Levantar espacios democráticos
de masas es la única alternativa realista a la barbarie capitalista
DIARIO OCTUBRE / agosto 20, 2024
Crisis
capitalista y crisis de dominación imperialista.
El transcurso
de estos últimos años para la lucha de clases ha sido de una velocidad enorme,
tanto internacional como a nivel estatal. La crisis general capitalista de
carácter estructural, especialmente sentida en los últimos 15 años, ha llevado
a un callejón sin salida al imperialismo, que como una hiena herida, lanza
dentelladas sin respetar ya ni siquiera los mínimos consensos y formalidades
democrático-burguesas de los que se fue dotando tras el fin de la segunda
guerra mundial (guerra de liberación antifascista). Hoy, desata una guerra
mundial contra los pueblos del mundo que reivindican su soberanía y frente a
toda una realidad de países que han decido levantar relaciones autónomas y
diferenciadas de los circuitos de dominación imperialista, materializada en los
BRICS+, y que son un amenaza para el mantenimiento de esta dominación
imperialista. Guerra mundial en su forma militar, a través de la OTAN y del
ente sionista. Y en materia económico-financiera, mediante bloqueos, vetos,
sanciones y saqueos de los depósitos internacionales de países terceros, a
través del poder que siguen ostentando en los circuitos internacionales del
capital, principalmente EE.UU., y en menor medida sus aliados, Reino Unido y la
Unión Europea, aunque esta última en plena posición de sumisión al amo yanki.
De esta forma
tratan de perpetuar su dominio del mundo, a cualquier precio, sin dudar en
llevar a cabo abiertamente un genocidio en Palestina, continuas provocaciones
en territorio chino o una guerra de la OTAN contra Rusia iniciada por el
gobierno fascista ucraniano en 2014 en el Donbass, con la constante amenaza
nuclear, entre otros muchos focos de inestabilidad y guerra que mantiene en el
mundo en una lista interminable (Cuba, Corea, Venezuela, Sáhara a través de la
dictadura marroquí, financiamiento de grupos yihadistas en el Sahel,…), que
hemos venido a llamar en artículos anteriores como OTAN 360º. Porque es a
través de la OTAN como actúan, cada vez de forma más extensiva, para agredir a
los pueblos del mundo.
Ha sido el Eje
de la Resistencia Palestina, quien desde hace un año señala y pone en aprietos
esta dominación imperialista, a través de la necesaria conciencia de la unidad
de todas sus grupos heterogéneos para poder vencer ante el enemigo sionista.
Ejerciendo de vanguardia mundial antiimperialista en la actualidad.
Pero el
capitalismo en crisis no solo nos empuja a la violencia y la guerra, sino que a
través de su lógica reproductiva, está llevando al Planeta Tierra a una erosión
y destrucción de determinada irreversibilidad ya en estos momentos, que se
manifiesta en forma de pandemias, agotamiento de recursos, niveles colosales de
residuos contaminantes, sequías y desertificación, etc., debido a la tensión de
los ciclos biológico-ecológicos del planeta.
En un camino
hacia la destrucción de la vida, que materializa cada vez con mayor certeza la
consigna de Carlos Marx: “El capitalismo tiende a destruir sus dos fuentes de
riqueza, la naturaleza y los seres humanos”.
La barbarie no
se queda en Palestina, nos alcanza en nuestra realidad diaria ya.
A nivel
estatal, la crisis capitalista y la sumisión de la burguesía a los dictados de
EEUU, la UE y la OTAN, se traslada en mayores tasas de empobrecimiento y
sobreexplotación del pueblo trabajador. La vivienda es un artículo de lujo al
servicio de la especulación, el coste de los alimentos básicos y de la energía
se ha disparado, la extensión del trabajo a tiempo parcial, maquillado como
empleo fijo, disimula unas cifras de empleo que la realidad es imposible de ocultar.
Hace tiempo ya que tener un trabajo no garantiza salir del umbral de la
pobreza. Hoy, el 33 % de las personas que tienen empleo en España son pobres1.
