jueves, 22 de junio de 2017

30.000.000.000, TREINTA MIL MILLONES. 30.000.000.000 DE EUROS DE RECORTES SOCIALES PARA HACER RENTABLES UNAS EMPRESAS DE SANGUIJUELOS Y FANANCIAR LAS GUERRAS QUE EL CAPITAL AMERICANO Y SUS SUBORDINADOS NECESITAN PARA SUS NEGOCIOS CONSISTENTES EN SEGUIR ROBÁNDONOS MÁS. YO YA SE QUE ESTO SON RAZONES DE ESTADO Y TOMA ESTADO DE ESTADO DE CORRUPCIÓN MANZÁNICA. PERO A QUE EL GOBIERNO CORRUPTO MANZANERO DE RAJOY SIGUE EN EL PODER PORQUE PSOE Y CIUDADANOS NO HAN QUERIDO ECHARLOS, A QUE SÍ?



FUERZAS ARMADAS / El desarrollo de armas se realiza a expensas de unos recursos públicos con poco beneficio para el empleo

Los planes especiales de armamento (PEAS) se revelan como una chapuza política

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LUIS DÍEZCuarto Poder
 22/6/2017
planes especiales de armamento
Escuadrilla de aviones de combate Eurofighter del ejército español. / SkypWarrior (YouTube)


Los Planes Especiales de Armamento (PEAS), en los que España lleva gastados más de 30.000 millones de euros de dinero público, están llamados a convertirse en uno de los mejores ejemplos históricos de cómo el capital obtiene beneficios sin arriesgar un euro. La investigación y el desarrollo de sistemas de armas, muy útiles para la guerra y bastante inútiles para la defensa de la sociedad, se realiza a expensas de unos recursos públicos con muy poco beneficio para el empleo y el capital propiamente dicho. El modelo de consorcio empresarial de varios países europeos más Turquía resultaría detestable para el padre del liberalismo económico, Adam Smith. El artilugio burocrático-industrial se parece bastante a aquellas sociedades de indias que monopolizaban el comercio con las colonias y les impedían comerciar con terceros países.

Sin embargo, por decisión de los gobiernos implicados, los miles de millones de euros de dinero público destinados a los PEAS no computan como “deuda pública”. He aquí la primera anomalía. El déficit no es un problema para inyectar directamente más de mil millones de euros cada año al complejo militar-industrial. La inversión en sanidad, policía, educación o el pago de las pensiones genera deuda cuando los ingresos fiscales son inferiores al gasto, pero los grandes programas plurianuales de gasto en armamento no se contabilizan o quedan fuera del exceso.

 Los grandes programas de armas datan de finales de los noventa y principios del 2000, bajo los gobiernos de José María Aznar, el presidente que hizo trampas para librarse de la mili y embarcó a España en la guerra de Irak con Bush y Blair. La financiación de los PEAS se realizaba sin que las empresas elegidas arriesgaran un euro de capital inicial. La investigación y el desarrollo del futuro avión europeo de combate EF2000 se realizaba con cargo al presupuestos del Ministerio de Industria. El gobierno adelantaba el dinero publico para financiar la I+D+I al consorcio de empresas de varios países, fabricaban los productos y cuando Defensa los recibía y pagaba, las empresas agrupadas en esas agencias sobrecargadas de siglas, devolvían al Tesoro español la financiación prestada a cero interés.

De este modo, para participar en el diseño y fabricación del cazabombardero EF-2000 y recibir 70 aviones para la Fuerza Aérea, se han realizado y comprometido unos pagos de 10.629,86 millones de euros. Quiere decirse que cada avión cuesta 151,8 millones de euros, una suma que supera el 33% de las estimaciones iniciales, y ello a pesar de que España, que iba a adquirir 84 aparatos, ha renunciado a 14, aunque finalmente serán 12 menos para reponer los dos que se estrellaron. Hasta el momento, la Fuerza Aérea ha recibido 61 aviones y, según el secretario de Estado de Defensa, Agutín Conde, los 9 restantes irán saliendo de las fábricas del consorcio Eurofighter y Eurojet (cada consorcio tiene 4 empresas de cada uno de los cuatro estados participantes) antes de que finalice 2018.

