miércoles, 8 de abril de 2009

UN ALTO EN EL CAMINO

PARA RESPIRAR

Sí, respirar.
Y respirando
hacerme niño.
Y tú, niña.
Y como niños,
de la mano.
Y volar como aves
de la mano contigo.
Y subir al alto,
al cielo.
Y más alto que el cielo.
Y en lo más alto
hacer vereda
para volarla contigo.
Y mirar desde lo alto
al bajo,
al que no vuela.
Y bajar al bajo,
y desde lo bajo
mirar al bajo,
y haciéndome otra vez
niño,
volar al cielo,
y más allá del cielo.
Pero contigo.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Gracias por este poema. Il est vraiment très joli... sigo pensando en ti.