Los grupos de presión climáticos censuran
un artículo científico ‘incómodo’
Diario
octubre / agosto 31, 2023
No es un fenómeno nuevo,
pero no deja de sorprender que la censura reaparezca en los medios académicos
como en las peores épocas de la Edad Media. En 2009 se descubrió que los caciques de la unidad del clima de la Universidad
británica de East Anglia se dedicaban a censurar y
desacreditar a sus oponentes.
Los
correos electrónicos que se destaparon mostraban a miembro de ese clan, Phil
Jones, indicando a Michael Mann los artículos que se
debían referenciar en los informes del IPCC y los que no.
Ahora
han vuelto a la carga para censurar un artículo publicado por cuatro
científicos italianos, respaldado por pares, cuya conclusión es que el clima
extremo y los desastres natgurales relacionados con él no están aumentando.
El
artículo se titulaba “Una evaluación crítica de las tendencias de eventos
extremos en los tiempos del calentamiento global” y se publicó en la revista
científica European Physical Journal Plus (1).
Así
comenzó la caza de brujas. Los celosos defensores de la inquisición pasaron al
contrataque, tanto en el terreno académico (2) como en el político, donde han
formado un holding mediático de 500 cadenas de intoxicación, llamado Covering
Climate Now (CCN), que es capaz de llegar a más de 2.000 millones de lectores
(3). Su misión es difundir la ideología del calentamiento y denostar a los
herejes.
Periódicos
generalistas, como The Australian (4) y el Guardian (5), se sumaron a la
ofensiva porque el asunto del cambio climático, desborda ampliamente el
mundillo académico. Más bien forma parte de la política económica del moderno capital monopolista.
Los
inquisidores decían que el artículo de los científicos italianos se había
basado en el Quinto Informe del IPCC en lugar del Sexto. Los autores les
aclararon que lo presentaron antes de que se publicara el Sexto Informe, pero
la aclaración no importó a nadie. La caza había empezado. El estudio era
“defectuoso”, incluía “afirmaciones desacreditadas” y “datos extremadamente
manipulados”.
En
el terreno académico el objetivo era la retractación y por eso empezaron las
presiones a la empresa editora Springer para que se sumara a la caza de brujas.
La semana pasada lograron su objetivo.
Por
su parte, en una loable actitud de abierto desafío, los científicos italianos
no se callaron la boca y a principios de este mes han publicado una versión
actualizada de su artículo, también revisado por pares, en una revista
científica diferente. Se titula “¿Está aumentando el número de desastres
naturales mundiales?” Los autores no vacilan en criticar abiertamente a dos
organismos de la ONU (FAO y UNDRR) que predicen un número creciente de
desastres a causa del calentamiento global. “Nuestros análisis refutan
rotundamente esta afirmación, así como las extrapolaciones publicadas por la
UNDRR basadas en esta afirmación”, concluyen (6).