Pero después del enorme gasto en el caza europeo, ahora resulta que para sustituir a los históricos F-18 adquiridos en los años ochenta a Estados Unidos a través del famoso Programa FACA que gestionó el que luego fuera ministro de Defensa con Aznar, Eduardo Serra Rexach, el Gobierno de Mariano Rajoy está evaluando la compra de 70 cazas F-35 Lightning II, Relámpago, fabricados por un consorcio encabezado por la estadounidense Lockheed Martin y con un precio inicial estimado en 6.000 millones de euros. Esto significa que cada unidad costaría 85,7 millones, la mitad menos que el EF2000 y explica el principal cometido de Pedro Morenés, antecesor de la actual ministra de Defensa, María Dolores de Cospedal, como embajador en Washington. Después de todo Morenés sigue siendo un hombre de la industria armamentista.

La desarrollo de adquisición del F-35, un avión de los denominados invisibles, ha estado plagado de problemas y sobrecostes desde su mismo inicio, hasta el punto de que el presidente Donald Trump prometió que cancelaría el proyecto. El aparato, de despegue y aterrizaje vertical, apenas puede llevar carga bélica cuando opera en este modo, lo que le priva de la versatilidad del Harrier: operar desde cualquier punto. Además, es un auténtico hierro volante, incapaz de enfrentarse a ningún otro aparato en combate aéreo. También se descubrió que el cañón interno que debía equipar al avión, literalmente no cabe y, para colmo de males, parece que los rusos ya han desarrollado radares capaces de detectar al F-35. En Estados Unidos Boeing trabaja a marchas forzadas para producir versiones actualizadas de los F-18, como ya hizo con los F-15, que puedan suplementar o sustituir al muy deficiente F-35.

Las averías del programa A400 para el avión de transporte europeo también resultan sonadas y costosas. El avión de carga posee capacidad para 40 toneladas y el diseño (o copia) de las capacidades logísticas y tácticas ha retrasado el programa por más de cuatro años. Resulta insólito que el avión llamado a sustituir a los Hércules tenga retrasos por no haber conseguido sistemas militares básicos como el lanzamiento de cargas y de personal, la autodefensa (DASS) y por haber registrado fallos con los motores y los equipos de aviónica. Los británicos han obligado a las fábricas españolas a equipar mejor sus dos primeros aparatos.

Por si fuera poco, España iba a pagar 4.333,52 millones de euros por 27 aviones, pero el coste se ha incrementado hasta 5.019 millones mientras el pedido se ha reducido a 14 aparatos. Esto significa que cada avión costará 358,5 millones, casi el doble de los 160,4 millones estimados incialmente. Además los aviones serán entregados al Ejército del Aire con capacidades por debajo de lo contratado al menos durante los dos primeros años después de la puesta en servicio. Pero no hay que preocuparse porque la industria realizará los retrofit para alcanzar la configuración final sin ningún coste suplementario, según el compromiso adquirido.

No termina aquí la sucesión de endiabladas chapuzas disfrazadas con siglas burocráticas, ya que similar fenómeno se ha registrado en la adquisición y montaje de los helicópteros Tigre. A los retrasos y fuertes variaciones a la baja hay que añadir en este caso el salto de 1.353,5 millones a 1.515 para contar con 18 de esos aparatos de combate, y eso después de haber renunciado a la adaptación de 6 comprometidos en el contrato inicial con Eurocopter TIGER (ECT) para la célula  y con el consorcio MTR (MTU/Turbomeca/Rolls Royce) para el motor.

Como es sabido, el pago de los PEAS por parte de Defensa se arbitró mediante créditos extraordinarios por real decreto. De ese modo quedaban fuera de la discusión del Presupuesto anual, a pesar de que los desembolsos eran conocidos y estaban programados. Zapatero suspendió los pagos de Defensa no aprobando los decretos en 2010 y 2011, los peores años de la crisis. Pero inmediatamente Rajoy ordenó el pago y firmó los decretos de su ministro Morenés hasta que el Tribunal Constitucional ha sentenciado que esos recursos, perfectamente previsibles, han de integrarse en el Presupuesto ordinario. La anualidad de 2016 y de este año supera los 1.800 millones de euros.

