martes, 28 de mayo de 2019

PERO YO PA QUÉ QUIERO LEER SI ESO ES TAN PESAO, OIGA



Conflicto de Estados Unidos contra China (I)
Mucho más que una guerra comercial

ASIER / REBELION


Rebelión

Barómetro Latinoamericano
28.05.2019


El planeta se encuentra suspendido de un hilo y sigue con suma expectación las noticias vinculadas a lo que se ha dado en llamar “guerra comercial” entre Estados Unidos y China. Vale debatir si en realidad se trata de una guerra y si en verdad las causas de su inicio y la actual escalada tiene un trasfondo de orden comercial. 
 Como es sabido, este conflicto fue iniciado en marzo de 2018 tras un anuncio realizado por el presidente de Estados Unidos Donald Trump, quien informó su decisión de imponer aranceles por un monto 50 mil millones de dólares a los productos chinos bajo el artículo 301 de la Ley de Comercio de 1974, sustentado en el supuesto de “prácticas desleales de comercio” y “robo de propiedad intelectual” por parte de la nación asiática. Unos días después, China respondió aplicando aranceles a 128 productos estadounidenses, dando origen de esa manera a un escalamiento del diferendo que pareció entrar en una etapa de tregua y posteriores negociaciones tras el encuentro de los presidentes de ambos países en Buenos Aires el pasado 1° de diciembre en el marco de la celebración de la Cumbre del G-20.
Sin embargo, tras 11 rondas de conversaciones realizadas en ambas capitales, el conflicto lejos de acercase a una culminación exitosa, ha escalado incluso con la decisión de imponer nuevos aranceles por parte de Estados Unidos justo cuando estaba por comenzar la realización de ese décimo primer encuentro bilateral que se habría de realizar en Washington durante la segunda semana de este mes de mayo.

El 10 de mayo Estados Unidos aumentó los aranceles a las importaciones chinas por un valor de 300 mil millones de dólares elevándolos de 10 a 25%, a lo que Beijing respondió anunciando un plan que se propone introducir gravámenes sobre las importaciones estadounidenses a partir del 1° de junio por valor de 60 mil millones de dólares.

Pero, como hemos dicho con anterioridad, el verdadero eje del problema es que la República Popular China va logrando una superioridad tecnológica respecto de Estados Unidos que la coloca en una mejor posición para avanzar en su desarrollo hacia una economía fortalecida que la va a colocar en las próximas décadas en la vanguardia económica del planeta y que a través del Plan de la Nueva Ruta de la Seda ha generado un mecanismo que trae prosperidad no sólo a su país sino a otros pueblos del mundo corroyendo con ello el sistema mediante el cual se usan las relaciones económicas internacionales como instrumento de opresión, subordinación y miseria para la mayor parte de la humanidad.

De manera tal que tras la llamada guerra comercial se esconde en realidad una guerra tecnológica que es expresión de la desesperación estadounidense por el elevado desarrollo científico chino, que por primera vez en los últimos 130 años ha coloca a la potencia norteamericana en un lugar secundario en este ámbito.

El principal conflicto se ha desatado en torno a la nueva generación de comunicación móvil denominada 5G obtenida por China con un adelanto de 8 meses respecto de Estados Unidos. Vale decir que este país había consiguiendo la primacía en las previas 3G y 4G. La tecnología 5G traerá indudables implicaciones en las actividades sociales, geopolíticas, empresariales y militares al ser 40 veces más rápida que la 4G y tener una capacidad de transmisión de datos ostensiblemente mayor al poder desarrollar a través de ella la conexión de grandes bases de datos, la expansión de aplicaciones de inteligencia artificial, incluyendo robótica de carácter avanzado y la posibilidad de múltiples conexiones ultrarrápidas de internet entre ciudadanos, organizaciones y cosas como dinero móvil, vehículos sin conductores, cirugías a distancia, enseñanza virtual y uso de drones, mucho de lo cual ya está en uso en China.

