jueves, 27 de junio de 2019

ES CLARO. HAY SINDICALISTAS Y PROCONSULES, VERSUS PROCCONSULAS QUE VIVEN Y SE DESPATARRAN COMIENDO Y BEBIENDO A COSTA DEL SINDICALISMO. EL CONSENSO BIEN, EL ACUERDO CONTRA LOS TRABAJADORES Y A ESPALDAS DE LOS TRABAJADORES, BIEN. DOS DE CALAMARES CON MEDIO LITRO DE VINO PELEÓN, TETICA MONJA. PERO LO QUE HAY QUE HACER EN LOS 4 AÑOS QUE QUEDAN HASTA LAS PRÓXIMAS ELECCIONES ES ORGANIZAR EL MOVIMIENTO SINDICAL DESDE ABAJO ABAJITO, SIN FIGURANTES Y SIN FIGURANTAS


El amor al servicio de la justicia social
CARLES NAVALES
La Factoría
16.06.2010

Maurice Thorez (1900-1964) fue secretario general del Partido Comunista Francés desde 1930 hasta su muerte 34 años más tarde; Jeannette Thorez-Vermeersch (1910-2001) fue elegida y formó parte de la Asamblea Nacional de Francia, primero, y del Senado, después, de 1945 a 1968. “Maurice et Jeannette”, ensayo escrito por Annette Wieviorka (Fayard, 2010), da más alimento a la admiración que, de un tiempo a esta parte, las nuevas generaciones francesas tienen hacia ilustres parejas, tales como Aragón y Elsa, Jean-Paul y Simone o Maurice y Jeannette: el amor al servicio de la literatura, de la filosofía, de la política.

 Foto: Unsplash.

 En España, grandes binomios también los hay, uno de ellos el que durante tantísimos años fue divisa del sindicalismo catalán y, quizá como pocos, representación y símbolo vivo del amor al servicio de la justicia social: Carme Giménez y Ángel Rozas.

Nuestro homenaje a una persona por muchos desconocida: Carme Giménez Tonietti, compañera de Ángel Rozas. Ella nació en Barcelona el año 1919 y nos dejó en septiembre de 2002.

Carme vino al mundo en el barrio de Gràcia. Su padre, un convencido anarquista de los años treinta; pero ella, por esas fechas,  se hizo de las JSUC (Juventudes Socialistas Unificadas de Catalunya). Y, a partir de 1939, se incorporó a un PSUC en proceso de reconstrucción.

Su actividad militante consistía en visitar y ofrecer solidaridad a los presos políticos y a sus familias. Formó parte del grupo de mujeres que dedicaron muchos esfuerzos para poder hacer llegar un paquete de ropa, de comida, el calor de una carta… a los presos, o, simplemente poder visitarlos y hablar con ellos.

Al iniciarse la década de los años sesenta, tuvo vinculación con los grupos de trabajadores que constituyeron aquellas comisiones obreras primigenias, que representaron, para el Régimen del General, una especie de OSNI ("objeto sindical no identificado"), lo que sumó a su actividad en la red de solidaridad con los presos.

Fue torturada en las comisarías franquistas, donde era conocida como "La Italiana". Es entonces cuando ella y Ángel se casan, yendo de viaje de bodas a Burgos para hacer una visita a los compañeros que estaban en aquel Penal.

Con el estado de excepción de 1969, Ángel tuvo que marchar a Francia, ya que tenía varias causas pendientes en el Tribunal de Orden Público (TOP) y su baja estatura lo hacía fácilmente identificable: "Para pasar desapercibido me cambio la raya de sitio, y ya está", dijo él; su sentido del humor merecería un libro de esos que se tienen en pie por sí mismos.

Carme, marcha poco después, y pasaron ocho años en París en un ambiente de máxima austeridad. Allá los dos participaron, con Carlos Elvira y Pedro Cristóbal, en la creación de una especie de embajada oficiosa de ese movimiento de los trabajadores denominado Comisiones Obreras: aquello era la Delegación Exterior de CC.OO. de España.

