lunes, 4 de febrero de 2008

UNA ACTUACION POLITICA DE LA DERECHA ESPAÑOLA (EL PARTIDO POPULAR)

(y 3)

Es lógico pensar que cuando una denuncia anónima es capaz de producir tanto daño y tanto dolor humano, a la misma le debe acompañar algún tipo de putrefacción debidamente pensada y planificada.
Los negocios tiene eso, que a mayor ilicitud y oscuridades (aunque sean legales) mayores mentiras tienen que estar puestas a su disposición, porque de lo contrario no se podrían realizar.
A las arcas públicas no se les puede atracar así como así y tampoco lo puede hacer un simple ladrón de gallinas. La cosa tiene su preparación, y se requiere personal adinerado más que cualificado, por ejemplo, Bancos y hombres como don Abel Matutes, Rajoy, Pizarro, Rato, Zaplana o la propia familia de Esperanza Aguirre, porque ella para sí no recalifica terrenos en Guadalajara, es una mujer que sabe el terreno que pisa, el rústico y el urbano.
Si uno se atiene a lo que dice uno de los que más sabe del asunto este de “malas prácticas” en el hospital Severo Ochoa, como es el propio acusado, médico Luís Montes, se ve bien a las claras que el vehículo putrefacto sobre el que han hecho cabalgar la calumnia que le ha querido colgar, son determinados medios de comunicación adscritos a la derecha política española, incluido el aparato oficial del Estado de El Vaticano, La Iglesia, que han sido sus portavoces y amplificadores:
“Todo lo que había salido en la prensa hasta ahora del Caso Severo Ochoa, aparecía convenientemente “filtrado” a la prensa enemiga, para que nos atacara… Tenemos tres acciones judiciales: En primer lugar, el recurso a mi cese, no porque no me puedan cesar, ya que era un puesto de confianza, sino porque mi cese no está motivado. Teniendo en cuenta que a mí no me cesaron por mala práctica, porque así ha quedado claro, quiero que se aclare el cese, que se motive... Yo no quiero que mientan en mi cese, porque la verdad es que mienten. Quiero que digan que me cesaron por 400 asesinatos ¿o no fue por eso por lo que se apresuraron a destituirme?... Cuando lo firmé, dijeron que era por “cuestiones organizativas”, pero a mí no me cabe ninguna duda de que me cesaron porque trataban de acusarme de 400 asesinatos… nos vamos a querellar por injurias y calumnias contra la Consejería, que está pendiente de la valoración de daños… Tengo muchas ganas de sentar en el banquillo al señor Lamela, por injurias y calumnias, pero tenemos tiempo para hacerlo con calma… Independientemente de todo lo que ya tenemos iniciado, estamos estudiando todo lo que nos han dicho en La Razón, la Cope, etc., lo que dijeron de nosotros y lo que siguen diciendo.“
[1]
O sea, que no estaría de más una buena investigación judicial de policía y Guardia Civil por medio para llevar a la cárcel al autor o autores de la denuncia anónima. Sobre Esperanza Aguirre, no, porque no se sabe si ha sido ella instigadora por pasiva o activa. Sólo intentó ser beneficiaria.
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[1] Luís Montes, médico. Entrevista concedida a Esther Jaén, elplural.com, 02/02/08.