RESOLUCIÓN SOBRE LAS ELECCIONES MUNICIPALES
Las elecciones municipales en mayo de 2015 suponen una oportunidad para empezar a convertir en realidad uno de los principios que nos movieron a construir Podemos: lograr el empoderamiento popular y canalizar la indignación hacia el cambio político. El ámbito municipal, además, tiene la particularidad de permitir de una forma mucho más efectiva que la gente asuma el protagonismo en las decisiones políticas que afectan a sus realidades cotidianas. El hecho de obtener representación o incluso ganar Ayuntamientos, además de permitirnos echar a la casta local, serviría para reforzar y dotar de una mayor autonomía a los círculos, diversificar la imagen pública de Podemos y adaptar nuestras propuestas políticas a las diferentes realidades locales. Presentarnos en diversos municipios con la marca Podemos, nos permitiría consolidarnos de cara a las futuras elecciones autonómicas y generales.
Quienes están en disposición de valorar su capacidad para presentar candidaturas, así como los riesgos y oportunidades que pueden asumir, son los y las integrantes de los diferentes círculos que han estado construyendo Podemos desde abajo. Los círculos deberían ser quienes en última instancia, decidan si quieren presentarse o no, así como la forma de hacerlo siempre bajo criterios irrenunciables como transparencia, la participación ciudadana (listas abiertas, programa participativo, asambleas abiertas...) y democracia interna recogidos en un programa marco general. En una formación abierta como Podemos, siempre existirá el riesgo de que ciertas personas se aprovechen de la marca Podemos para obtener cargos y utilizar la política en función de intereses personales, pero ese riesgo no debe menoscabar la capacidad de decisión de quienes están construyendo el proyecto, quienes además son, en su inmensa mayoría, gente honesta con voluntad de trabajar en pro del cambio social y político. Dotarnos de mecanismos como la rendición de cuentas y la revocabilidad permanente de los cargos permite controlar estos riesgos de froma efectiva sin necesidad de imponer decisiones desde arriba. Aquellos círculos en los que se valore positivamente, deberían poder utilizar la marca Podemos para presentar sus candidaturas.
El cambio político no vendrá solo de la mano de las instituciones, diversas experiencias nos demuestran que para enfrentarnos al poder que tiene la casta política y económica, es imprescindible combinar espacios de poder en las instituciones con la movilización popular en las calles, y que ambas esferas se refuercen mutuamente. En este sentido, las candidaturas municipales que aglutinen a sectores procedentes de los movimientos sociales de diversos tipos, como puede ser movimientos en defensa de los servicios públicos, el derecho a la vivienda, los derechos laborales o la igualdad de género, pueden ser un buen espacio desde el que presentarse, siempre que sigan principios organizativos, políticos y éticos compatibles con los de Podemos: primarias abiertas, programa electoral participativo y rupturista con el neoliberalismo, cargos con mandato limitado, con salarios medios y revocables en cualquier momento, etc. Cualquier candidatura en que participemos debe ser fruto no de pactos de despacho entre grupos sino una herramienta real para ampliar la base social ganando nuevas y nuevo activistas a las luchas y transformación local. Por otro lado, más allá del método, en muchos municipios candidaturas impulsadas por personas del aparato de Izquierda Unida que utilizan el nombre Ganemos, presenta importantes limitaciones. En Andalucía, concretamente, resulta muy contradictorio compartir candidaturas y pretender que éstas planteen una oposición frontal a los recortes y se conviertan en alternativas reales de cambio, con una organización que está formando parte del Gobierno de la Junta de Andalucía que está aplicando esos recortes. Vale la pena matizar que valoramos muy positivamente la participación de las bases comprometidas con la ruptura y los sectores más combativos de IU en candidaturas ciudadanas, oponiéndose a las políticas de la dirección.
Hay muchos municipios en los que no existe la posibilidad de construir espacios más amplios y si Podemos no aprovecha esta oportunidad, lo harán otras iniciativas que no defienden los intereses de los y las de abajo, de la mayoría social. Ante las elecciones municipales, debemos ser capaces de responder a la responsabilidad que asumimos cuando nos convertimos en una opción real de cambio.
Ana Villaverde Valenciano - Resolución Avalada por el Círculo de Granada
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