con otros gobiernos latinoamericanos para identificar, detener y juzgar agitadores radicalizados”, para lo cual entregará mayores herramientas a Carabineros y Fuerzas Armadas.

En fecha reciente Kast también declaró: “Yo creo que sí, que (Pinochet) votaría por mí si estuviera vivo”.

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CGT llama a los trabajadores del metal de Cádiz a rechazar el ‘vergonzoso’ preacuerdo de CCOO y UGT y seguir movilizándose por sus derechos

 

CGT llama a los trabajadores del metal de Cádiz a rechazar el ‘vergonzoso’ preacuerdo de CCOO y UGT y seguir movilizándose por sus derechos


KAOSENLARED / Por Admin

 

CGT se posiciona en contra del preacuerdo alcanzado en Sevilla, entre la patronal y los sindicatos institucionales, para desconvocar la huelga del Metal en Cádiz por haberse firmado a espaldas de los trabajadores

Los anarcosindicalistas entienden que se ha llegado muy lejos, demostrándose unidad y solidaridad en una lucha ejemplar por la dignidad de la clase trabajadora de una de las zonas más empobrecidas del Estado español


La Federación de Sindicatos del Metal de la Confederación General del Trabajo (FESIM-CGT) ha emitido un comunicado en el que expone su punto de vista tras el preacuerdo que se alcanzó a última hora de ayer en Sevilla para poner fin a la huelga del metal que se está llevando a cabo en Cádiz desde hace diez días. Para los anarcosindicalistas, con este “acuerdo” es la clase trabajadora la que sale perdiendo nuevamente, ya que se va a ver afectado su poder adquisitivo durante los próximos años, siendo precisamente esta una de las demandas que han movilizado a los trabajadores en la última semana de protestas.

FESIM-CGT valora muy negativamente el preacuerdo alcanzado anoche, en el más absoluto de los secretos, entre la patronal y los sindicatos del régimen UGT y CC.OO. Mediante esta acción, a espaldas de los trabajadores, se pretende desconvocar la huelga indefinida que se mantiene en el sector metarlúrgico de Cádiz desde el pasado 19 de noviembre. CGT, en este sentido, aboga por mantener la huelga los días 25 y 26 de noviembre, puesto que es muchísimo lo que está en juego en estos momentos en Cádiz.

Los anarcosindicalistas inciden en que la lucha ejemplar que está teniendo lugar en Cádiz estos días, apoyada y respaldada por toda la clase trabajadora en el Estado español como se ha podido comprobar con la gran cantidad de muestras solidarias desde todos los sectores, no puede ni debe tener un final en el que sus protagonistas –quienes más han arriesgado durante días de dura represión policial- salgan perdiendo con un acuerdo alcanzado con quienes ya tienen bastante experiencia traicionando a la clase obrera. CGT recuerda que la subida salarial está muy por debajo del IPC actual y muy alejada todavía de las pretensiones iniciales. Además, han indicado que esto es una agresión a las trabajadoras y los trabajadores eventuales, que son quienes más sufren las consecuencias de la inestabilidad laboral en este sector.

Desde la CGT lanzan un mensaje directo a las plantillas del sector para que rechacen este preacuerdo vergonzoso y sigan movilizándose de la misma manera que lo estaban haciendo hasta ahora. Para CGT este es el único camino que revertirá esta situación y logrará conseguir unas condiciones laborales dignas a la altura de la lucha que están manteniendo miles de trabajadores en Cádiz.

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La OMC y la identidad oculta de los cuellos de botella: el capitalismo

 

La OMC y la identidad oculta de los cuellos de botella: el capitalismo

 

Por Eduardo Camín 

Rebelion 

25/11/2021 


Fuentes: Rebelión / CLAE


El 10 de noviembre delegados de la Organización Mundial de Comercio (OMC) y representantes del mundo académico y el sector privado mantuvieron un intenso debate sobre las dificultades con que se enfrentan las economías debido al fuerte aumento registrado recientemente en los costos del transporte marítimo.

Las interrupciones operativas, incluidos los importantes cierres de puertos causados por la pandemia de la Covid-19, han ejercido presión sobre los sistemas logísticos, han creado incertidumbre y han aumentado los costos comerciales. Las presiones sobre las cadenas de suministro fueron causadas por el fuerte repunte reciente del comercio mundial y la creciente demanda de bienes de consumo duraderos, incluida la creciente demanda de contenedores de envío de Asia oriental combinada con las restricciones de la pandemia.

El transporte marítimo, que hoy supone el tránsito del 90% de las mercancías que se mueven en el mundo, está en el foco de la actualidad mundial en esta recta final de 2021 y trata de poner nombre a su propia situación de caos. Una onda expansiva que generó un tablero donde las piezas, los barcos y los contenedores, no están donde se necesitan y la actividad en los puertos -principalmente en los de Estados Unidos y China- ha llegado al colapso.

