Ignacio Fernández Toxo, es el nuevo Secretario Comisiones Obreras y ha empezado bien su mandato. Igual de bien que cualquier otro cargo electo político, social o económico: amante del diálogo. Eso está bien.“Diálogo (¡bien!), concertación (¿pronto empezamos, no?) y exigencia (¡bien, bien, bien!) en la defensa de los intereses de los trabajadores (¡anda que si fuera verdad que le diera ahora a Comisiones Obreras por defender los intereses de los trabajadores, y no los de la gran patronal, arrastrando con ella y con el mismo propósito a la otra gran central sindical UGT!).” Esto es lo que ha dicho el flamante Secretario General de CCOO, Ignacio Fernández Toxo.
Es evidente que queda mucha tela por cortar, esto es, muchas cosas acerca de las cuales tiene que haber un diálogo: desde lo que nos cuesta a todos los españoles el mantenimiento y manutención de la Casa Real Borbónica, sus negocios, hasta la abolición de toda la legislación que reconoce la existencia de los paraísos fiscales, donde los ricos guardan más de 11 BILLONES de dólares.
De lo que no hay nada que dialogar, es evidente también, es del empeoramiento de las condiciones de vida de toda aquellas personas que vive de su trabajo, pensionistas y personas mayores próximas a su jubilación (65 años), porque desde el que hoy “sabio” y aficionado a viajar y a fabricar joyas, Felipe González, empezó a deshacer lo poco que quedaba del Socialismo español, las clases trabajadoras no han hecho más que empeorar sus condiciones de vida.
Esperemos, pues, que Ignacio Fernández Toxo, dialogue de lo que hay que dialogar y no dialogue de lo que no hay nada que dialogar.
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