Pero además, el
capital necesita acabar con los espacios que aún no están bajo su lógica de
acumulación. Los servicios públicos se privatizan a grandes pasos, al calor de
los gobiernos autonómicos y central (ya sean gobiernos de derecha o
socialdemócratas) y las pensiones públicas se deterioran. Como ejemplo el
último acuerdo de pensiones firmado por el gobierno PSOE-SUMAR, CCOO y UGT y la
patronal, que sigue primando el retraso de la jubilación e introduce la
participación de las mutuas privadas en algunos procesos de bajas comunes –
¡privatización! -…
Mientras
aumenta la pobreza y la privatización, se imposibilita el acceso a la vivienda
y se ataca a las pensiones públicas, hay un incremento el gasto militar en más
de un 60 % desde la llegada de la socialdemocracia al poder (gobiernos de
coalición PSOE-UP y PSOE-Sumar) por imposición de la OTAN, más de 6.000
millones2, que solo
sirven a la lógica de barbarie del capital. Nuestra pertenencia a la OTAN, no
solo conlleva desangrarnos en gastos militares, sino al peligro de la guerra
nuclear y el conflicto armado debido a las bases de EEUU y la OTAN en nuestro
territorio, y además a la militarización de la sociedad y al envío de nuestra
juventud a morir por los intereses del capital.
El capitalismo
prepara y fomenta al fascismo
La burguesía,
muy consciente de toda esta “presión en la olla social”, sigue haciendo uso de
la socialdemocracia en el gobierno y las direcciones sindicales, que
políticamente son una misma cosa, para desmovilizar a la clase trabajadora,
pero machaca a las masas con ideología reaccionaria las 24 horas del día, a
través de toda la superestructura bajo su control. Instigando y aupando al
fascismo a través de la propaganda de los medios de comunicación, con
noticiarios y tertulias reaccionarias que blanquean comportamientos racistas,
el odio a los pobres y el fascismo o con la presencia del ejército en colegios
e institutos para normalizar la militarización, preparando la necesaria
represión en forma de violencia abierta contra el movimiento obrero y la
organización de las capas populares frente a la violencia del capital. Como
ejemplo, la insoportable tarea de paciencia que hay que llevar a cabo para
aguantar un telediario completo en cualquiera de los canales de TV que existen
hoy, cada vez que se justifican los métodos de Israel, de la Ucrania fascista o
de los golpistas venezolanos, o como con el blanqueamiento y presencia del
líder de la organización fascista “Desokupa” en el canal Cuatro, en un programa
de tertulia que hubo a inicios de agosto.
Todo ello bajo
responsabilidad de la socialdemocracia, que además lo financia enviando armas a
grupos fascistas ucranianos y comerciando con el ente sionista a nivel
internacional, y a nivel estatal, con el mantenimiento de la Ley Mordaza y los
incontables casos de represión al movimiento obrero y a quienes protestan: los
jóvenes de Altsasu, Pablo Hásel, militancia del SAT, los seis jóvenes de
Zaragoza, la militancia del PCPC en Gran Canaria, o el reciente caso de
especial gravedad “Las seis de la Suiza” en Asturias, condenadas a tres años y
medio de prisión por el Tribunal Supremo por participar en un piquete durante
su actividad sindical, es decir, penas de cárcel para el movimiento obrero
organizado que decide plantar cara a la patronal únicamente por su actividad
sindical.
Por otro lado,
La Ley de Extranjería sigue deshumanizando a los sectores más vulnerables de la
clase trabajadora, empujando a miles de trabajadoras y trabajadores a tener que
jugarse la vida para poder trabajar, escapando de la barbarie que el
imperialismo impone en sus países de origen.
El saldo de los
últimos diez años: el Mar Mediterráneo convertido en la mayor fosa común del
mundo, con 28.000 trabajadores y trabajadoras migrantes ahogados en trayecto,
sumado a los miles que también pierden la vida en la ruta atlántica hacia aguas
canarias.
Y una vez que
consiguen llegar, son despojados de los derechos más básicos, sobre-explotados
por la patronal hasta la extenuación, perseguidos por el estado burgués y los
sectores más reaccionarios de la sociedad, que trata de criminalizarlos,
usándolos de chivo expiatorio ante el resto de la clase trabajadora. Un
escenario con una magnitud de violencia y descomposición insostenible…
La única forma
de pararlo es con organización de masas a través de la intervención
revolucionaria.