Luego ya, según los últimos informes del Tribunal de Cuentas, los cuarteles generales penalizan a los ingenieros y expertos militares que optan por adscribirse a las oficinas de gestión y control de los PEAS, con destino en Alemania, Francia, Bélgica o en nuestro país. Su condición militar queda en suspenso, “al mismo nivel valorativo, por ejemplo, de quien se encuentra suspendido de empleo por ejecución de sentencia firme, o incluso en una condición peor que quienes se encuentran en servicio activo sin destino, por ejemplo, por falta de idoneidad, por imposición de una sanción disciplinaria y de una condena”.

Esta paradoja impide, por ejemplo, que se cubran las plazas de especialistas con personal militar, de modo que en 2015 sólo una de las tres plazas para cubrir las pruebas de los helicópteros Tigre estaba cubierta. Los controles de gestión e ingeniería son realizados o subcontratados por la empresa ISDEFE, que recibe encomiendas de gestión de Defensa por más de 80 millones de euros anuales. Esta entidad, en la que prestan servicio un millar de ingenieros y especialistas, está presidida por el secretario de Estado de Defensa, en este caso, el exalcalde de Toledo y exconsejero de Red Eléctrica, Conde. Su puesto en ese consejo fue cubierto por el exdirector de la Guardia Civil, otro histórico del PP, Arsenio Fernández de Mesa.

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TRABAJO PRECARIO + NUEVAS FÓRMULAS PARA PRECARIZAR Y NORMALIZAR MÁS TRABAJO PRECARIO. MU GUENA TU RECUPERATIVA ECONÓMICA, MU GUENA, MARIANO. VALES UN VALER


Que el aparato del PP, presente y pasado (no los votantes del PP ni todos los concejales de los pueblos del PP ni todos los cargos públicos del PP) es una banda de desmemoriados tipo infanta es más que evidente.

Que ese tal aparato es una banda de delincuentes organizada (martillazo arriba martillazo abajo sobre los discos duros del ordenador) no es que lo digan los tribunales, es que lo digo hasta yo.

Podemos nosotros, porque somos libres (y oiga, no me haga reír con eso de la libertad, que la cosa es seria y me puedo  enfurruscar y que de pronto me lío a echarle vivas al Rey, a la escuadra rojilla y a María Santísimo y me quedo tan Pancho. Qué, es o no?) liarnos a determinar que fue primero si el pelillo suelto del moño de Iglesias o la rueda de repuesto de mi furgoneta que es la que menos vueltas da en una curva a la izquierda, y mientras tanto, Rajoy, que no se olvide, sigue en el gobierno porque ni PSOE ni Ciudadanos los han querido echar por corrupto-corruptis-corruptis, sigue con su política de creación de empleo precario más precario y un poquitín más de precario, para nivelar hasta llegar a la nivelación final de todos los trabajadores en precario. Les dejo ahora porque tengo que seguir dándole vueltas a mi rueda de repuesto, a ver a ver...
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Economía colaborativa o ruptura de los derechos laborales     


Vicente Mora González / Inspector de trabajo y Seguridad Social
Sociología Crítica
19.06.2017

La llamada “economía colaborativa” ha venido para quedarse. Bajo una atractiva y engañosa denominación parece instaurarse un supuesto nuevo modo de relación productiva y laboral, que nos liberará por fin de las ataduras y esclavitudes del paradigma clásico del trabajo asalariado. Ya no queremos ser obreros y tener un contrato de trabajo con una jornada y un jefe como nuestros ancestros. Leemos en las páginas Web de estas plataformas como se avecina un paraíso laboral bajo una envoltura idílica: “Trabaja como freelance con total libertad. Tú escoges cuándo te conectas y qué pedidos aceptas.”; “Te ofrece la forma más divertida de trabajar y compartir tu tiempo con otras personas”; “La flexibilidad del servicio que ofrecemos permite tener más libertad y facilidad para generar ingresos durante su tiempo libre”.

Se trata de servicios cada vez más diversos: transporte de personas y mercancías, tareas de limpieza en domicilios, cuidados de personas dependientes…Pronto puede extenderse a cualquier servicio a empresas y particulares, dejando atrás también al viejo modelo de subcontratación de servicios, pues se basa en los avances acelerados en las tecnologías de la sociedad de la información, que, a través de un smartphone, convierte en inmediata la satisfacción de cualquier demanda.

Pero, ¿cual es la realidad de las personas que trabajan en estas plataformas? El “colaborador” de las mismas, por ejemplo el que vemos surcar nuestras calles sobre una bicicleta, portando a su espalda una gran caja con alimentos, ha suscrito con la empresa el compromiso de atender, en principio de forma voluntaria, las demandas de los clientes, percibiendo a cambio una tarifa por servicio realizado. Para ello, debe inscribirse en la Web de la plataforma y comprometerse a poner a disposición un vehículo propio (bici, moto o coche), un móvil, darse de alta como autónomo en Hacienda y Seguridad Social, ingresar trimestralmente el IVA y responsabilizarse del pago de las cuotas a Seguridad Social como trabajador por cuenta propia. Casi nada. La voluntariedad y flexibilidad horaria que se predica queda en entredicho, desde el momento que las plataformas comienzan a establecer penalizaciones (que por supuesto no se incluyen en las sugestivas paginas Web) en caso de un número determinado de rechazos a atender los servicios, hasta llegar a la expulsión del “colaborador”. Obviamente, este régimen de adscripción individual hace imposible el ejercicio de los derechos sindicales y la negociación colectiva, reduciendo a la nada cualquier poder de presión para mejorar las condiciones de trabajo o retributivas. Por supuesto la “plataforma” no se responsabiliza de la seguridad y salud del trabajador.

Pagar las cuotas a Seguridad Social como autónomo supone un esfuerzo para el “colaborador” (267 euros al mes, aunque en los primeros 18 meses se reduzca a una cantidad entre 50 y 187 euros, debido a las medidas aprobadas por el Gobierno en 2013) A lo que debe añadirse quizás pagar una gestoría para tramitar el IVA, y desde luego mantener a punto el vehículo etc. En muchos casos, una vez finalizada la tarifa plana de la cuota a Seguridad Social, resulta difícilmente sostenible, salvo que se trabajen muchas horas y quizás para varias plataformas, poniendo en riesgo la salud y desde luego suprimiendo el tiempo libre que supuestamente se llena con estas “colaboraciones”

Parecería que estas ofertas van dirigidas a canalizar los deseos de personas que no saben a que dedicar su ocio, tiempo libre y coche o bicicleta. Nada más fuera de la realidad. Una cosa es poner a disposición un bien infrautilizado y otra que ese bien sea el tiempo de una persona. No es el ocio lo que una persona pone a la venta sino un trabajo, medible en tiempo y precio. Y se hace para obtener medios de subsistencia, lo que solo puede lograr trabajando día y noche. Es sabido que el capitalismo aspira a dominar y rentabilizar todos los ámbitos de nuestra vida, por supuesto también nuestro ocio. Ahora sabemos que la mejor manera de apropiarse de nuestro tiempo libre es transformándolo en trabajo, por supuesto a cambio de una remuneración “low cost”.

El trabajo por cuenta ajena tiene una definición bien precisa en el Estatuto de los Trabajadores. Es trabajador aquel que “voluntariamente preste sus servicios retribuidos por cuenta ajena y dentro del ámbito de organización y dirección de otra persona, física o jurídica, denominada empleador o empresario”. Los Tribunales han dicho que lo que define a un trabajador no es disponer un horario más o menos flexible, incluso no tenerlo, ni tampoco es la autonomía en la ejecución del mismos. Lo que jurídicamente convierte una prestación de servicio en laboral es, además de su naturaleza personal, voluntaria y retribuida (no gratuita), la concurrencia de dos elementos, que suelen estar interconectados entre sí. El primero es la “ajenidad” de frutos y riesgos. Es decir, la apropiación por un tercero del resultado del trabajo efectuado por el empleado. El segundo es la “dependencia”, es decir trabajar bajo el ámbito de organización y dirección del empresario, en definitiva que el que trabaja esté controlado por aquel para el que trabaja.