En la oportunidad, la Directora General Ngozi Okonjo-Iweala pidió a los gobiernos y las empresas que «continúen identificando los cuellos de botella de la cadena de suministro e implementando medidas para mitigar su impacto en el comercio» y trabajen para «hacer que las cadenas de suministro mundiales sean más resistentes».

«La pandemia de COVID-19 ha puesto de relieve tanto la vulnerabilidad como la resiliencia de las cadenas de suministro interconectadas. La evidencia durante el último año y medio es que las cadenas de valor globales generalmente se han mantenido bien. Gracias a que los gobiernos han estado en su mayoría limitados en el uso del proteccionismo comercial, las cadenas de suministro pudieron reanudar sus operaciones cuando las economías reabrieron el verano pasado”, señaló.

Destacó, asimismo, que los cuellos de botella de la cadena de suministro «han surgido como un riesgo significativo para la recuperación más amplia de la producción económica y el comercio después de la pandemia».

Los participantes intercambiaron información sobre las limitaciones impuestas por los miembros a la importación y exportación de mercancías debido a las perturbaciones actuales del transporte marítimo y debatieron el papel fundamental que puede desempeñar la OMC para ayudar a fortalecer las cadenas mundiales de suministro.

La aplicación de medidas de facilitación del comercio, la aceleración de la automatización y la digitalización y la apertura del mercado de los servicios de transporte y logística fueron algunos de los elementos citados como útiles.

El ministro de Relaciones Exteriores, Integración Regional y Comercio Internacional de Mauricio, Alan Ganoo, pidió «racionalizar, modernizar y digitalizar los procedimientos comerciales, reducir el contacto físico entre los trabajadores de la industria naviera, enfoques creativos, como la cooperación transnacional entre países y proveedores de servicios de transporte.

«Debemos hacer todo lo que esté a nuestro alcance para reducir los impactos empresariales, especialmente en las pequeñas empresas de todo el mundo», dijo la Directora General Adjunta, Anabel González.

«Es de vital importancia garantizar que todos los países, especialmente los más pobres, puedan reactivar la recuperación económica posterior a la pandemia. Igual de importante es aprender de la Covid para evitar interrupciones similares en el envío en el futuro. Esto significa que debemos pensar en cómo fortalecer la resiliencia de las cadenas de suministro y las políticas necesarias para hacerlo», añadió la funcionaria.

Los oradores señalaron los efectos particularmente agudos del aumento de los costos del transporte marítimo en las perspectivas comerciales y la competitividad de los países en desarrollo, en particular para los pequeños estados insulares, las naciones en desarrollo importadoras netas de alimentos.

«A medida que los cuellos de botella en la cadena de suministro marítimo dificultan que los países en desarrollo aprovechen la demanda del mercado externo, frenarán el crecimiento y la recuperación económica de la pandemia», dijo Okonjo-Iweala.

Una tormenta perfecta

Además, China ha tenido que cerrar instalaciones por nuevos brotes de Covid. Sin dudar que la pandemia haya sido el punto de inflexión, para muchos el origen de esta crisis del comercio marítimo, en vísperas de las fechas de mayor consumo del año (Black Friday, Cyber monday, Día del soltero en China, Navidades…) está, en gran medida, relacionada con lo ocurrido durante la pandemia.

Algunos expertos destacan que 2016 a 2018 había sobrecapacidad, y los precios estaban en una espiral a la baja y se llegó a pagar 1.000 dólares o menos por trasladar un contenedor de Asia, mientras tanto hoy, por ese mismo trayecto se pagan 15.000.

Tampoco se debe olvidar algunos movimientos que se generaron entre las navieras, donde las grandes compañías japonesas se fusionaron y la danesa Maersk compró la alemana Hamburg Süd, generando movimientos de una política oligopólica sostenida por el sistema.

Pero llegó la pandemia y el consumo se hundió. Un parón que pasó por eliminar rotaciones, quitar barcos, no renovar contenedores. Tras el parón, llegó el acelerón de la demanda, sobre todo en Estados Unidos, pero sin que los mimbres de la logística marítima estuviesen preparados para una recuperación tan rápida, aunque desigual.

Nueva extensión, nuevas vulnerabilidades …  viejas contradicciones

Los transportes se han convertido así en uno de los principales factores del modo de producción capitalista, dentro de un proceso dialéctico en el que las posibilidades técnicas permiten una intensa deslocalización, y donde la dimensión de ésta aumenta la rentabilidad. La consecuencia es una permanente huida hacia adelante, hacia el gigantismo y la restructuración del sector, pero también hacia el desarrollo de distintas vulnerabilidades.

Hasta la actual crisis capitalista, en el sector del transporte siempre se tendía a bosquejar un cuadro algo idílico de la puesta en marcha de todo este conjunto de nuevas técnicas asociadas para que el sistema funcionara supuestamente sin fricciones. Y se ignoraban estas vulnerabilidades o se pensaba que si se consideraban a escala mundial, las estrategias del capital podrían paliar lo que consideraban como meros contratiempos  en el camino, confiando precisamente en las ventajas de esta nueva dimensión.