Volvieron en 1977, tras negarles muchas veces el pasaporte. A partir de entonces continuaron su actividad en CC.OO. de Catalunya, y también en el PSUC e Iniciativa.

Ángel y Carme siempre fueron “el amigo de todos”, de todos los sindicalistas de la lucha contra la dictadura y de los de las nuevas generaciones, lo que les hacía merecedores (¡qué privilegio!) de su arroz con leche: era insuperable y su humanidad todavía más.

Cuando estallan las absurdas polémicas sobre las banderas uno piensa que los verdaderos símbolos son las personas que han creído honestamente en los ideales de la libertad, la igualdad y la fraternidad, por eso, en días cómo hoy, afirmo que mi única bandera son esas gentes sencillas como Carme y Ángel, que siempre nos harán tener presente que el combate por la justicia social es la mejor bandera a enarbolar. ¡Ojalá estuviéramos construyendo Europa desde los valores en vez de desde los nacionalismos!


Carles Navales (1952-2011).
16 de junio de 2010

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GUAIDÓ, RICO, CRIMINAL Y PRESIDENTE TITIRITÍ DE VENEZUELA YA NO VALE, ASÍ QUE LOS FOCO COMUNISTAS DEL CAPITAL (Que no se me alborote nadie, comunistas porque forman parte de la comunidad focal del capitalismo) DECIDEN FABRICAR NUEVOS CRIMINALES CON LA MISMA INTENCIÓN DE MATAR VENEZOLANOS. NO SE SABE QUE PIENSA AL RESPECTO UN EURO PARLAMENTARIO DEL PP QUE FORMA PARTE DE LA FOCAL CAPITALISTA DE VENEZUELA REPRESENTANTE DEL PUEBLO ESPAÑOL



Venezuela desmantela un nuevo golpe de Estado

Tercerainformación / 27/06/2019 

El Gobierno de Venezuela desmanteló un plan militar para dar un golpe de Estado, liberar al general Raúl Isaías Baduel, detenido desde 2009, y proclamarlo como presidente, informó el ministro de Comunicación, Jorge Rodríguez.


"El primer teniente Carlos Lozada Saavedra, alias Tío (…), lo reclutan para realizar las actividades de asalto al parque de armas del batallón Bolívar, del batallón Ayala, la toma de la Base Militar Francisco de Miranda, en La Carlota, sacar del Sebin [Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional] a Baduel y llevarlo (…) hasta las instalaciones de Venezolana de Televisión y desde allí proclamar a Raúl Baduel, presidente de Venezuela", indicó el funcionario desde el Palacio de Miraflores (sede de Gobierno).

El ministro, también vicepresidente de Comunicación Cultura y Turismo, mostró un vídeo con la confesión del primer teniente en la que este asegura que el plan de golpe de Estado militar se estaba ejecutando con el presunto respaldo de militares israelíes y estadounidenses.

El plan, expuso Rodríguez, era asesinar al presidente Nicolás Maduro, a su esposa Cilia Flores, al presidente de la Asamblea Nacional Constituyente, Diosdado Cabello.

Además, del secuestro del comisario Freddy Bernal, del director del Sebin, Gustavo González López, y del ministro de Interior Justicia y Paz, Néstor Reverol.

"El grupo denominado Ulises, tenía la responsabilidad de la captura del general en jefe, Gustavo González López, director del SEBIN [Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional], y prestar seguridad a Lander", informó, y detalló que "Lander también es un seudónimo que utiliza el señor Juan Guaidó".

En cuanto al grupo de nominado Lander, destacó que tenía como función detener a Reverol, tomar la Dirección General de Contrainteligencia Militar (DGCIM) y "tumbar a Guaidó", quien se ha autoproclamado como presidente interino de Venezuela, para que posteriormente Baduel se proclamara jefe del movimiento.

Además, detalló que estos grupos querían tomar la bóveda del Banco Central de Venezuela, para robar los fusiles que están allí bajo resguardo, para luego tomar el Palacio de Miraflores.

"La idea era tomar la bóveda del Banco Central de Venezuela, allí robarse 146 fusiles que son para el resguardo, que pertenecen a todos los venezolanos, en el Banco Central de Venezuela, robar las unidades blindadas y con eso marchar a Miraflores y La Carlota para toda la acción de desestabilización", afirmó.

