Precedente histórico: un juez ordena detener el envío de
armas a Israel
21/07/2025
Fuentes: Rebelión [Foto: Marc Vandepitte]
Traducido del neerlandés por el autor
Un fallo sin precedentes
de un tribunal de Bruselas no solo ordenó al gobierno flamenco detener un envío
específico de material militar destinado a Israel, sino que también prohibió
cualquier tránsito futuro de armamento hacia ese país. Esta sentencia sienta un
precedente jurídico que se podría aplicar en muchos otros países. Es, además,
una victoria importante en la lucha contra el genocidio en Gaza.
Precedente
En un fallo sin
precedentes el Tribunal de Primera Instancia de Bruselas ordenó al gobierno
flamenco detener de inmediato un contenedor con material militar destinado a
Israel, así como prohibir cualquier otro tránsito de armamento hacia ese país.
El juez dictaminó que
Flandes —una región del norte de Bélgica— incumple estructuralmente sus
obligaciones según la legislación sobre armas y los tratados internacionales, e
impuso incluso una multa coercitiva por cada envío que aún se permita. Dio la
razón en todos los puntos a cuatro ONG flamencas que presentaron la demanda.
El contenedor en
cuestión se encuentra en el puerto de Amberes. Contiene rodamientos cónicos
fabricados por la empresa Timken a través de una filial francesa y destinados a
Ashot Ashkelon Industries, una empresa de defensa israelí que suministra piezas
para los tanques Merkava y los vehículos blindados Namer. Según las
organizaciones demandantes, ambos se utilizan diariamente en el contexto del
genocidio en Gaza.
La sentencia del
tribunal prohíbe al gobierno flamenco autorizar nuevos tránsitos hacia Israel.
Desde 2009 existe un acuerdo para no exportar armas a Israel que puedan
fortalecer sus fuerzas armadas, pero en la práctica se ha ignorado
sistemáticamente esa política.
Para garantizar el
cumplimiento de la sentencia, el tribunal impone una multa de 50.000 euros por
cada envío que se permita aún hacia Israel.
Solo se podrán autorizar
exportaciones si el gobierno flamenco presenta pruebas documentadas de que los
productos tienen un uso civil. Según la abogada defensora del caso Lies
Michielsen, de Progress Lawyers Network, la sentencia implica que el gobierno
debe verificar activamente el destino final del material
exportado a Israel.
Importancia
Esta decisión es muy
significativa porque el tribunal confirma que es ilegal facilitar la entrega de
armas a un Estado que comete crímenes de guerra o incluso genocidio.
“El tribunal afirma lo
que los políticos se niegan a reconocer”, dice Fien De Meyer de la Liga por los
Derechos Humanos.
Esto marca el fin de la
impunidad: los gobiernos ya no pueden mirar a otro lado mientras sus armas se
utilizan para cometer atrocidades.
La sentencia crea un
precedente jurídico que obliga a los gobiernos a asumir su responsabilidad. Se
espera que causas similares sigan en otros países.
En todo caso, se trata
de una victoria para los movimientos por la paz y la solidaridad, que demuestra
que la resistencia funciona.
Seguimiento
Casi al mismo tiempo, se
presentó en Bélgica otra demanda,
esta vez contra el gobierno federal. Un grupo de demandantes palestinos y
organizaciones belgas enviaron una notificación formal que hacía a Bélgica
responsable de complicidad pasiva en el genocidio en Gaza. Si no reciben una
respuesta satisfactoria, acudirán a los tribunales. También eso sienta un
precedente mundial.
La iniciativa cuenta con
el apoyo de un ciudadano palestino, varias ONG belgas y una jurista. Exigen que
Bélgica detenga todas las entregas militares a Israel, confisque importaciones
procedentes de territorios palestinos ocupados, bloquee inversiones en dichas
zonas y suspenda el acuerdo de asociación entre la UE e Israel.
Según los demandantes,
la pasividad belga es inaceptable tanto moral como jurídicamente. La acción
cuenta con el respaldo de artistas e intelectuales que están recaudando fondos
para cubrir los costos judiciales.
También se están tomando
medidas en el ámbito europeo. La ONG jurídica JURDI ha llevado a la Comisión
Europea y al Consejo de la UE ante el Tribunal de Justicia por su “negligencia”
frente a la violencia en Gaza. Por primera vez en la historia se demanda a
estas dos poderosas instituciones por no cumplir con sus obligaciones legales.
JURDI invoca el artículo
265 del Tratado de la UE, que permite sancionar la inacción institucional.
Según la ONG, las instituciones europeas aplican un doble rasero: sancionaron
duramente a Rusia, pero no a Israel, pese a las graves violaciones de derechos
humanos documentadas.
JURDI exige, entre otras
cosas, la suspensión del acuerdo UE-Israel, el cese de las subvenciones y
sanciones contra funcionarios israelíes. La demanda sostiene que la UE tiene
una obligación jurídica y moral de actuar, y advierte que incluso los líderes
europeos podrían ser procesados por complicidad en el genocidio.
Complicidad
En estos casos es
fundamental la siguiente pregunta: ¿tiene un país como tercera parte o, por
extensión la Comisión Europea la obligación jurídica de prevenir un genocidio
en otro lugar? Según la Convención sobre el Genocidio, sí. Según ese tratado,
cada país no solo debe castigar, sino también prevenir activamente.
En enero la Corte
Internacional de Justicia ya llamó a Israel a tomar todas las medidas
necesarias para prevenir un genocidio. Pero ¿se aplica también esa obligación a
países como Bélgica, que no están directamente involucrados? Según dieciocho
destacados juristas belgas, sí. En una carta advierten
que un país como Bélgica corre el riesgo de ser llevado ante la Corte
Internacional de Justicia si continúa guardando silencio sobre la situación en
Gaza. La pasividad puede ser interpretada jurídicamente como complicidad.
Los juristas exigen
sanciones contra Israel y consideran que la suspensión del Acuerdo de
Asociación UE-Israel es lo mínimo que se debe hacer. Los países se esconden con
demasiada frecuencia tras la prudencia diplomática, pero esa actitud se vuelve
jurídicamente y moralmente insostenible, según ellos. Solo acciones concretas,
no palabras, pueden salvar la credibilidad de Bélgica y de la UE.
Sin pausa
La sentencia ganada en
Flandes y otras demandas en curso representan un salto cualitativo en la lucha
contra el genocidio. Pero esa lucha está lejos de haber terminado. El genocidio
no hace pausas. Mientras los políticos titubean, la población de Gaza sufre.
Ahora es el momento de
mantener e intensificar la presión. Se deben presentar demandas judiciales en
otros países también. Las demandas clave incluyen la aplicación inmediata de la
prohibición de exportar armas, transparencia total sobre la exportación de
material militar y el enjuiciamiento de quienes sean cómplices de estos
crímenes.
Demandas como esta son
muy importantes, pero sin duda no son suficientes para detener las masacres en
Gaza. Se debe presionar a los líderes políticos de todo el mundo mediante
protestas masivas y acciones de solidaridad.
Los movimientos de
resistencia palestina en Gaza han lanzado por ello un llamado conjunto a
una movilización mundial a partir del 20 de julio de 2025 para salvar a la
población de Gaza del genocidio, el hambre y la sed causados por la ocupación
israelí.
Denuncian el silencio
internacional, y llaman a países y ciudadanos de todo el mundo a salir a las
calles y actuar para detener el genocidio.