En la escalada del problema creado, el pasado 12 de mayo el gobierno de Estados Unidos difundió una lista de casi cuatro mil productos chinos a los cuales podría imponer nuevos aranceles, al mismo tiempo el presidente Trump dijo que estaba estudiando la posibilidad de decidir aplicar tarifas del 25% al resto de las mercancías chinas que hasta ese momento no tenían tales gravámenes y que había dado instrucciones para dar los pasos iniciales en esa dirección a partir de lo cual la administración estadounidense dio inicio formal al proceso de aprobación de nuevos impuestos con la publicación de un listado de 3805 categorías de bienes valorados en 300 mil millones de dólares anuales, el cual incluye mercancías como celulares, computadoras personales, leche, acero y aluminio.

De manera frontal, y utilizando un tono inusitado para su tradición diplomática, la respuesta china fue frontal, el martes 14 de mayo el portavoz de la Cancillería, Geng Shuang informó que “La experiencia anterior fue testimonio de que China no quiere una guerra comercial, pero tampoco tiene miedo de ella; si alguien provoca una guerra en la entrada a nuestra casa, vamos a luchar hasta vencer”. Geng también manifestó la esperanza de que Estados Unidos no menosprecie la disposición de China de defender sus intereses. De manera clara, China ha asumido que lo que ha decidido Estados Unidos es la realización de una guerra y como tal se está preparando para defenderse y contrarrestar los efectos de la misma. No hay que olvidar que la guerra es la continuación de la política y Estados Unidos ha decidido una política de confrontación y enfrentamiento para lograr la derrota del enemigo.

Al día siguiente, 15 de mayo, en un editorial titulado: "China ha hecho la preparación integral" leída en el noticiero estelar de la Televisión Central de China (CCTV) el gobierno envió un mensaje al pueblo en el que se informa acerca de de su posición en torno a la confrontación planteada por Estados Unidos. En el mismo se comunica que "…no queremos esta lucha, pero no tenemos miedo y vamos a luchar si es necesario". En el imaginario de los ciudadanos chinos, el trasfondo del conflicto no tiene carácter comercial ni económico, sino que lo ha entendido como una lucha por el honor y en salvaguarda de la integridad del país. El editorial antes mencionado toma nota de este sentimiento y lo manifiesta de la siguiente forma: "Para la nación china que ha experimentado varias tormentas en los últimos 5.000 años, ¿hay alguna situación que no hemos visto antes? En el proceso de la gran revitalización de la nación, tiene que haber dificultades e incluso olas terribles. La guerra comercial provocada por Estados Unidos es sólo una barrera en el camino de desarrollo de China, y no es un gran problema en absoluto".

La respuesta china produjo irritación extrema en Washington, no acostumbrado a que alguien en el mundo le responda de igual a igual, el jueves 16 de mayo, el presidente Trump afirmó que China resultaría gravemente perjudicada si los dos países no llegan a un acuerdo comercial porque las tarifas impuestas por Estados Unidos obligarán a las compañías a trasladar la producción a otros países.

Vale considerar que en su comparecencia ante los medios de comunicación el portavoz Geng había expresado que Estados Unidos no necesitaba preocuparse por la estabilidad de China porque durante las cuatro décadas de desarrollo de la política de reforma y apertura, el entorno de inversión extranjera del país había mejorado continuamente, lo que ha conducido a que China sea uno de los mayores destinos en el mundo para la inversión extranjera alcanzando un nivel récord en diciembre del año pasado.

Este último aumento de las tasas, impulsado por el presidente Trump y los planes de China de contrarrestarlas, han influido negativamente en las empresas estadounidenses afincadas en el país asiático. En ese marco, contradiciendo a Trump quien afirmó que lo que tenían que hacer las empresas estadounidenses era construir sus fábricas o manufacturar sus productos en Estados Unidos, para lo cual no tendrían que pagar ningún arancel, algunas de las principales compañías han dudado de ese ofrecimiento e incluso Exxon Mobil decidió establecer un proyecto de productos petroquímicos a gran escala en China. De la misma manera, la fabricante de vehículos eléctricos Tesla comenzó oficialmente la construcción de una planta de fabricación en Shanghái, su primera en el extranjero, y la corporación agrícola Cargill decidió ampliar su capacidad de procesamiento central en la provincia china de Jilin en abril. De la misma manera, un grupo de 170 empresas de la industria del calzado encabezadas por Adidas, Nike, Converse, Puma y Clarks entre otras, han enviado una carta al presidente Donald Trump en la que le instaron a reconsiderar los aranceles a los zapatos fabricados en China, al estimar que tal política puede resultar "catastrófica" para "empresas, consumidores y la economía estadounidense en general", considerando que el 72% de los zapatos que importa Estados Unidos, provienen de China.