Rodríguez explicó que detrás de este plan estaba el general retirado Eduardo José Baez Torrealba, quien se encuentra refugiado en República Dominicana, y adelantó que el Gobierno de Venezuela solicitará su captura a través de Interpol, por lo que emplazó a las autoridades de esa nación a entregarlo.

De igual forma, explicó que había un plan de comisarios del Cuerpo de Investigaciones, Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc), para asesinar al 95% de los generales de las Fuerzas Armadas y a líderes sociales del chavismo, y aseguró que hay cuatro personas detenidas por este caso y al menos 6 solicitadas, la mayoría militares.

El intento de golpe de Estado estaba previsto que se ejecutara entre el 23 y 24 de este mes, pero logró desmantelarse antes, puesto que, desde hace 14 meses, sus involucrados estaban siendo investigados e incluso, expuso Rodríguez, lograron infiltrarlos.

En ese tiempo, señaló el ministro, se obtuvieron 56 horas de videos conferencias, en las que presuntamente participan militares e incluso el propio diputado opositora, Juan Guaidó y uno de los hijos de Baduel.

Este intento de golpe de Estado, destacó el ministro de Comunicación, y el del pasado 30 de abril, involucran a los gobiernos de Panamá, Chile, Colombia y Estados Unidos, estos últimos tres como promotores y financistas.

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SIN EL MARXISMO LA HUMANIDAD ESTÁ MÁS PERDIDA QUE UN SUBMARINO EN UN BARBECHO (4 AÑITOS, HASTA LAS PRÓXIMAS ELECCIONES, UNA OPORTUNIDAD PARA QUE LOS NIÑITAS Y LAS NIÑITOS DE LA IZQUIERDA DE DIRECCIÓN APRENDAN QUÉ ES Y PARA QUÉ SIRVE EL MARXISMO)



Marta Harnecker y el marxismo como saber popular
 
 

27.06.2019

Decía en un posteo anterior que en los sesentas el auge de los movimientos guerrilleros tuvo como efecto secundario -en algunos sectores de la izquierda- un cierto relegamiento de la importancia de la teoría como “guía para la acción”, tal como Lenin lo señalara en innumerables ocasiones. En algunos casos hasta se podría hablar de un sesgo “anti-teórico”, actitud asociada en no pocos casos con un culto al espontaneísmo y en la creencia de que en la lucha de clases lo esencial era la abnegación militante y mucho menos la reflexión teórica.

El famoso dictum de Lenin: “sin teoría revolucionaria no hay praxis revolucionaria” había caído en el olvido. Sin duda que las urgencias de la lucha armada conspiraban contra la serenidad necesaria para enfrascarse en las complejidades teóricas de El Capital o los Cuadernos Filosóficos de Lenin, para no citar sino un par de ejemplos. Pero no era eso lo que había ocurrido en Sierra Maestra, donde Fidel, Raúl y el Che no dejaban de aprovechar cada respiro de la guerra para desarrollar su formación teórica. Y tanto en el Congo como en Bolivia la mochila del Che estaba cargada con muchos libros y notas sobre autores tan diversos como Wright Mills, Rosa Luxemburgo, Lenin, Trotski, Stalin, Borkenau, Mao, Lukacs, Marx, Engels, Fidel y tantos otros. De ahí la enorme importancia de la labor de Marta Harnecker que con sus obras e intervenciones periodísticas rescató la importancia esencial de la teoría marxista en las prácticas concretas de las luchas populares, en todas sus formas, pacíficas o no. 
 
Por supuesto que esta labor de divulgación, imprescindible y que hoy día necesitamos con renovada urgencia, suscitó reacciones no siempre amables o razonables en algunos sectores de la intelligentzia marxista –en Chile así como en el resto del continente- que le reprochaban por su “vulgarización” del marxismo. Para estos intelectuales elitistas, nutridos y encerrados en el asfixiante mundillo académico, lo de Marta era casi una herejía. Porque la teoría y sus instrumentos para entender y cambiar el mundo se suponía que reposaban en las sabias manos de una vanguardia iluminada que desde los claustros universitarios convocaba al pueblo a una revolución que nunca llegaba puntualmente a la cita. Por eso ella comprendió de inmediato el significado histórico-universal, al decir de Hegel, de la Revolución Cubana, cuando muchos intelectuales e inclusive partidos de izquierda la veían con profunda desconfianza cuando no la calificaban de aventurerismo pequeño-burbgués. 

