sábado, 14 de diciembre de 2019

ARROZ, ¿POR QUÉ SE TIENE QUE PASAR HAMBRE EN EL MUNDO? Y AHORA YA SI QUIEREN, FELIZ NAVIDAD



Lysenko triunfa en África de la mano de los cultivos chinos de arroz híbrido.

DIARIO OCTUBRE /diciembre 13, 2019




El rendimiento del arroz híbrido desarrollado por China en Madagascar es dos o tres veces mayor por hectárea que el de las variedades nativas, según Yuan Longping, el impulsor del arroz híbrido, en el primer Foro de Cooperación Agrícola China-África (FOCACA) celebrado el martes en Sanya, provincia de Hainan, al sur de China.

China invirtió 1,28 millones de dólares en la creación del centro experimental de arroz híbrido en Madagascar. Cultivaron 20.000 hectáreas de arroz con un rendimiento promedio de 8 toneladas por hectárea, anunció Yuan Longping.

“Tengo el deseo de desarrollar arroz híbrido en beneficio de personas de todo el mundo y de contribuir a la seguridad alimentaria y a la paz en el mundo”, explicó el agrónomo chino.

Los injertos e hibridaciones son una técnica agrícola de origen oriental que alcanzaron su máximo desarrollo en la Unión Soviético, impulsadas por Lysenko, un agrónomo despreciado e insultado durante la Guerra Fría porque contradijo el absurdo “dogma central” de la biología molecular.

El arroz híbrido crece en 17 millones de hectáreas en China, con un rendimiento medio de casi 9 toneladas por hectárea, lo que demuestra su heterosis, que no es otra cosa que un vigor por encima de las variedades puras basadas en el pedigrí.

Tanto en China como en África, los cultivos híbridos son, al menos, un 30 por ciento más productivos que los puros, habiéndose convertido en la materia estelar de las investigaciones agronómicas en Asia, donde el arroz es el alimento estrella.

Lysenko inició de forma sistemática sus experiencias en la URSS con trigo y hasta fechas recientes se consideraba difícil extenderlas al arroz a causa de la autopolinización. En 2004 Yuan Longping recibió el Premio Wolf, dedicado a la agronomía, al lograrlo.

En 1974 transfirió con éxito el gen de la esterilidad masculina de una especie de arroz silvestre para crear un linaje masculino citoplasmático estéril (CMS) y la combinación híbrida.

La primera generación de variedades híbridas de arroz eran híbridos que combinaban los tres linajes con rendimientos superiores en un 15 o un 20 por ciento a las variedades mejoradas o de alto rendimiento con el mismo tiempo de cultivo.

En 2011 un artículo publicado el China Daily afirmaba que el nuevo arroz híbrido podía producir 13,9 toneladas de arroz por hectárea. El mes pasado la agencia de noticias Xinhua informó de que la tercera generación de arroz híbrido desarrollado por Yuan Longping había alcanzado ya un rendimiento de 15,7 toneladas de arroz por hectárea.

La productividad de los campos de arroz es muy superior en China a los demás países asiáticos, a los que la nueva técnica se está extendiendo: Indonesia, Vietnam, Birmania, Bangladesh, India, Sri Lanka, Filipinas…

También se sabía que los cultivos habían llegado a Brasil y Estados Unidos, pero en 2010 la noticia de su desembarco en África fue una sorpresa. Ahora hemos conocido sus exitosos resultados.


Lysenko en 1948, defendiendo sus tesis ante un congreso de científicos soviéticos

*++

1 comentario:

Pepe Hermano dijo...

Magnífico artículo, "tierno estudiante de sociología". Realmente los chinos van muy por delante del resto del mundo en las tegnologías referentes a la hibridación en el arroz, entre otras cosas porque además de la tecnología hay que disponer de mano de obra barata,-pues conseguir, cada año, las semillas de forma manual y ser competitivos, éste último componente de tu "fórmula magistral" bien sabes que es indispensable-. Conoces que he estado multiplicando híbridos chinos durante más de diez años y cuando encontré el que me gustaba "el super-arroz de la Univerisdad de Hunan" no me servía porque su cultivo quedaba fuera de nuestra zona climática. Pero lo que ha resultado ser un éxito indiscutible para la gran mayoría de las zonas arroceras del mundo, casi toda Asia, Africa y parte de América, porque allí prima la cantidad sobre la calidad. En los paises donde se consumen variedades tradicionales, -que están tan cruzadas como las chinas pero sus "hijos" son variedades con genes ya fijados y depurados-, lo que se busca son arroces con características especiales destinadas a nichos de mercado definidos. Esas varidades híbridas chinas de alta producción suelen tener muchos problemas en nuestras zonas arroceras. Especialmente parten mucho los granos en molino al blanquearlos, además de ser de tallas muy altas y frondosas, lo que puede acarrear enfermedades y casi seguro el encamado.
Con ésto no quiero quitar ni un miligramo de valor del éxito consiguido por China en el aumento de la producción mundial de arroz, absolutamente necesario para equilibrar el aumento del consumo mundial, -más menos un 1% anual-, sin aumentar las superfies de terreno que cada vez son más escasas para la puesta en riego de arrozales.