Tales hechos dan cuenta de que estas empresas, dado su carácter transnacional no necesariamente actúan en sintonía con su país de origen, sino que deciden sus destinos de inversión y eligen a sus socios comerciales a partir de sus mejores intereses en la búsqueda de mayor ganancia. Retirarse de China podría significar para estas empresas la pérdida del mayor mercado mundial, que además está en permanente expansión dados los importantes avances de China en la lucha contra la pobreza y el incremento constante en los niveles de consumo de su población.

Por otra parte, en un esfuerzo por atraer nuevos inversionistas y mantener los que tienen, China continúa reduciendo las limitaciones para la inversión extranjera, reservándose para si, solo las áreas estratégicas de la economía y las que están vinculadas a la industria para la defensa.

En ese ámbito, la nueva Ley de Inversión Extranjera, que entrará en vigencia el 1° de enero de 2020, fomentará más inversiones en China ya que generará una mayor confianza en un entorno estable, transparente, previsible y justo para las inversiones extranjeras. Las medidas para la ampliación y mayor eficiencia (que incluye una fuerte lucha contra la corrupción) en la aplicación de la política de reforma y apertura permitirán además la racionalización y una mayor descentralización en la toma de decisiones incidiendo en la creación de un mejor ambiente empresarial en el país.

En esa medida, Estados Unidos se enfrenta a racionales políticas de Estado asumidas por la dirección china encaminadas a hacer avanzar la economía, evitando en todo momento el conflicto y enfrentándolo solo porque es un escollo que la insensata administración Trump ha planeado como vía para que su país pueda salir del marasmo económico en el que se encuentra.

En ese sentido, los datos que aporta una encuesta realizada entre el 16 y el 20 de mayo de manera conjunta por la Cámara de Comercio Americana en Shanghái (AmCham Shanghai) y la Cámara de Comercio Americana en China, con sede en Beijing (AmCham China) establece con claridad que las medidas tomadas por el presidente Trump están incidiendo negativamente en las empresas estadounidenses que se encuentran en China. La pesquisa da cuenta que el mayor impacto viene dado por el perjuicio a la competitividad de la gran mayoría de los encuestados (el 74,9%), lo cual se ha reflejado en una menor demanda de mercancías, mayores costos de producción y superiores precios de venta de productos que condujeron a mayores costos operativos que tuvieron fuerte impacto en el 45,6% de las empresas que se vieron impelidas a localizar fuentes alternas para la colocación de sus productos.

No obstante, China había tomado medidas en ese sentido, cuya comprensión generó grandes debates en diferentes escenarios, en torno al estado real de la economía china, toda vez que las mismas expusieron que ella se encontraba en un proceso de ralentización indetenible, sin embargo, el gobierno chino explicaba que dadas las dificultades por las que atravesaba la economía global se hacía necesario disminuir las metas en el crecimiento del PIB, y trasladar el producto que emanaba de esa mengua en el flujo de las exportaciones a su gigantesco mercado interno que todavía posee un gran potencial para absorber los excedentes de producción que el conflicto generado por el gobierno de Estados Unidos podría crear. Así, muchas empresas estadounidenses y de otros países, se han acogido al plan “En China, para China” que consiste en ubicar su producción en el mercado local de un país poseedor de un potencial de 1.4 millones de consumidores. El gigantesco mercado chino es la primera arma que tiene ese país para enfrentar la guerra de Trump… pero no es la única.