Revolucionaria comunista, y por ende anticapitalista, comprendió de inmediato que las revoluciones son procesos, y supo ver en la Unidad Popular de Salvador Allende las semillas de una revolución sumida en un laborioso trabajo de parto mientras algunos de los “marxólogos” abominaban de ese gobierno por “reformista” pese a la expropiación de las empresas norteamericanas de la gran minería del cobre, la estatización del sistema bancario y la reforma agraria y, por supuesto, la abierta agresión del gobierno de Estados Unidos que para aquellos era apenas una nimiedad. Por ser expresión de ese marxismo abierto y vibrante Marta fue de las primeras en Nuestra América en entender al proceso revolucionario encarnado en Hugo Chávez Frías, que una vez más desafiaba los dogmas establecidos por los “doctores de la revolución”, capaces de pontificar durante miles de páginas sobre el tema pero sin jamás haber logrado dar nacimiento a ninguna. 

¿Eran todas éstas sólo divergencias teóricas o políticas? En parte. Pero había también un componente de otro tipo. La profunda envidia que suscitaba el hecho de que su libro Los Conceptos Elementales del Materialismo Histórico se vendiese como pan caliente por todo el continente. Una primera edición de Siglo Veintiuno México salió en 1968, con una tirada de mil ejemplares. La tercera, de 1970, ya era de cuatro mil. En 1971 aparece ya una sexta edición “revisada y ampliada” por la autora. 

En 1976, instaladas las feroces dictaduras en casi toda la región, su libro alcanza a una exorbitante 35ª edición con una tirada de treinta mil ejemplares. Y así sucesivamente., con nuevas ediciones hasta el día de hoy. ¿Cómo puede ser que un texto marxista se convierta en un best seller sin precedentes, se preguntaban indignados y carcomidos por la envidia los custodios del dogma, cuyas obras circulaban entre unos pocos cientos de adeptos? La respuesta era sencilla: porque el libro de Marta se ajustaba como un anillo al dedo a las necesidades ideológicas y teóricas suscitadas primero por la intensa movilización popular de los sesentas y el cambio en la correlación de fuerzas predominante desde finales de la Segunda Guerra Mundial en Nuestra América; y después por la necesidad de encarar una lucha contra las dictaduras instauradas en los setentas. Y además porque lo hacía en un lenguaje llano, didáctico, comprensible para las masas, exento de cualquier barroquismo o pretensión culterana o academicista. 

La producción de un intelectual marxista era, como debe ser también hoy, un arma de combate, una AK-47 en la “batalla de ideas”, un componente crucial de esa “artillería del pensamiento” que reclamaban Fidel y más tarde Chávez. Rabiosos, los cultores de ese “doctrinarismo pedante” que con tanta fuerza fustigara Antonio Gramsci pretendieron ningunear a Marta, o acusarla, al popularizarlo, de desfigurar al marxismo que aquellos supuestamente sí comprendían tal como lo mandaba el canon interpretativo dominante. Hoy nadie se acuerda de ellos. No dejaron ninguna obra, ningún legado que permita elevar el estado de consciencia de las masas, ninguna arma para librar en mejores condiciones la batalla de ideas. Sencillamente se esfumaron, y con ellos también lo hicieron sus diatribas y sus insidias. 

Marta, en cambio nos dejó un legado inmenso que, ahora que ella ya no está entre nosotros, será preciso evitar que caiga en el olvido. Sería un error imperdonable y costoso para las luchas emancipatorias de nuestros pueblos. Su labor como educadora y como concientizadora de masas no puede interrumpirse con su partida. Es imprescindible e impostergable garantizar la continuidad de su magisterio revolucionario. 
 
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