Twitter: el aparato de propaganda cambia de bando político
DIARIO OCTUBRE
/ diciembre 6, 2022
En la medida en
que afecta a Obama y Biden, la reacción estadounidense se ha lanzado a la caza,
entre ellos Elon Musk, el actual propietario de Twitter, un aparato de
propaganda del Partido Demócrata que ahora ha cambiado de bando.
Para emprender
su caza particular contra los antiguos propietarios de Twitter y el Partido
Demócrata, Elon Musk ha encargado al periodista Matt Taibbi que difunda los
correos internos de Twitter ordenando silenciar los trapos sucios de Biden y el
Partido Demócrata.
Es otra de esas
grandes oportunidades para comprobar cómo se manipula una red social y los
intereses a los que sirve.
En 2020 el New
York Post, un periódico reaccionario, informó de que en el ordenador portátil
del hijo de Biden, el FBI había recuperado,
además de pornografía, datos sobre los negocios delictivos de Hunter Biden en
Ucrania.
Los correos
electrónicos encontrados en la memoria del ordenador demuestran que, a pesar de
sus desmentidos, Joe Biden manipuló al gobierno ucraniano para encubrir las
actividades delictivas de su hijo. Un tribunal verificó posteriormente que el
contenido del portátil era auténtico.
A la estela del
entonces vicepresidente de Obama, los medios de comunicación “progres” y el
Partido Demócrata lanzaron una campaña para impedir que la información
contenida en el portátil se difundiera porque era desinformación procedente de
Rusia. El Kremlin había vuelto a piratear los servidores y las comunicaciones
estadounidenses y actuaba de común acuerdo con los “trumpistas”.
Twitter se sumó
a esa campaña de censura. Prohibió los enlaces al New York Post a espaldas de
Jack Dorsey, el cabecilla de la red, que tardó en enterarse de la manipulación y,
sin embargo, no hizo nada por impedirla.
El antiguo
director jurídico y político de Twitter, Vijaya Gadde, desempeñó el papel
fundamental en la censura sistemática y el pirateo ruso fue el pretexto
perfecto. La red no podía hacer el juego a Rusia.
El pretexto
ruso no convenció a nadie. Los trabajadores de la red siempre supieron que
estaban lavando la cara a Obama, Biden y el Partido Demócrata, es decir, que
Twitter era uno de los brazos ideológicos de la Casa Blanca.
Si la historia
del portátil del hijo de Biden se hubiera difundido, no hubiera podido optar a
las elecciones presidenciales. En otras palabras: la censura en las redes
sociales y los medios de comunicación falseó el proceso electoral.
El Partido
Demócrata y los “progres” del mundo han perdido una poderosa herramienta y han
pasado al contraataque, no vacilando en ponere en evidencia. Acusan a Twitter
de una “censura insuficiente”. El New York Times asegura que los discursos de
odio han aumentado en Twitter, en una escala sin precedentes.
La Comisión
Europea amenaza con prohibir Twitter en Europa si no cumple con las normas de
censura y suprime la “desinformación”. Lo que había hasta ahora en Twitter no
debía ser “desinfomación”.
FUENTE: mpr21.info
No hay comentarios:
Publicar un comentario