Pero el capitalismo es una eterna guerra interna (a veces también externa), y esta guerra se desarrolla en primer lugar entre diferentes elementos económicos. En esta guerra, las líneas de comunicación, es decir, los transportes considerados en su sentido más amplio, juegan un rol vital.

La presente organización del sistema capitalista ha alargado considerablemente las líneas de comunicación en casi todas las actividades del proceso productivo. Y lo que es más importante, ningún medio de comunicación es fiable en sí mismo, sea cual sea la perfección del instrumento empleado.

Toda herramienta utilizada en los transportes obligatoriamente emplea energía y hombres, lo cual explica en parte su vulnerabilidad; a esto hay que añadir una debilidad que proviene de la irracionalidad del propio capital, que en la concurrencia entre diferentes unidades para la conquista de un determinado mercado multiplica los sistemas de explotación de los medios de transporte y comunicación.

Estos, por tanto, no se estandarizan y a veces son incluso incompatibles, lo cual causa disfunciones. En lo que respecta a los factores humanos, por mínimos que sean en el conjunto del proceso de transporte, por muy desarrollada que esté la automatización, debe intervenir en un momento u otro, y pueden ser causa de la ruptura de una cadena cada vez más extensa, debido a la mundialización.

Nada es estático: si en las últimas décadas esta dinámica se ha acelerado, hoy se ve de nuevo perturbada, sobre todo en lo que respecta a los transportes, a causa de la crisis que afecta tanto al coste de los medios empleados y de la energía necesaria para su funcionamiento, como a las corrientes comerciales debido a las restricciones y las transformaciones en el consumo.

Sin una clara solución a la vista

No hay consenso en cuanto a cuándo terminará esta situación disfuncional en el comercio global. Como sucede con la inflación o con la evolución de las materias primas, algunos expertos consideran que es un tema puntual, que se solucionará con el tiempo; y quienes ven en esta crisis un punto de inflexión que puede, incluso, cambiar el modelo logístico.

Algunos observadores predicen que los márgenes podrían verse presionados si la congestión persiste hasta bien entrado el 2022. Para otros puede que sea una cuestión de esperar a que escampe, pero muchas multinacionales han optado por el camino del medio y cambiar la línea logística tradicional, lanzándose a fletar sus propios barcos.

Amazon, por ejemplo, ya lo hace de forma recurrente y, ahora, otras empresas como Walmart, Ikea o Home Depot, han dado el mismo paso. Coca-Cola trata de esquivar el temporal contratando barcos que hasta ahora se han dedicado al transporte de grano.

Un cambio de modelo, de márgenes y de aumento de costes que tiene y tendrá consecuencias en todos los sectores.

Eterno ausente de los debates, el capitalismo 

Desde que surgió el modo de producción capitalista, el transporte siempre ha jugado este papel, y se puede decir que en la producción mercantil la circulación no es menos importante que la producción misma. Estos agentes de la circulación juegan un papel tanto en el proceso de producción, en el aprovisionamiento regular -a lo largo del proceso- de materias primas, energía y mano de obra (capital variable), como en el transporte de la mercancía hasta los lugares de consumo donde se convierte en dinero.

Por lo tanto, para el capitalista es esencial que esta transformación se haga lo más rápidamente posible, primero para poder financiar la continuidad de la producción y luego también para que el capital reciba la remuneración de la plusvalía. La velocidad del medio de transporte y su fiabilidad son algo esencial, tanto para el retorno del valor que la mercancía porta como para la competencia con otros productores de la misma mercancía.

El producto de la actividad capitalista, la mercancía, tiene que venderse. Esta es una trasformación absolutamente necesaria para que el capitalista recupere no sólo todo el capital que ha invertido, sino también la plusvalía. Venderla significa consumirla mediante su entrada en el proceso de producción – como materia prima o medio técnico de producción-, o bien como producto de consumo que contribuye principalmente a la reproducción de la fuerza de trabajo.

Sea cual sea su destino (compra de materias primas, medios de producción o consumo individual), las mercancías hay que transportarlas, salvo casos concretos en los que se consumen in situ. Esto es condición necesaria para que se transformen en dinero, el cual, por su parte, para volver al bolsillo del capitalista, también hay que transportarlo.

Creemos que los cuellos de botella de la OMC son indicios minimizados, cuando no ridiculizados o explicados de una u otra manera. En realidad la connivencia se sostiene desviando la atención del hecho concreto (la crisis) o reformulando dialécticamente su significado a fin de que resulte aceptable.

A través de estos ejemplos, podemos observar la fuerza que tiene una atención desviada para ocultar una realidad histórica, que no es más que la profunda crisis a todos los niveles del capitalismo. De las vacunas, al comercio mundial pasando por el transporte marítimo los cuellos de botellas se acumulan.

Eduardo Camín. Periodista uruguayo acreditado en la ONU- Ginebra. Analista asociado al Centro Latinoamericano de Análisis Estratégico (CLAE)

Fuente: https://estrategia.la/2021/11/17/la-omc-y-la-identidad-oculta-de-los-cuellos-de-botella-el-capitalismo/

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