Los países del Sur
Global abandonaron casi por completo el desarrollo a largo plazo en favor de la
supervivencia a corto plazo. Descuidaron la creación de capital social. Ha
llegado el momento de cambiar.
Una nueva teoría del Desarrollo
El Viejo Topo
31 marzo, 2025
NUEVAS TEORÍAS
DE DESARROLLO PARA SALIR DE LA DEUDA
En las últimas
dos décadas, la deuda externa de los países en desarrollo se ha cuadruplicado hasta
alcanzar los 11.4 billones de dólares (2023). Es importante comprender que este
dinero adeudado a acreedores extranjeros equivale al 99% de los ingresos por
exportaciones de los países en desarrollo. Esto significa que casi cada dólar
ganado por la exportación de bienes y servicios es un dólar adeudado a un banco
extranjero o a un tenedor de bonos. Por lo tanto, los países del Sur Global se
limitan a vender sus bienes y servicios para pagar las deudas contraídas por
proyectos de desarrollo, el colapso de los precios de las materias primas, los
déficits públicos, la pandemia de COVID-19 y la inflación originada por la
guerra de Ucrania. La mitad de la población mundial (3.300 millones) vive en
países que destinan más
de su presupuesto a pagar los intereses de la deuda que a pagar los servicios
de educación o salud. En el continente africano, de los cincuenta y cuatro
países, treinta y cuatro gastan más en el pago
de la deuda que en la sanidad pública. La deuda se cierne sobre el Sur Global
como un buitre, listo para devorar el cadáver de nuestras sociedades.
¿Por qué están
endeudados los países? La mayoría de los países están endeudados por varias
razones:
- Cuando obtuvieron la independencia hace aproximadamente un siglo, sus
antiguos gobernantes coloniales los dejaron empobrecidos.
- Pidieron dinero prestado a sus antiguos gobernantes coloniales a tipos
de interés elevados para proyectos de desarrollo, lo que hizo imposible el
reembolso, ya que los fondos se utilizaron para proyectos públicos como
puentes, escuelas y hospitales.
- Las desiguales condiciones comerciales (exportación de materias primas
a bajo precio para importar productos acabados a alto precio) agravaron
aún más su débil situación financiera.
- Las despiadadas políticas de las organizaciones multilaterales (como
el Fondo
Monetario Internacional, FMI) obligaron a estos países a
recortar el gasto público interno tanto para consumo como para inversión
y, en su lugar, a pagar la deuda externa. Esto puso en marcha un ciclo de
bajas tasas de crecimiento, empobrecimiento y endeudamiento.
Atrapados en la
red de deuda-austeridad-bajo crecimiento-endeudamiento externo-deuda, los
países del Sur Global abandonaron casi por completo el desarrollo a largo plazo
en favor de la supervivencia a corto plazo. La agenda de la que disponían para
hacer frente a esta trampa de la deuda estaba totalmente motivada por la
conveniencia del reembolso y no por el desarrollo. Por lo general, se
promovieron los siguientes métodos en lugar de una teoría del desarrollo:
- Alivio y
reestructuración de la deuda. Buscar una reducción de la
carga de la deuda y una gestión más sostenible de los pagos de la deuda a
largo plazo.
- Un llamamiento a la inversión extranjera directa (IED) y un intento de
impulsar las exportaciones. Aumentar
la capacidad de los países para obtener ingresos para pagar esta deuda,
pero sin ningún cambio real en la capacidad productiva del país.
- Recortes del gasto
público, en gran medida una merma del gasto social.
Cambiar el panorama fiscal para que un país pueda utilizar más de su
riqueza social para pagar a sus tenedores de bonos extranjeros y ganarse
la “confianza” en el mercado internacional, pero a expensas de la vida y
el bienestar de sus ciudadanos.
- Reformas fiscales que beneficien a los ricos y reformas del mercado
laboral que perjudiquen a los trabajadores. Recortes fiscales para animar a los ricos a invertir en su sociedad,
lo que ocurre muy raramente, y un cambio en las leyes sindicales para
permitir una mayor explotación de la mano de obra para aumentar el capital
de inversión.