La hegemonía de
la socialdemocracia en el movimiento obrero y las masas en general, se ha
traducido hasta hoy en desmovilización y llamada al denominado voto útil (que
no resulta otra cosa, que intentar posponer la victoria del fascismo, a base de
consolidarlo y movilizarlo cada vez más en las calles y espacios de lucha).
Hoy, vista esta
inviabilidad de la propuesta de la socialdemocracia, frente a un capitalismo
que nos ha declarado la guerra es hora de dar un paso al frente y trabajar
hacia la creación de espacios democráticos de participación de masas.
Espacios de debate,
organización y acción, que debemos levantar junto a quienes sufren como
nosotros y nosotras la cada vez más dura realidad, para hacer frente a cada uno
de los problemas que se manifiestan día a día en nuestro centros de trabajo y
en nuestros barrios, desde la soberanía asamblearia de quienes participan en
ellos. Creando iniciativas que sean capaces de resolver los problemas que
sufrimos, y a la vez levantando frentes de lucha contra quienes los generan.
Constituyendo
grupos recogida de firmas entre los vecinos y vecinas allá donde es necesario
un centro de salud, un parque o cualquier infraestructura pública esencial y a
la vez denunciando la inacción de las instituciones públicas responsables y
exigiendo medidas; organizando una asamblea en el barrio, para denunciar la
situación de pobreza y de carestía de la vida, mientras se sigue incrementando
el gasto militar, e intentar generar comités locales contra la guerra y la
OTAN. O debatiendo los problemas que tenemos en el centro de trabajo con el resto
de compañeras/os y llevando a cabo medidas que, de menos a más, visibilicen el
conflicto y nos organicen en base a los problemas comunes, hacia mejores
posiciones de lucha.
Son ejemplos
que deben ayudar a iniciar el necesario camino hacia la plena conciencia y
organización de masas. Conciencia colectiva organizada desde la que reconocer
claramente al enemigo de clase y comprender que solo a través de la
articulación y estimulación de estos espacios, podremos avanzar en la defensa y
conquista de nuestros derechos más básicos. Y la tarea hoy de los y las
revolucionarias no es solo intervenir para que esas luchas vayan en dirección
revolucionaria, sino ¡ayudar a construir junto a las masas esos mismos espacios
que hoy aún no existen!
Debemos
mirarnos en el ejemplo de unidad de la Resistencia Palestina, que enfrenta con
determinación sin fisuras y eficacia al enemigo imperialista y sionista, para,
trasladando ese ejemplo a nuestro ámbito de lucha, traducirlo en ponernos a
trabajar cuanto antes para levantar esos espacios democráticos de masas, a la
ofensiva.
Llamamos al
pueblo trabajador a enfrentar con determinación esta coyuntura, a organizarse
contra toda la violencia que el capital descarga sobre nuestras espaldas y que
no estamos dispuestos ni un minuto más a seguir soportando. Depende de nosotros
y nosotras mismas empezar a construir la alternativa por y para la humanidad,
enfrentada a la barbarie del capitalismo y sus cómplices.
Los
revolucionarios y revolucionarias del PCPE y la JCPE estaremos a la altura de
las circunstancias, para fomentar esos espacios de democracia desde la base y
darle una orientación revolucionaria. Tenemos el análisis adecuado y los medios
para ello.
Contra la
guerra imperialista, contra el capitalismo y contra el fascismo.
Dirección
revolucionaria y trabajo junto a las masas.
¡Porque sólo el
pueblo organizado salva al pueblo! ¡Venceremos!
Francisco
Valverde
1 (XIII Informe sobre el Estado de la Pobreza de
EAPN-ES) https://www.eapn.es/noticias/1699/eapn-es-publica-un-documento-sobre-la-relacion-entre-empleo-y-pobreza
2 https://www.eleconomista.es/economia/noticias/12782086/04/24/el-gasto-militar-aumenta-en-espana-un-624-desde-la-llegada-de-sanchez.html#:~:text=Econom%C3%ADa-,El%20gasto%20militar%20aumenta%20en%20Espa%C3%B1a%20un%2062%2C4,desde%20la%20llegada%20de%20S%C3%A1nchez&text=El%20aumento%20en%20el%20gasto,despu%C3%A9s%20de%20la%20%C3%BAltima%20asignaci%C3%B3n.
Fuente: unidadylucha.es