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CUANDO LA IZQUIERDA SE DISFRAZA DE PALANGANA DEL CAPITAL (Quiere decirse que no es de izquierda), SUS EFECTOS SON COMO SI HUBIERAN GOBERNADO CUATRO DERECHAS JUNTAS, TAL QUE SI EL SEÑOR ERREJÓN HACE UN PARTIDO A NIVEL NACIONAL PARA DAME LA MANITA PEPE LUIS (Pepe Luis es PSOE), LO CUAL NO ES PARA AHORA MISMO, SINO PARA DENTRO DE CUATRO AÑOS, Y SI NO, QUE DIOS ME LO DEMANDE, QUE EN ESTO DIOS Y YO ANDAMOS A PARTIR UN PIÑÓN



Elecciones al Parlamento europeo

Notas sobre el resultado en Grecia




Stathis Kouvelakis
Vientosur
27.05.2019 

Hay que ser claros: es un desastre aún peor de lo que preveían los más pesimistas.

El cuadro general: Syriza sufre un gran castigo y Tsipras anuncia elecciones anticipadas para finales de junio en aras de limitar al máximo los efectos negativos [de estas elecciones]. La comunicación, utilizada hasta el cansancio por el gobierno y sus medias, y las medidas sociales que aparecían como regalitos pre electorales no han logrado modificar mucho la situación: el electorado ha sancionado a un equipo que durante cuatro años ha aplicado sin fisura un tercer memorándum austeritario.

En este sentido, las declaraciones realizadas esta mañana por Nikos Filis, hombre fuerte de la actual dirección de Syriza y exministro de educación, son totalmente significativas: "la primera razón [de la derrota] es la aplicación de los Memorándum. Tal vez menos doloroso que el anterior y que Syriza trató de encontrar pistas para favorecer a nuestros ciudadanos más débiles, pero a fin de cuentas los Memorándum se aplicaron en una línea neoliberal. El doloroso compromiso trajo consigo otros compromisos. Ningún partido ha escapado a la suerte a la que le condena [la aplicación de] el Memorándum. Nueva Democracia cayo y ha logrado reconstruirse y el Pasok se ha hundido".

1. Las elecciones de junio serán un paseo para la derecha, con posibilidades de llegar a obtener la mayoría absoluta. La diferencia entre Syriza y Nueva Democracia es más importante que lo previsto (cerca del 10%, un récord para lo que es habitual en las elecciones de estos últimos diez años) y se agudiza por el revés de Syriza en las municipales y regionales. La desaprobación de Tsipras y su gobierno es neta.

Por otra parte, un análisis más detallado muestra que el electorado de Syriza en 2019 tiene poca relación con el de 2015 [año que ganó las elecciones. ndt]. Es verdad, que sin adversarios creíbles a la izquierda (en el sentido amplio) del espectro político, no se hunde y esa es la diferencia con el Pasok de 2010. Continúa obteniendo resultados significativos, tanto a nivel nacional como en determinados barrios populares, en los que le sigue muy de cerca (y a veces le supera) la derecha. Pero el perfil cualitativo de esta base electoral no es la misma que antes. Al respecto, resulta ilustrativo echar un vistazo a las opciones realizadas por el electorado de Syriza entre los candidatos de la lista para el Parlamento europeo. En relación a los seis euroescaños obtenidos por Syriza, escaños repartidos en función de los votos preferenciales (cada elector/a puede marcar hasta cuatro nombres en la lista de una candidatura), la candidata que llegó en segundo lugar, Elena Kountoura viene del partido nacional-soberanista de Panos Kammenos [Griegos independientes] (socio gubernamental de Syriza hasta la validación del acuerdo con Macedonia), con un discurso claramente nacionalista y xenófobo. El quinto electo, Alexis Georgoulis, es un actor con perfil de galán en las series televisivas, que se ha presentado por la lista de Nueva Democracia. Por último, el 6º electo, Petros Kokkalis, es verdad, es el nieto del doctor Kokkalis, médico y ministro en el gobierno rebelde del Ejército Democrático durante la guerra civil (que después se refugió en Alemania del Este), pero sobretodo es el heredero del oligarca Sokratis Kokkalis, que amasó su fortuna en las telecomunicaciones en los años 80 aprovechando su relación con Andreas Papndreou. El electorado actual de Syriza se parece más a la clientela desideologizada de un partido gubernamental que a la de un partido de izquierdas. Por otra parte, resulta evidente que hereda a sectores del Pasok social-liberal de los años 2000: en las cuatro únicas circunscripciones en las que Syriza se sitúa en cabeza, tres son antiguos bastiones míticos del Pasok: en Creta y en el noroeste del Peloponeso, alrededor de Patras, cuna de la familia Papandreu.

