Los murciélagos son claves para el control de plagas en la agricultura
tercerainformacion / 23.12.2023
- Científicos de la
Universidad del País Vasco y de la Estación Biológica de Doñana han
estudiado un grupo de murciélagos de cueva (Miniopterus schreibersii) en
la Sierra de San Cristóbal, ubicada en el Puerto de Santa María, en Cádiz.
Esta colonia llega a eliminar unas 60.000 polillas de procesionaria cada
noche durante buena parte de los meses de agosto y septiembre.
Madre y cría de la especie
de murciélago neotropical Saccopteryx bilineata en un dormidero diurno. La cría
está pegada al vientre de la madre. / Michael Stifter
Los murciélagos tienen un importante papel en el
control de las plagas agroforestales. Es lo que han concluido en un nuevo
estudio la Universidad del País Vasco (UPV/EHU) y la Estación Biológica de
Doñana – CSIC, en el que han estudiado la dieta de una colonia de murciélago de
cueva (Miniopterus schreibersii) que se refugia en una cavidad en
la Sierra de San Cristóbal, en el Puerto de Santa María (Cádiz).
Miniopterus schreibersii es
el murciélago cavernícola más gregario de Europa y llega a
formar colonias de hasta algunas decenas de miles de individuos. Además, es una
especie con una importante capacidad de vuelo y su área de campeo puede
extenderse hasta más de 30 km del refugio. La colonia de San Cristóbal en
concreto, a lo largo del periodo de estudio, contó con entre 3000 y algo más de
7000 efectivos. Se sabe que esta colonia llega a cazar al menos con cierta
frecuencia hasta la mitad sur del Parque Nacional de Doñana.
“Esta colonia de gran tamaño puede existir y
mantenerse en una zona tan humanizada por las características de la especie,
que es cazadora aérea de espacios abiertos”, señala Carlos Ibáñez investigador
de la Estación Biológica de Doñana. “Esto significa que no depende del tipo de
sustrato vegetal y además cuenta con gran capacidad de desplazamiento.
Según Ibáñez, “aunque el medio está muy
humanizado, es heterogéneo y ofrece suficientes recursos alternativos a lo
largo del tiempo” Dos tercios de la superficie están destinados a cultivos
agrícolas muy variados, además de áreas urbanizadas. El resto lo forman
manchas de vegetación natural incluyendo espacios protegidos, como el Parque
Natural Bahía de Cádiz y la zona sur del Parque Nacional de Doñana.
El estudio se ha basado en el análisis por
metabarcoding del ADN de los restos de las presas en muestras fecales de
los murciélagos. Como resultado, el equipo científico identificó algo más de
160 especies de artrópodos en la dieta de estos murciélagos, de las cuales 39
eran identificadas como especies plaga.
El grueso de su alimento estaba compuesto por 24
especies, de las cuales 11 eran especies plaga, mayoritariamente polillas que,
en el estado de orugas, afectan a diferentes cultivos y masas forestales
(pinares y encinares o alcornocales). También se encontrabas entre estas
especies, la chinche verde que afecta al algodón y a un buen número de especies
hortofrutícolas.
En la dieta de estos murciélagos se detectaron,
además dos presas que son vectores de patógenos. Una de ellas es el mosquito
común, Culex pipiens, que es vector entre otros del virus de la
fiebre del Nilo, con casos de afección a humanos en la zona. La segunda es
la cigarrilla, Neophilaenus campestris, que es vector de la
bacteria fitopatógena Xylella fastidiosa que está considerada
como una grave amenaza global para la agricultura en Europa.
Consumo de plagas
La composición de la dieta varía a lo largo del
año, ya que existe una sucesión de picos de disponibilidad de las distintas
presas. A su vez los insectos más consumidos están asociados a diferentes
hábitats y cultivos. Esto quiere decir que los murciélagos utilizan para cazar
los diferentes hábitats disponibles y los van variando a lo largo del tiempo.
De esta manera los murciélagos cuando buscan alimento pueden dirigirse a las
sucesivas explosiones poblacionales de plagas que afectan a diferentes cultivos
o bosques.
Tras identificar las especies consumidas por los
murciélagos, el equipo cuantificó el consumo de plagas por la colonia teniendo
en cuenta su ingesta diaria, el tamaño de la colonia y la proporción de cada
especie presa en la dieta en cada momento. En total, entre el 11 de mayo y el
10 de octubre, la colonia había consumido un total de 1.610 kg de insectos
plaga. Más del 90 % corresponden a 10 especies. Para hacerse una idea de lo que
suponían estas cifras, el equipo se centró en el caso concreto de la procesionaria (Thaumetopoea
pityocampa), una plaga conocida típica de los pinares.
En la zona de estudio, el pinar sólo suponía
menos del 3 % de la superficie terrestre utilizada por la colonia. Los pinares
forman mayoritariamente bosquetes pequeños y ocupan incluso jardines de zonas
urbanizadas. Las masas más extensas se encuentran a más de 25 km, por ejemplo,
en el Parque Nacional de Doñana. Por su parte, la procesionaria tiene un solo
ciclo reproductivo al año, lo que implica que sólo están disponibles en un
periodo concreto.
En esta zona, alcanza el máximo de vuelos entre
la segunda mitad de agosto y primera mitad de septiembre. “En estas semanas,
eran la presa principal con gran diferencia, con apariciones en más del 90 % de
las muestras, a pesar de la reducida superficie del pinar”, comenta Carlos
Ibáñez. “En estas fechas la colonia alcanza el tamaño máximo con 7.200
individuos, en parte, debido a la incorporación de los jóvenes que comienzan a
volar de forma independiente a lo largo de julio, pero también a la
incorporación de individuos procedentes de refugios situados más al este”. El
aumento poblacional probablemente estuviera asociado a la abundancia de
polillas de procesionaria.
En estas fechas, en un solo día, se calculó que
la colonia consume hasta 6 kg de procesionaria. Como cada polilla pesa 0,1 g
esto supone unas 60.000 polillas o imagos de procesionaria. En toda la
temporada eliminarían del orden de 173 kg de procesionaria, lo que equivale a
1.730.000 polillas). Como son unas 10.000 ha de pinar, eliminan unos 173
imagos/ha.
Esta colonia está legalmente protegida. M.
schreibersii es una especie Vulnerable (CEEA) y el refugio está en la
Red Natura 2000 como ZEC (ES120030 Cuevas de la Mujer y de las Colmenas). “Sin
embargo, pero esto no asegura su conservación a largo plazo”, afirma el
investigador Carlos Ibáñez. “Entre las amenazas están el posible cambio de uso
del enclave, la protección de las cavidades donde pasa el invierno, como los
complejos Hundidero-Gato y Motillas, con creciente presión de actividades de
turismo activo en su interior y el elevado número de parques eólicos en su área
vital.”
Referencia:
Joxerra Aihartza, Nerea
Vallejo, Miren Aldasoro, Juan L. García‑Mudarra, Urtzi Goiti, Jesús Nogueras,
Carlos Ibáñez.»Aerospace‑foraging bats eat seasonably across varying habitats». Scientific
Reports 2023, 13:19576; Scientific
Reports