- Reforma institucional para garantizar una menor corrupción mediante
un mayor control internacional de los sistemas financieros. Abrir el
proceso presupuestario de un país a la gestión internacional (a través del
FMI) y permitir que economistas extranjeros controlen la toma de
decisiones fiscales.
Cada uno de
estos enfoques por separado y todos ellos juntos, no proporcionaron ninguna
evaluación clara de los problemas subyacentes que produjeron la deuda, ni
ofrecieron una vía para salir de la dependencia de la deuda.
En efecto, si
este es el mejor enfoque disponible, entonces los países en desarrollo
necesitan una nueva teoría del desarrollo.
UNA NUEVA
TEORÍA DEL DESARROLLO
A estas
alturas, se entiende que la entrada de Inversión Extranjera Directa (IED) y la
exportación de productos básicos a bajo precio no aumentan por sí solas el
producto interno bruto (PIB) de un país en desarrollo. De hecho, la IED, en una
época de liberalización financiera y sin control de capitales, puede crear
enormes problemas para un país pobre, ya que el dinero puede desestabilizar la
economía. Esto último requiere inversiones a largo plazo en lugar de
transacciones de dinero especulativo.
Las
investigaciones de Global South Insights (GSI, por su siglas
en inglés) y Tricontinental: Institute for Social Research muestran que
no es la IED la que aumenta el PIB a largo plazo, sino que existe una alta
correlación entre el aumento de la inversión neta de capital fijo y el
crecimiento del PIB (la inversión neta de capital fijo es el aumento del gasto
en capital social por encima de la depreciación). En otras palabras, si un país
invierte dinero para aumentar su capital social, verá un aumento secular en su
tasa de crecimiento. Esa es la razón por la que países como China, Vietnam,
India e Indonesia han mantenido altas tasas de crecimiento en un período en el
que la mayoría de los países (por ejemplo, en el Norte Global) han tenido tasas
de crecimiento bajas o negativas (especialmente si se tiene en cuenta el
aumento de la inflación). Incluso el Banco Mundial está de acuerdo en
que la salida de la “trampa del ingreso medio” consiste en aumentar la
inversión, introducir tecnologías del extranjero e innovar internamente en
materia de tecnologías (lo llaman el “método 3i”). En el centro del proyecto
debe haber un aumento de la inversión neta de capital fijo.
Nuestra
investigación muestra que a medida que el PIB crece, la esperanza de vida
también aumenta. Hay muchos elementos que requieren investigación: por ejemplo,
si la calidad del crecimiento del PIB mejora (más industria, mejor gasto
social), ¿qué efecto tiene esto en los resultados sociales? Hablar de la
calidad del PIB es plantear cuestiones de asignación de la riqueza social a
sectores específicos, lo que pone de manifiesto la importancia tanto de una
planificación económica sólida como de una política fiscal adecuada que no esté
motivada por el pago a los tenedores de bonos extranjeros, sino por la
construcción a largo plazo del capital fijo neto en un país.
Pero, ¿cómo se
consigue la financiación necesaria para pagar las deudas y acumular capital
social? No es imposible, ya que la mayoría de los países en desarrollo son
ricos en recursos y solo necesitan desarrollar la capacidad para gestionarlos.
Las respuestas podrían encontrarse menos en las leyes de la economía que en las
relaciones desiguales de poder en el mundo. Con la agitación del
orden mundial, ahora podría haber una oportunidad para crear nuevas estrategias
financieras para el desarrollo.
La base de una
conversación sobre la teoría de desarrollo no debería ser cómo sostener una
economía en una espiral de deuda permanente que conduce a la
desindustrialización y la desesperación. En su lugar, debería tratarse de cómo
romper ese ciclo y entrar en un período de industrialización, reforma agraria,
crecimiento y progreso social. Es esta idea la que nos motiva a iniciar una
nueva conversación, no sobre la necesidad de tal o cual política económica para
salvar una mala situación, sino sobre una nueva teoría del desarrollo en su
conjunto.
Fuente: Globetrotter
y No Cold War Perspectives
No hay comentarios:
Publicar un comentario