La espantada de Urdangarin levanta suspicacias sobre un amaño "real"
El Semanal Digital
8 de abril 2013
Su marcha es pasto de especulaciones: ¿Es el primer paso de su ruptura con la Infanta? ¿Ha tenido algo que ver el Rey?
¿Se aproxima un nuevo "cese temporal de la convivencia" en la Familia Real, como se denominó en un principio la separación entre la Infanta Elena y Jaime de Marichalar? Si las campanas de la ruptura entre Doña Cristina e Iñaki Urdangarin ya sonaban en la prensa antes y después de la imputación de la Infanta en el Caso Nóos, tras la noticia de la marcha del duque de Palma a Qatar aún más.
Después de que el sábado La Otra Crónica de El Mundoapuntara en esa dirección, con testimonios del entorno de la hija menor de los Reyes que aseguraban que ahora sí "se ha caído del guindo" definitivamente, la oferta de Valero Rivero a Urdangarin no ha hecho sino avivar esa teoría.
El que fuera entrenador del yerno de Don Juan Carlos en su época de jugador de balonmano en el Barça -y muy buen amigo suyo- le ha ofrecido irse de segundo con él a la selección qatarí, con la que Rivero ultima un contrato millonario. Varios diarios publican este lunes que Urdangarin ya le ha comunicado al Rey su decisión de marcharse. Su estancia en Doha se prolongaría durante dos años.
A pesar de su imputación puede hacerlo, porque la Fiscalía Anticorrupción ya ha dejado caer que no va a pedir medidas que le impidan salir de España. Ni la retirada del pasaporte ni ninguna otra. De forma que podrá trasladarse al Golfo Pérsico sin problema, aunque tenga que volver para el juicio. En principio su familia no le acompañará, sino que por lo pronto la Infanta y sus cuatro hijos seguirán viviendo en Barcelona. Al menos hasta el final del curso escolar.
El oportuno momento en el que Urdangarin ha decidido poner tierra de por medio, aliviando así en parte la feroz presión sobre la Monarquía, ha despertado suspicacias sobre el papel jugado por el Rey en esta huida de su yerno.
No sería la primera vez, puesto que cabe recordar que tiempo después del fichaje del duque de Palma por Telefónica se supo que el propio Don Juan Carlos medió con la compañía de César Alierta para que le contratara para su división internacional y así alejarle de España, sabedor de que su gestión en Nóos no había sido precisamente "ejemplar".
Además, no conviene olvidar la estrecha relación que el jefe del Estado mantiene con los países del Golfo Pérsico. Hace dos años el Monarca agasajó al emir de Qatar, el jeque Hamad Bin Khalifa Al-Thani, durante una visita oficial a España de tres días. Meses después Don Juan Carlos emprendió una gira por los países del Golfo durante la que tuvo oportunidad de volverse a reunir con Al-Thani.
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