2. Emerge un nuevo partido de extrema derecha: Solución Griega, fruto de las movilizaciones nacionalistas [en el conflicto] sobre Macedonia y el desgaste de Amanecer Dorado. Ha realizado excelentes resultados en el norte de Grecia (donde las movilizaciones fueron más fuertes) y casi se sitúa al mismo nivel que Amanecer Dorado en el ámbito nacional (4,1 y 4,8% respectivamente). Es posible que la extrema derecha griega haya encontrado una imagen más respetable que los criminales de Amanecer Dorado y que se sitúe con capacidad para avanzar en el futuro. Otro indicador inquietante del potencial de la extrema derecha es el resultado obtenido por Amanecer Dorado entre los nuevos votantes: alrededor del 13% según una encuesta.

3. El KKE [PC griego] se mantiene con los mismos resultados que en 2015 (5,5%), pero pierde votos en relación a las europeas de 2014 (6,1%). Los resultados que ha obtenido en las regionales muestran igualmente una baja notoria en relación al escrutinio de 2014; en torno al 20%. El KKE es un partido cuya influencia se va gastando de forma lenta pero segura.

4. La sorpresa de las elecciones (tanto para mí como en general) es el inesperado éxito de Varoufakis (3%: sin duda, un electo al parlamento europeo, si bien hay que esperar a que termine el recuento de votos). Zoé Kostantopoulou, con un 1,6%, también salva los muebles en cierta modo. El análisis de los resultados de estas dos formaciones muestra un electorado difuso y relativamente homogéneo, con resultado un poco mejores en las grandes ciudades, sin picos y sin calvas. En definitiva, un voto difuso de simpatía, basado en la presencia mediática y la visibilidad de las personalidades que dirigen estas formaciones y que refleja la falta de implantación en términos organizativos. La elección, si se confirma, de Sofia Sakorafa, eurodiputada saliente de Syriza, en la lista de Varoufakis, resulta interesante. En la memoria colectiva, su nombre está relacionado con las movilizaciones contra los Memorándum de los años 2010-2012. Es una buena noticia para Varoufakis; por el momento la única, pero es probable que a partir de ahora se sienta capaz de atraer una parte importante de la gente decepcionada con Syriza, sobre todo a nivel de cuadros, de personalidades, etc. Por otra parte, parece que su candidatura ha obtenido buenos resultados entre la juventud (sobre todo entre la juventud diplomada de la clase media): según una encuesta a pie de urna, habría obtenido el 4,5% entre las y los nuevos votantes; es decir, más que el KKE al que se le sitúa en el 3,7% en esta franja, a pesar de que cuenta con una verdadera organización juvenil.

5. El éxito de Varoufakis y el resultado relativamente honorable de Kontantopoulou hace que los resultados de la Unidad Popular y de Antarsya sean aún más lacerantes. Mucho más para la primera que para la segunda. Y todo ello, en unas elecciones en las que el voto útil juega netamente menos que en las elecciones nacionales. Esta derrota va a tener graves consecuencias porque se trata de las dos únicas fuerzas que cuentan con redes militantes, a diferencia de Varoufakis y de Kostantopoulou que no existen más que en el terreno mediático.

