miércoles, 9 de abril de 2014

¿AL SERVICIO DE QUIÉN ESTÁ LA POLICIA?



Si un policía, como parece evidente, tiene por oficio la lucha contra el crimen y el mantenimiento del orden público, y ve que sus condiciones de trabajo no son las idóneas para desarrollar su función, le asiste toda la fuerza moral  (aunque no se si legalmente también) para exigir de sus mandos que las condiciones necesarias para cumplir con su función social sean restablecidas.
Para ello se pueden concentrar y manifestar demandando esas condiciones necesarias para su trabajo, y en última instancia, pueden perfectamente dimitir, dejar de ser policías para ganarse las habichuelas como cualquier otro trabajador, o sea, trabajando, creando riqueza para la sociedad que es lo que hace cualquier trabajador y que es lo que ha hecho cualquier jubilado mientras fue trabajador activo.
Los que hemos trabajado y están trabajando, en definitiva, los que pagamos impuestos y con esos impuestos se paga a la policía, no podemos permanecer impasibles ante el hecho de que el gobierno no sea capaz (o no quiera hacerlo) de establecer las condiciones necesarias para que la policía cumpla con la función social que tiene encomendada, pero tampoco podemos permanecer impasibles ante una policía que utiliza el mismo procedimiento que como tal policía reprime cuando otros, inmensamente mayor en número, reclaman para si los mismos derechos, pero que no se manifiesta cuando el ministro del Interior, Jorge Fernández, remueve cargos policiales con demostrada capacidad técnica y experiencia, para entorpecer las investigaciones en curso contra determinados delitos: caso Gürtel o compra del piso en la provincia de Málaga del presidente de la Comunidad de Madrid.
Si uno aplica la lógica más elemental a las agresiones producidas a la policía el 22 M en Madrid (hay que ver quien y porque se produjeron esas agresiones y quien fue el primero que las inició o las provocó, si los manifestantes en su conjunto, que es evidente que no, un grupo reducido, insignificante de manifestantes violentos, que es posible, un grupo insignificantes de violentos infiltrados en la manifestación, precisamente para esa provocación, que es posible, un grupo de policías de paisanos infiltrados en la manifestación, que es posible, en otras ocasiones lo han hecho, la actuación de la propia policía cargando contra los manifestantes antes de que finalizara el plazo legal de la manifestación -las nueve de la noche-, que es posible, con la intención política, y por tanto, nada que ver con la función social de la policía para que los noticieros televisivos de las nueve de la noche pudieran hablar de la violencia en el 22 M, con el fin deliberado y calculado de evitar la información a la opinión pública de las verdaderas razones del 22M) está lejos de poder afirmar que las agresiones a la policía se debieran a un simple error humano en el cálculo de la táctica a seguir.
Se llega antes a la conclusión de que un grupo de policías quede aislado, y que no acudan refuerzos en su ayuda cuando la petición se hace reiteradamente, en base a un planteamiento calculado por parte de los mandos policiales con el claro objeto de que se hubiera producido una víctima mortal, bien de la propia policía o de cualquier manifestante, que sirviera de pretexto para justificar la reforma legal que lleva en curso el gobierno del PP presidido por Rajoy, además de criminalizar, todavía más, al movimiento ciudadano cuando se manifiesta en las calles exigiendo los derechos que le quita el gobierno y para los que nadie le votó. Y esto necesita una explicación y no exclusivemenet a la policiá, sino a todo el pueblo español.
*
Ultimátum de los sindicatos policiales: o alguien dimite o habrá más movilizaciones

Lainformación.com
martes, 08/04/14 - 13:18
  • La secretaria general de SUP, Mónica Gracia, advierte que no va a permitir que se demore en el tiempo la investigación interna.
  • El pasado viernes la Dirección General comunicó a los sindicatos que aplazaba 'sine die' el resultado de la información reservada.

(Los sucesos del 22M acabaron con cien heridos, entre ellos 67 policías.)

Los sindicatos de Policía no están dispuestos a que se dilate en el tiempo la investigación interna abierta por el Ministerio del Interior para esclarecer los errores del pasado 22 de marzo a cuenta del enfrentamiento entre radicales y funcionarios que acabó con 67 de estos últimos heridos. Los cuatro secretarios generales de las organizaciones sindicales del Cuerpo Nacional de Policía tienen previsto reunirse esta semana para concretar las medidas de presión que tomarán si de aquí al viernes la Dirección Adjunta Operativa de la corporación, que instruye la información reservada, no da a conocer sus conclusiones y anuncia ceses.
La secretaria general del Sindicato Unificado de Policía (SUP), Mónica Gracia, advierte en una entrevista concedida a Seguridad y Tribunales Radio que, si Interior no tiene un dictamen a lo largo de esta semana, su agrupación pondrán en marcha un calendario de movilizaciones con los miembros de las Unidades de Intervención Policial y con el colectivo en general para solicitar responsabilidades. Los sindicatos insisten en que hubo falta de planificación y errores por parte de los mandos policiales que deben ser asumidos con dimisiones o ceses.
Según Gracía, el pasado viernes el director adjunto operativo, Eugenio Pino, les convocó a una reunión a la que los sindicatos decidieron no asistir “porque no había una resolución definitiva de esa información reservada y solo querían informarnos de los avances". "Creímos que era una falta de respeto y una manera de dilatarlo en el tiempo”, añade.
Desde el sindicato consideran que la puesta en marcha de la denominada operación Puma, que ha supuesto hasta el momento la detención de 11 violentos, no supone un avance en cuanto a la resolución de los hechos ocurridos en torno a la organización del dispositivo de seguridad del 22M. “Una cosa no tiene nada que ver con la otra; por un lado están los violentos, que fueron los responsables de las agresiones a los funcionarios, y por otro la falta de planificación que hubo por parte de los mandos policiales”. 
Los altercados del 22M provocaron que un centenar de personas tuviera que ser atendido por heridas de diversa consideración; entre ellos, 67 funcionarios tanto del Cuerpo Nacional de la Policía como de la Policía Municipal. El Ministerio del Interior abrió entonces una información reservada con el objetivo de esclarecer los hechos, ya que nunca había habído un despliegue de violentos tan numeroso y tampoco había habido tantos errores presumiblemente achacables a la organización del dispositivo policial.
La mayoría de sindicatos de Policía Nacional y Municipal han solicitado la personación en las diligencias que dirige el Juzgado número 30 de los tribunales de plaza de Castilla, causa en la que actualmente hay una treintena de imputados.
*++

No hay comentarios: