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Son los haitianos la solución
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Juan Guiliani
Cury
Listin diario
/RD
11.08.2022
Muchas gentes
opinan en este país que la solución a los graves problemas de estabilidad
política y social de Haití pudiera radicar en la comunidad internacional o con
la intervención de determinadas potencias, valga decir, Estados Unidos,
Francia, Reino Unido, Canadá o la Unión Europea. Desde que se produjo el
asesinato del presidente Jovenel Moise el 7 de julio de 2021, los problemas
políticos del vecino país tendieron a incrementarse y salirse de control.
¿Porqué? Moise quien terminaba su mandato en febrero de este año, había
presentado como solución a la problemática haitiana, varias reformas a la
constitución de 1987 entre la que citamos algunas de las medidas propuestas por
el gobernante fallecido: disolver el Senado haitiano y establecer un
sistema parlamentario unicameral; permitir que la diáspora haitiana ejerciera
el mismo derecho al voto que sus connacionales en la isla; introducir
importantes reformas económicas; y sociales; quitar el poder y los
privilegios de la elite política, sindical y empresarial del
país; modernizar el aparato burocrático, entre otros objetivos. El referendo
constitucional debería celebrarse el mismo año de las elecciones generales. Las
reformas políticas iban a permitir un cambio sustancial en la gobernabilidad
del atribulado pueblo haitiano. Entendía el malogrado presidente, que con
el actual modelo político era imposible estabilizar el país. Moise ganó las
elecciones del 2016 con el 56% de los votos, en segunda vuelta. El asesinado
líder tenía el respaldo de Estados Unidos y la Organización de Estados
Americanos (OEA) para impulsar las reformas constitucionales. Reemplazaba a
Michel Martelly (2011-2016) Hasta ahora no se ha determinado la responsabilidad
de los autores de la muerte de Jovenel. Solo se sabe de un comando colombiano
que supuestamente ejecutó la operación contra el mandatario. Con la muerte de
Jovenel Moise, se abrió una caja de pandora para la gobernabilidad de Haití. Ya
Haití no goza de la presencia del cuerpo multinacional de Naciones Unidas,
Minustah. El país tampoco cuenta con un ejército ni una policía bien equipada
para enfrentar el actual clima de violencia que azota esa parte oeste de esta
isla. Sólo lo haitianos pueden resolver sus problemas de gobernabilidad. Varios
autores de libros como, Philippe Girard, el chileno Pedro Durán de la Fuente y
otros tratadistas así concuerdan. En nuestro próximo artículo, comentaremos
algo más de la historia convulsa de Haití.
II de II
La semana pasada dije que iba a dar breves detalles de la historia convulsa de
Haití a través de cinco siglos. Haití fue el primer país en el mundo de raza
negra de liberarse de la esclavitud y la segunda colonia en el hemisferio
occidental en emanciparse después de Estados Unidos. Haití obtuvo su
independencia el 1 de enero de 1804. En el año de 1697 la parte
oeste de la llamada isla de la Hispaniola o Española, fue cedida por Francia a
España, naciones europeas que permanecieron dominando este territorio caribeño
por varios siglos. El territorio haitiano ha sido invadido en tres ocasiones
por Estados Unidos, en 1915, 1994 y en 2004. Sin embargo, no ha sido Estados
Unidos, como algunos historiadores han querido atribuirle a esta potencia del
norte, los males y vicisitudes que ha sufrido el vecino estado. Son estas
opiniones interesadas, falsas premisas. La historia sí habla que, en el ámbito
de la guerra civil americana, la antigua colonia francesa contribuyó con ayuda
económica y militarmente a Estados Unidos. La liberación contra la esclavitud
fue encabezada por el libertador Toussaint Louverture, líder la revolución antiesclavista.
Louverture nació e Cabo Haitiano el 20 de mayo de 1743 y murió en Paris el 7 de
abril de 1803, traicionado por el general francés Charles Leclerc, siendo
vejado él y su familia por las fuerzas francesas de ocupación. Este guerrero
que llegó a tener el grado de General luchó contra las fuerzas napoleónicas y
contra los españoles e ingleses. En 1773 lanzó la histórica proclama contra la
esclavitud enarbolando la frase: “Arrancad de raíz conmigo, el árbol de la
esclavitud.” Este esclavo emancipador, sería recordado como el hombre que
negoció con los británicos, venció a los españoles y expulsó a los franceses,
independizando la isla de éstos, en ese entonces llamada, Saint Domingue. El
nombre de Haití le fue bautizado por Jean Jacques Dessalines en 1804.
Haití durante buen tiempo de su historia, fue la colonia caribeña más rica, por
sus plantaciones azucareras, minas de oro y plata. El país sufrió la dictadura
de la familia Duvalier desde 1957-1971 y 1971 - 1986, cuando el hijo del
dictador Francoise Duvalier, -Baby Doc- tuvo que huir del país. Duvalier trajo,
seguridad, estabilidad política y económica, aunque su régimen de fuerza fue
acusado de ser represivo con sus opositores políticos. Actualmente, el país atraviesa
por una profunda crisis política y social de preocupantes dimensiones. Millones
se ha ido a vivir al extranjero. Nuestro país alberga unos 2 millones de
sus connacionales, según cálculos estimados. La solución a sus problemas
estructurales, institucionales, de estabilidad, y progreso económico y social,
está en la voluntad propia e inequívoca de los haitianos, y no de la
exclusividad de factores externos, divorciadas e inviables teorías y premisas,
que se han planteado, sin que hasta ahora tengan resultados alentadores.
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