Antarsya 1/ ha obtenido unos resultados muy bajos (0,66%) si bien comparables al de elecciones precedentes, fueran europeas o nacionales (en todas ellas entre el 0,85% y el 0,65% en 2014 y 2015). Su principal fracaso se da en las elecciones municipales de Atenas, en la que se presentaron dos listas, dado que SEK (sección griega de la IST dirigida por el SWP británico) presentó la suya propia. Ambas han logrado obtener representantes, pero el electorado de 2014 (en torno al 2%) se ha partido por la mitad dilapidándose el capital político acumulado durante años de trabajo militante.

6. La Unidad Popular ha obtenido un resultado humillante (0,58%), sobretodo si se comprar con el de las legislativas de septiembre de 2015 (2,93%) [antes no existía, ndt], único punto de comparación para esta formación. En este resultado ha jugado un rechazo personal hacia Lafazanis, pero también la política impulsada por su corriente, y constituye un fracaso colectivo para la Unidad Popular. Voy a señalar de forma sumaria algunos de los factores que han determinado esta derrota.

Existe, de entrada, un problema de dirección, aún cuando no se pueda reducir todo a ello, porque sería reductor e injusto. No obstante hay que señalar Lafazanis está notablemente gastado y desacreditado, no solo a causa de su evidente fracaso a la hora de oponerse de forma eficaz a la capitulación [de Syriza] en el verano de 2015, sino también por las derivas del último período, marcadas por un flirteo con el nacionalismo (en particular con la cuestión de Macedonia) y su aparición en una cadena de televisión de la extrema derecha (que desencadenó una bronca interna en la UP). Es preciso señalar que Kostantopoulou fue más lejos en este tema (llamó a participar en las movilizaciones nacionalista), pero ella no se dirige al mismo electorado. Es incontestable que estas tomas de posición han fragilizado considerablemente a la UP, deteriorando más aún su coherencia interna y su imagen moral ante sectores de la izquierda militante y anticapitalista. 

Por otra parte, la monopolización de la presencia mediática y pública de la UP por su parte sentaba cada vez peor, y todos los intentos por renovar la imagen con gente nueva chocaban con su corriente.

La corriente de Lafazanis, mayoritaria en la dirección de la UP (tras un congreso cargado de maniobras) no se ha preocupado por construir la Unidad Popular como la casa común para el conjunto de sus componentes, lo que ha resultado tanto más perjudicial en la medidas que la misma está compuesta por viejos cuadros salidos de la escisión del KKE en 1991, que transmiten una cultura marcadamente burocrática y la cerrada hacia las sensibilidades (y las prácticas) de los movimientos sociales.

Ello ha conducido a una hemorragia militante continúa en la UP, sobre todo tras su congreso fundados en junio de 2016 que logró movilizar alrededor de 5000 militantes, un colectivo considerable si se tienen en cuenta las condiciones tras el 2015.

Es cierto que la UP y sus militantes han estado presentes en todas las movilizaciones del último período (como lo ha estado Antarsya) pero han tenido la tendencia a abandonar el trabajo de base y reemplazarlo por acciones simbólicas o micro-acciones, impulsadas bajo sus siglas, en el movimiento contra los desahucios. Esta corriente se ha caracterizado especialmente por ello.

7. Por último, pero no menos importante, tano UP como Antarsya han subestimado de forma grave la necesidad de presentar propuestas alternativas creíbles y trabajadas, creyendo que era suficiente con denunciar al gobierno de Syriza y llamar a salir del euro y de la UE. En una situación de desmoralización en la que predomina el TINA [no hay alternativa], ese discurso aparece como mera retórica y no convence a nadie. La ausencia de un verdadero proyecto ha permitido que Varoufakis aparezca como estandarte de un mensaje innovador y sexy, jugando con habilidad la carta de una oposición moderada y eurocompatible a Tsipras y Syriza.

8. Último elemento que confirma el doble fracaso de los partidos militantes de la izquierda anticapitalista: sus listas a las elecciones regionales han obtenido resultados muy bajos (en general entre el 1,5 y el 2%; en ocasiones UP o listas apoyadas por UP llegaban al 3%), pero sensiblemente superiores a los resultados para las europeas, logrando obtener algunos escaños en los consejos regionales. El mismo fenómeno se da en las elecciones municipales allí donde las mismas representan un trabajo y una implantación real a nivel local. A mi entender, ello muestra bien la incapacidad (para mí irreversible) tanto de Antarsya y, más aún –dado que se trataba de la única fuerza nueva en la izquierda radical a partir del verano de 2015) de la UP para estructura una fuerza política viable.

