FAO destaca ejemplo de Venezuela en distribución y
comercialización de alimentos bajo la pandemia
Un informe
titulado “Seguridad alimentaria bajo la pandemia de Covid-19”, elaborado por la
Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) por
solicitud de la Presidencia pro tempore de México ante la Comunidad de Estados
Latinoamericanos y Caribeños (Celac), detalla una serie de recomendaciones para
enfrentar la crisis generada por el brote global del nuevo Coronavirus.
“Es clave que
los gobiernos declaren la alimentación y la agricultura como actividades
estratégicas de interés público nacional, con apoyo de todos los órganos del
Estado y de la población. Es esencial mantener vivo el sistema alimentario para
que la crisis sanitaria no se transforme en una crisis alimentaria”, explicó
Julio Berdegue, representante regional de FAO.
En los anexos del
informe se incluyen los ejemplos de medidas y políticas en la región por
riesgos específicos. En el referido a “Disrupciones en la distribución y
comercialización de alimentos”, Venezuela destaca como buen ejemplo, debido a
que “la Superintendencia de Gestión Agroalimentaria ha diseñado un Plan de
Contingencia para garantizar la operatividad del Sistema Integral
Agroalimentario durante el periodo de cuarentena”.
En este
contexto, agrega que en la nación bolivariana “se han puesto en práctica una
serie de acciones para mantener los índices de abastecimiento de los 12 rubros
priorizados que forman parte de los alimentos de la canasta básica,
garantizando la existencia de la cadena de distribución y comercialización”.
El informe de
la FAO recomienda a la Celac reactivar su Plan de Seguridad Alimentaria y
Nutricional (Plan SAN-Celac), adecuándolo al nuevo contexto, y fortalecer
acuerdos políticos para impulsar el comercio de alimentos entre los países de
la región.
Según la
agencia de Naciones Unidas; América Latina y el Caribe y los mercados
internacionales tienen reservas suficientes para alimentar de forma adecuada a
sus habitantes en los próximos meses. El informe señala que el principal
desafío a corto plazo es garantizar el acceso a los alimentos de la población
que cumple con las medidas de seguridad sanitaria, especialmente para quienes
han perdido su fuente de ingresos.
Para enfrentar
la reducción de la capacidad adquisitiva para acceder a los alimentos, la FAO
recomienda reforzar los programas de apoyo nutricional para madres en edad
fértil y niños menores de cinco años de edad; asegurar la alimentación escolar,
expandir los programas de protección social y promover hábitos de consumo
saludable.
Por garantizar
la oferta de alimentos, la FAO recomienda facilitar el transporte y acceso
económico a insumos productivos (semillas, fertilizantes, etc.) y a maquinaria
e infraestructura.
Asimismo, para
mantener la disponibilidad de alimentos básicos, el informe considera clave
preservar el funcionamiento de las explotaciones agropecuarias, con especial
atención a la agricultura familiar campesina, pero sin excluir a las de mayor
tamaño.
Otra
recomendación consiste en apoyar el transporte, procesamiento y envasado de
productos agropecuarios y pesqueros; resolver problemas logísticos de las
cadenas de valor alimentarias y garantizar la operación de los puntos de venta
al por menor, mercados y supermercados.
El informe de
la FAO para Celac destaca la importancia de que los países desarrollen
políticas comerciales y fiscales que mantengan abierto el comercio mundial,
para evitar alteraciones en los precios domésticos o reducciones en la oferta
de alimentos.
Por último, la
organización de Naciones Unidas insta a los países a definir lo antes posible
estrategias para el periodo post-Covid-19, que permitan retomar la senda de
crecimiento sostenible e inclusivo.
Texto y foto/Mppre
*++