En China, cada año
salen de las universidades decenas de miles de ingenieros, científicos y
técnicos de todo tipo. El intento estadounidense de bloquear su desarrollo
tecnológico ha fracasado y ha dado como resultado un extraordinario crecimiento.
TOPOEXPRESS
Lucha por la supremacía tecnológica
por Daniele
Burgio, Massimo Leoni y Roberto Sidoli
El Viejo Topo
18 abril, 2024
Los «hechos
obstinados» (Lenin) son bien conocidos desde hace tiempo y expuestos también en
2023 por el confiable Instituto Australiano de Política Estratégica en un
informe que, casualmente, fue ignorado en silencio por una gran parte de la
izquierda occidental: según él, China se ha convertido ahora en el «número uno»
mundial en 37 de los 44 principales sectores tecnológicamente importantes del
mundo contemporáneo.
Como bien han
destacado T. Buccellato y S. Olivari, “la investigación del Instituto
Australiano de Política Estratégica (Aspi) revela que China ha sentado las
bases para posicionarse como la superpotencia científica y tecnológica líder en
el mundo, estableciendo una ventaja sorprendente: en la mayoría de los sectores
tecnológicos críticos y emergentes, las instituciones de investigación generan
nueve veces más artículos de investigación de alto impacto que el país que
ocupa el segundo lugar, Estados Unidos. De esta manera, China ha alcanzado el
liderazgo en 37 de las 44 áreas tecnológicas críticas. Todas las tecnologías
etiquetadas como de alto riesgo de monopolio están controladas por Beijing. No
es casualidad que el flujo de conocimiento y de investigadores talentosos en estos
sectores hacia el país asiático esté en continuo crecimiento».[1]
La reacción del
imperialismo estadounidense ante la ahora consolidada primacía tecnológica de
Beijing ha demostrado ser a la vez furiosa pero impotente, con el objetivo
declarado de bloquear la innovación en China.
Incluso antes
de la prohibición estadounidense de agosto de 2023 de exportar cualesquiera de
los productos del país a Beijing en los campos de los semiconductores
avanzados, la información cuántica y la inteligencia artificial, el propio
Biden ya había legitimado abiertamente la guerra tecnológica del imperialismo
estadounidense al escribir, el 13 de octubre de 2022, en su prefacio al
documento clave “Estrategia de Seguridad Nacional” (NSS) para poner a China en
el punto de de mira de las Barras y las Estrellas.
China, afirma
el documento, «es el único actor que pretende reformar el orden internacional y
que tiene los recursos económicos, diplomáticos, militares y tecnológicos para
hacerlo». Beijing se presenta así como un rival sistémico que puede poner en
riesgo los intereses estratégicos y la seguridad económica de Estados Unidos; y
en este sentido es revelador que el documento nunca habla de establecer una
dinámica de cooperación con China, sino que a lo sumo habla de «competencia
responsable».[2]
¿Y cuál es la
respuesta de China a la agresión del imperialismo estadounidense?
Muy eficaz,
como se puede comprobar simplemente examinando el nuevo superchip ACCEL,
producido íntegramente en suelo chino a finales de 2023 y más rápido que sus
competidores occidentales.
“Un artículo científico reciente de la Universidad Tsinghua de China
examina la creación y el funcionamiento de un chip de procesamiento de
inteligencia artificial ultrarrápido y altamente eficiente diseñado
específicamente para tareas de simulación por computadora.
Llamado chip totalmente analógico que combina computación electrónica y
ligera (ACCEL), este chip innovador utiliza una arquitectura única que combina
computación fotónica y analógica.
Ofrece más de 3000 veces el rendimiento de la NVIDIA A100 y consume mucha
menos energía. Si bien ACCEL es una herramienta especializada, representa un
gran avance en la informática donde los semiconductores se diseñan a medida
para satisfacer necesidades específicas”.[3]
Superchip, pero
también está la supercomputadora cuántica china de enero de 2024, “Origin
Wukong, computadora cuántica superconductora de tercera generación desarrollada
independientemente por China, que se puso en funcionamiento el sábado 6 de
enero en Origin Quantum Computing Technology (Hefei) en la provincia de Anhui.
La computadora
cuántica funciona con Wukong, un chip cuántico superconductor autóctono de 72
qubits. Según los investigadores, se trata del ordenador cuántico
superconductor programable más avanzado de China.
Kong Weicheng,
subdirector del Centro de Investigación de Ingeniería de Computación Cuántica
de Anhui, señaló que la computadora está integrada con el sistema de control de
computación cuántica de tercera generación, lo que mejora la eficiencia
operativa general de la computadora cuántica.
Jia Zhilong,
subdirector del Laboratorio Provincial Clave de Chips de Computación Cuántica
del Centro de Investigación de Ingeniería de Computación Cuántica de Anhui,
dijo que el chip Wukong tiene 198 qubits, incluidos 72 computacionales y 126
acopladores.
Un qubit es la
unidad básica de información cuántica, similar a un bit binario pero realizado
en un dispositivo de dos estados.
El nombre
Wukong se inspiró en Sun Wukong, una figura literaria china mítica con la
capacidad de transformarse en 72 formas diferentes, simbolizando las poderosas
y versátiles capacidades de la computadora.[4]
No son malas
respuestas, ¿verdad?
Fuente: mondorosso
NOTAS:
[1] T. Buccellato y S. Olivari, “La innovación tecnológica hecha en
China está creciendo”, 6 de diciembre de 2023, en lavoce.info
[2] “Estados Unidos-China. Tecnología, el choque se vuelve duro”, 20
de octubre de 2022, en ispionline.it
[3] “ACCEL: chip chino 3000 veces más rápido que el A100 de NVIDIA y
consume mucha menos energía”, 6 de noviembre de 2023, en redhotcyber.com
[4] “La computadora cuántica de próxima generación se enciende en
China”, 8 de enero de 2024, en italianpeople.cn