El futuro se presenta más complicado aún en la medida que en el ámbito electoral, Varoufakis aparece con capacidad para ocupar ese espacio intermedio a la izquierda de Syriza y sin duda abierto, moderadamente, a acuerdos cuando Syriza pase a la oposición, y que sólo el KKE continúa teniendo una base militante y una credibilidad electoral en la izquierda radical, si bien encerrado en un sectarismo delirante que le condena a un lent (y para mí irreversible) proceso de declive.

Evidentemente, el trabajo de reconstrucción se dará a largo plazo, si bien existe una urgencia por abrir nuevos caminos.

25/5/2019
Stathis Kouvelakis, miembro de la Unidad Popular y candidato en sus listas para las elecciones europeas.
Traducción: viento sur
Notas:
1/ Las organizaciones que componen a ANTARSYA son:
· Ecologistas Alternativos (O.E.) de tendencia ecosocialista.
· Grupo de Izquierda (A.S.) de tendencia maoísta y escisión de ARAS.
· Nueva Corriente de Izquierda (NAR) de tendencia estalinista y escisión del KKE.
· Organización de los Comunistas Internacionalistas de Grecia–Espartaco, de tendencia trotskista y sección griega del Secretariado Unificado (OKDE-Spártakos).
· Movimiento Comunista Revolucionario de Grecia (EKKE) de tendencia maoísta y miembro de la vieja coalición MERA.
· Partido Socialista de los Trabajadores (SEK) de tendencia cliffista y sección griega de la IST.

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PODEMOS (¡Pero es que hay que poder!): LA AUTOCRÍTICA MÁS NECESARIA QUE EL COMER (Pero no una autodrítica entre los listos, que eso sería una domestic-critic, que solo valdria para de aquí no me echa ni Dios) Y UNA BUENA DIMISIÓN DE PABLO IGLESIAS, SIN ABANDONAR EL PARTIDO, QUE EL PARTIDO LE HA DADO MUCHO, Y PORQUE DIMITA NO LE VA A RESTAR UN ÁPICE DEL VALOR QUE TIENE Y QUE DEBE APORTAR AL PARTIDO. Y SOBRE TODO, QUE ES LO FUNDAMENTAL, QUE LOS CIRCULOS FUNCIONEN, VERBO FUNCIONAR, PARA DECIDIR QUÉ SE HACE, QUÉ NO SE HACE, QUIEN DIRIGE EN FUNCIÓN DE LO QUE LOS CÍRCULOS DIGAN Y QUIEN NO VA A DIRIGIR SEGÚN DIGAN LOS CÍRCULOS



¿Más Errejón? 

TERCERAINFORMACIÓN
27/05/2019 

 Fotos: @MasMadridCM 

Quiero equivocarme, pero tras años de paciente observación de todo aquello ubicado a la izquierda del PSOE imagino otro tropiezo contra la misma piedra. Las palabras de Iñigo Errejón en su discurso como "derrotado" en la Comunidad de Madrid parecieron toda una declaración de intenciones: "Ha nacido una izquierda diferente [...] espero que Podemos no eche balones fuera sobre sus resultados"... es decir, estamos aquí para quedarnos y ya andamos discutiendo si la marca de nuestro partido en el Ayuntamiento y en la Comunidad de Madrid debe trasladarse a escala nacional. A pesar de lamentar el resultado, Errejón ha querido subrayar en su discurso que "Manuela Carmena ha ganado las elecciones en Madrid". También que la irrupción de "Mas Madrid" en la Asamblea con 20 escaños ha servido para "ensanchar la izquierda" en una vocación trasversal que empieza a irse de las manos. Porque de tanto "ensanchar" la izquierda, uno diría que llega un punto en el que lo que se está ensanchando es la derecha, si nos atenemos al programa o al estudio detenido de las medidas concretas aplicadas en la pasada legislatura.