El trabajo para plataformas de la llamada “economía colaborativa” encubre falsos autónomos y es otra forma de precarización extrema del mercado de trabajo. La respuesta sindical e institucional, a través de la Inspección de Trabajo, es escasa, en parte porque de momento no se denuncian estas situaciones. Pero también debe saberse que ni el Ministerio de Empleo y Social ni las autoridades laborales de las comunidades autónomas han programado campañas específicas para atajar estas irregularidades. ¿A qué esperan? Espero que no se trate de ganar tiempo para, tras crearse una “burbuja”, legalizar estas situaciones, incrementando el abuso y la precarización laboral.

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!OJÚ QUE CALÓ¡ EL PRIMO DE RAJOY QUE ES FAMILIA DE RAJOY NO SABE SI MAÑANA LLOVERÁ EN SEVILLA (cuando todos sabemos que mañana no lloverá en Sevilla) Y MUCHACHADA DEL PROGRAMA DE HERRERA CARLOS DE LA CADENA COPE DICEN QUE LO DEL CAMBIO CLÍMATÍCO ES UN CUENTO DE ROJOS, Y LO QUE ES UNA BENDICIÓN DIVINA (esto lo digo yo solito, sin inspiración divida) PARA EL CAMBIO CLIMÁTICO SON LAS PRUEBAS NUCLEARES Y LAS TONELADAS DE BOMBAS QUE SE TIRAN TODOS LOS DIAS PARA MATAR MOSQUITOS (porque para matar personas no será, porque Dios prohibe matar así como bombear) Y LOS CRUCERAZOS QUE PASAN POR EL GUADALQUIVIR, GUAY BUENO QUE TE CAGAS MEDIOAMBIENTAL, TÍO



En el aeropuerto los aviones no pueden despegar debido al calor   
      








Vuelos de American Airlines han sido cancelados por las altas temperaturas© Image LaVanguardia.com Vuelos de American Airlines han sido cancelados por las altas temperaturas

Las temperaturas están alcazando récords históricos en diferentes ciudades, generando impacto en el día a día de sus ciudadanos. Este calor extremo ha afectado hasta a algunos vuelos, impidiendo viajar a los pasajeros. American Airlines, por ejemplo, canceló alrededor de 40 vuelos que debían despegar el pasado martes del aeropuerto internacional Sky Harbor de Phoenix (Estados Unidos), ya que los máximos en la zona superaron las temperaturas de operación de los aviones más pequeños de la compañía.

La aerolínea explicó que su Bombardier CRJ, que utiliza para los vuelos regionales de ‘American Eagle’, no puede despegar con una temperatura superior a 47,7 grados centígrados y ayer se llegó a 48,8. La compañía aérea también canceló siete vuelos el lunes por el mismo motivo. 

Si las temperaturas fueran mucho más altas, American Airlines tendría que aumentar su número de cancelaciones. Sus aviones Boeing de largo recorrido no pueden volar en temperaturas superiores a los 52,2 grados centígrados, y sus aviones Airbus no pueden hacerlo a partir de los 52,7 grados.

Patrick Smith, piloto de la línea aérea, explicó el fenómeno a Business Insider en 2013: “El aire caliente es menos denso. Esto afecta la potencia de salida de los motores, así como las capacidades aerodinámicas, aumentando la distancia requerida en la pista y reduciendo el rendimiento en el ascenso. Por lo tanto, la cantidad de pasajeros y carga que un avión puede transportar se restringe a menudo cuando las temperaturas son muy altas”. 

La compañía American Airlines tendría que cancelar más vuelos si las temperaturas siguen subiendo© Proporcionado por La Vanguardia Ediciones, S.L. La compañía American Airlines tendría que cancelar más vuelos si las temperaturas siguen subiendo

Las olas de calor están íntimamente ligadas al cambio climático. La última ola de calor afectará una área que abarca desde el norte de California hasta el oeste de Texas, una región donde se encuentran siete de las diez ciudades de mayor calentamiento del país.

El clima extremo tiene el potencial de poner en peligro la vida y se prevé que se alcancen récords históricos. El Servicio Meteorológico Nacional ha emitido una advertencia de calor excesivo y desde su oficina en Phoenix han afirmado que “el calor de esta magnitud es raro, peligroso y muy posiblemente mortal”.

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