domingo, 4 de julio de 2010

LOS MERCADOS FINANCIEROS

(6/6)
(Bolsa de New York)

La tasa de ganancia del capital aumentó durante los treinta años que siguieron a la II Guerra Mundial. Y ello se explica, porque el ciclo de explotación del capitalista al asalariado de donde extrae la plusvalía por antonomasia y que expresa la expresión siguiente se repetía continuamente sin ninguna “contrariedad” para el capitalista. Producir vender, producir vender…:
D --- M … P … M´--- D´ (1)

Cuando el ciclo de explotación capitalista que expresa la expresión anterior se ralentiza y alcanza un determinado nivel, como fuente que provee al capitalista de la plusvalía, la tasa de ganancia cae, y al alcanzar esta caída de la tasa de ganancia un determinado nivel se produce una crisis, con tendencia a la expresión siguiente que es la que explica en definitiva la inviabilidad histórica del sistema capitalista:
g´ = p´ / (o´+ 1) (2)

La crisis de los 70 del siglo pasado se produce porque la tasa de ganancia cae, es decir, porque se ralentiza la expresión (1), y se vuelve a recuperar diez años después, o sea, en la década de los 80.
Pero esta última recuperación de la tasa de ganancia ya no se debe exclusivamente a que la expresión (1) alcance el nivel suficiente como para que toda la plusvalía necesaria al capital provenga de ella, sino que, para elevar la plusvalía hasta el nivel previsto por el capital necesita recurrir a otros elementos.
Y la razón de ello se debe a que a medida que el capitalismo se desarrollo se acerca cada vez más a ese punto de inviabilidad histórica que queda expresado en (2) y para complementar la tasa de ganancia el capital, a través de los diferentes gobiernos recurre:

a) Bajar los niveles de salarios (puede comprobarse como los salarios son relativamente más bajos hoy que hace, cinco, diez, quince, veinte años… Hoy para comprar el mismo objeto que hace cinco, diez, quince, veinte años…, hacen falta más horas de trabajo que la fecha que se tome. Y ello, a pesar de que los costos de producción son más barato), etc-.

b) Recortar los gastos que el Estado realiza en servicios sociales públicos; derechos sociales de las clases más desfavorecidas, etc.

c) Intervenir en negocios que antes no intervenía por considerarlos marginales, como por ejemplo, a actividades tan alejadas directamente del gran capital, como los servicios de fontanería, electricidad de 24 horas, etc.

d) Intervenir cada vez más en actividades hasta no hace mucho consideradas como de seguridad nacional: fabricación de material militar, apropiándose de las empresas más rentables del Estado, en el caso de España, banca pública o empresas como ENDESA o Telefónica; sustituyendo policías para vigilar centros públicos o proteger a cargos públicos por Guardias de seguridad privados, al igual que para proteger bienes privados, caso de los Guardias de seguridad privada realizando actividades militares en barcos pesqueros, etc.

c) Interviniendo cada vez más en la enseñanza, salud pública, transportes, residencias de mayores, etc., a través de solapadas formas jurídicas que encubren el procedimiento de la privatización, asegurándose así nuevas fuentes de obtener beneficios sin realizar ninguna inversión real propia y sin aportar nada nuevo a lo que ya hacía el estado, etc.

d) Controlando datos y manejando información tales como aspectos relativos a la Seguridad social, por lo que cobran al Estado, por ejemplo, en el calculo de las futuras pensiones, cosa que no hacen ni mejor ni antes que los propios funcionarios que ya trabajan en la Seguridad Social, y que además pueden hacerlo y lo hacen los propios funcionarios, etc.

e) Detrayendo fondos públicos para que sean puestos a disposición de las grandes empresas, cuyo objetivo último es lo que pretenden en los Pactos de Toledo: poner a disposición de los grandes capitales los fondos de las pensiones públicas pagado durante toda su vida laboral por cada trabajador, etc.

Así, pues, a medida que la tasa de ganancia cae y se muestra incapaz de proveer de los beneficios necesarios al capital, cosa que quedaría explicada por la ley de los rendimientos decrecientes que es estudiada en cualquier facultad de económicas, el capital necesita recurrir a otros procedimientos como los descritos solamente a modo de ejemplo para mantener su tasa de ganancia prevista. Y tanto más cuanto mas se acerca al punto de su inviabilidad histórica, como se vera mas abajo.

La tasa de ganancia del capital vuelve a crecer en los años 80 porque incorpora algunos de los elementos descritos anteriormente como “complementos” para elevarla y también porque los piases que pertenecieron a la extinguida URSS y China caen dentro de la esfera capitalista.

Lo que pasa por ser una “crisis financiera”, que desde luego lo es, pero con bastantes más matices de calado que no se dicen, y que predominan sobre lo que se dice acerca de la crisis, se reconoce oficialmente en 2008 pero, tiene su origen dos años atrás con el estallido de la “burbuja” inmobiliaria en Estados Unidos (en Estados Unidos no gobierna Zapatero ni ha gobernado Felipe González) que en pocos meses se convierte en crisis internacional de todo el sistema capitalista.
Es evidente que estamos en una crisis financiera, pero no lo es menos que la crisis financiera no es algo estanco con vida propia e independiente en sí misma que nada tenga que ver ni con la economía, ni con la política ni con la ideología, que es por donde hay que empezar para poder explicar la crisis financiera, que en definitiva no es sino la consecuencia, y no el origen, de un modo de producción concreto: el capitalismo.



*+
(1) Ver artículo publicado en este Blog el día 14 de Junio de 2.010: PARA EXPLICAR LA CRISIS DEL CAPITALISMO Y ACTUAR CONTRA ELLA
(2) Ver Obra citada

CASTILLOS EN EL AIRE