Más Madrid logra en la Comunidad 20 escaños y 470.822 votos (14,72%) y se queda como cuarta fuerza en la Asamblea por detrás del PSOE, pero, al igual que en el caso de Pedro Sánchez, debiera tener muy presente que gran parte del voto fugado desde Unidas Podemos o de sus versiones en diversos territorios, no se debe a méritos propios, sino más bien a cuestiones estratégicas relacionadas con el sistema electoral y al objetivo de evitar a toda costa la victoria del nefasto bloque PP-Cs-Vox. Es un voto del miedo, no tanto de la ilusión.

"Espero que Podemos no eche balones fuera por sus resultados", ha dicho Errejón, invitando a Pablo Iglesias a una autocrítica que -no nos engañemos- exonere a Manuela Carmena y a él mismo en la responsabilidad de la división del voto en Madrid. Fue precisamente la propia Carmena la que expulsó a Podemos, a Izquierda Unida, a Ganemos Madrid y al resto de actores de Ahora Madrid de la antes exitosa confluencia, quedándose esta con su liderazgo, con el apoyo mediático y con la fuerza del merchandising que tan bien funciona en las capas más modernas del PSOE. Fue Carmena quien sacrificó a su sobresaliente concejal de Economía, Carlos Sánchez Mato, ante el altar ensangrentado de Cristobal Montoro. Fue Íñigo Errejón el que dio por finiquitada su etapa en Podemos tras perder con claridad en Vistalegre II y poco antes de las citas electorales.

"Hemos demostrado que la pluralidad, que ensanchar, que abrirse suma más. Hemos estado a punto conseguir una victoria progresista y vamos a seguir trabajando para mejorar", dijo también Errejón. "Estamos orgullosos de la irrupción en una situación en las que las fuerzas de izquierdas retroceden. Tenemos una forma de hacer política diferente" continuó... Como decía, espero equivocarme, pero estas palabras parecen vaticinar la fundación de su partido a escala nacional, aunque suponemos que con otro nombre, porque "Más España" sonaria tan transversal que incluso ganaría votos desde algún despistado de Cs y VOX. Tal ocurrencia -peligrosa como pocas- podría ahondar en una fragmentación que condenase cualquier esperanza de acabar con las políticas neoliberales en sus dos versiones, la socialdecrócrata o enésima refundación de una tercera vía, donde la reforma laboral y la ley mordaza no se derogan, sino que se reforman, y la conservadora con tintes neofascistas.

Si Errejón opta por seguir con su aventura en solitario creará una marca entre PSOE y Unidas Podemos, que fragmentará aún más el voto ante PP-Cs-Vox al margen de su éxito personal o si consigue o no sobrepasar a Unidas Podemos. Tal opción encontrará el cobijo y el cariño de los medios corporativos, encantados ante el sombrío panorama para la justicia social en nuestro país, pero también de otros más cercanos ahora a Unidas Podemos, como eldiario.es. Podemos ocupará el espacio que llenó Izquierda Unida hasta que se impuso la cordura, como la "vieja política", y entonces, solo entonces, el tándem Errejón-Carmena invitará graciosamente a la izquierda "radical" a incorporarse a su plataforma o desaparecer.
Ante la cuestión de un periodista en la rueda de prensa en la que Más Madrid valoró sus resultados -"tiene pensado hablar con Pablo Iglesias estos días"- Errejón quiso responder enseguida: "con respecto a la segunda pregunta, no" [...] "Lo dijimos muchas veces, en política dos más dos no son cuatro, y creo que esta vez lo hemos vuelto a demostrar".

Lo dicho, esperemos que se imponga una estrategia donde quepan todas unidas antes que los egos y los proyectos parciales, donde nadie quede fuera. La historia nos cuenta que los proyectos duros y cohesionados son aquellos que se cocinan a fuego lento, con todos los ingredientes.
Espero equivocarme.

La opinión del autor no coincide necesariamente con la de TerceraInformación






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